Capítulo 6

El sonido de la expulsión

 

Introducción

 

Domingo a la noche. La hora se acercaba a las 8:30 PM; el día designado finalmente había llegado.

La inminente discusión muy posiblemente determinaría si podremos aunar esfuerzos o no con la Clase 1-D.

O mejor dicho, necesitábamos asegurarnos de lograrlo.

La mayoría de los estudiantes por fuera de la Clase 1-D y la Clase 2-D ya habían encontrado compañeros.

Si esta discusión no logra los resultados deseados, puede que nos veamos en la obligación de realizar múltiples y grandes concesiones con el fin de evitar la sanción.

A Horikita y a mí se uniría Sudou, quien había insistido rotundamente en acompañarnos.

Mientras que probablemente se relacionaba en parte con que quería estar junto a Horikita, estaba bastante seguro que mayormente se debe a que tenía cautela respecto de Housen. Housen era del tipo de persona que, dependiendo de cómo marche la discusión, bien podría levantar su mano contra una chica. Sudou quería estar allí para protegerla de eso. Por supuesto, Horikita lo rechazó, diciendo que su presencia era innecesaria, pero Sudou se rehusó a rendirse. Sin embargo, sin importar cuánto rogara, Horikita mantuvo su postura y se rehusó a permitirle que se una a nosotros. Ella creía que la inminente discusión se tornaría muy seria, y había juzgado que la presencia de Sudou sólo nos retrasaría. En última instancia, terminé interviniendo a favor de Sudou.

Esto se debía a que, sólo en caso de que las cosas se descontrolen, podría contar con que Sudou actúe en vez de mí.

Las habilidades de Sudou probablemente deberían ser más que suficientes para mantener bajo control a Housen.

Al final, Horikita le permitió unirse a nosotros con la condición de que no interrumpiría la discusión ni haría amenazas.

“¡Hey, amigo!”

Bajé al vestíbulo del dormitorio para reunirme con ellos, sólo para descubrir que Sudou ya había llegado, esperando en uno de los sofás.

Por cierto, me miró con una sonrisa brillante y enérgica en su rostro.

Parece que necesito corregir lo que dije antes.

No estaba ‘relacionado en parte’ a su deseo de estar junto a Horikita; él realmente quería estar con ella.

“¿Has estado estudiando para el examen?”

“Por supuesto. Perdón, pero esta vez voy a lograr al menos 250 puntos.”

Dado su actual rango E en Habilidad Académica, si él de verdad fuera a puntuar más de 250, sería un logro inmenso.

Sería suficiente para elevar su clasificación de Habilidad Académica hasta la C durante la valoración del mes siguiente.

Esto no era sólo él soltando palabras vacías. Parece que había trabajado lo suficientemente duro para reunir la confianza que respalde esas palabras.

Raramente llegaba tarde a clases, y su actitud durante las lecciones era extremadamente seria y diligente.

“Has cambiado mucho… Parece que has empezado a disfrutar los estudios.”

“No es como si lo difrutara. Pero te lo diré, se siente bien resolver esos problemas. ¡Y cuando Suzune me elogia, me animo tanto que se siente como si pudiera estudiar por siempre!”

Esa espinosa actitud suya de aquel entonces cuando apenas ingresamos aquí gradualmente había empezado a desvanecerse. Un temperamento impulsivo no parecía ser el hábito más fácil de romper, pero si la presencia de Suzune era suficiente para ayudarlo a mantenerse de pie, eso era suficientemente bueno para mí.

Incapaz de contener su entusiasmo, Sudou se levantó y fue a mirar la transmisión de video del interior del ascensor.

Luego de lo cual, volvió a sentarse jugueteando con su teléfono y pasando su mano por su cabello. Poco después, estaba levantándose de nuevo.

Lucía como un joven que estaba a punto de ir a su primera cita.

“Oye, Ayanokouji.”

Dándose cuenta de que lo había estado mirando, Sudou me murmuró, con sus ojos fijos en la cámara de la pared.

“Si me confieso a ella ahora mismo, ¿crees que Suzune aceptaría?”

Antes de que lo supe, la expresión que se asomaba del perfil de su rostro se había endurecido por completo.

Dado lo serio que estaba, probablemente no podría esquivar la pregunta devolviéndole una respuesta despreocupada.

“Probablemente no.”

Mientras que podría haber sido desalentador, esa era mi opinión honesta y objetiva como una tercera parte en esto.

Estaba casi seguro de que no estaría satisfecho con mi respuesta, pero…

“¿Verdad?”

Sudou estuvo de acuerdo sin parpadear, como diciendo que en su interior ya conocía la respuesta.

“Sé que Suzune no es del tipo de chica que busca amor y romance y todo eso. Pero como que, no es sólo eso… No hay manera de que se sienta atraída por mí como soy en este momento. ¿Cuántas veces mi arrogancia le ha causado problemas ya? ¿Y para toda la clase?”

Como resultado, pensaba que no había forma de que Horikita querría salir con él ahora mismo.

“Estoy trabajando duro estos días, ¿de acuerdo? Pero no voy a fingir que eso cancela toda la carga que he puesto sobre todos. En estos próximos dos años, voy a hacer mi mayor esfuerzo para mejorar mis fortalezas y compensar mis debilidades, poco a poco. De esa forma, para la época en que nos graduemos, definitivamente seré útil para la clase.”

“¿En verdad? Es definitivamente posible.”

Sudou rápidamente se estaba convirtiendo en un recurso valioso debido a sus habilidades físicas sin igual.

Probablemente tenía potencial para desarrollarse en alguien indispensable, tal como Yousuke o Kushida.

También ha logrado tener una mirada más objetiva sobre sí mismo.

De cara a su extensivo crecimiento, sentí que quería preguntarle algo.

“Digamos que pones todos tus esfuerzos y te conviertes en el estudiante más distinguido de nuestra clase… y aun así, Horikita no te mira. ¿Qué harías entonces? ¿Dejarías de estudiar?”

Siempre existe la chance de que uno regrese a su anterior yo luego de descubrir que todos sus esfuerzos habían sido en vano.

Esto era particularmente cierto ya que Sudou estaba trabajando duro por Horikita.

“Por supuesto que lo dejaría. Diablos, probablemente querría morir. Existe incluso la chance de que termine golpeando a alguien. Pero el asunto es que, Suzune probablemente se decepcionaría conmigo si lo hiciera, ¿cierto? Sería súper patético si abandonara mis estudios o me descontrolara o algo. Así que, pasaré de eso.”

Una respuesta espléndida. Y encima de eso, sentía certeza de que sus intenciones eran genuinas. Dicho eso, no había forma de saberlo con seguridad hasta que pase lo peor. Sin importar cuánta determinación tenga uno de antemano, una vez que experimentan el dolor, esa determinación se derrumba.

En cualquier caso, si tiene esta confianza ahora, supongo que no necesito preocuparme por el momento.

“Oh, parece que está viniendo.”

Pudimos ver a Horikita subir al ascensor a través de la cámara. Sudou se levantó y le dio la espalda al ascensor, aparentemente ansioso conforme empezaba a respirar profundo y a estirar sus brazos en una demostración de radio calistenia para calmarse.

Poco después, el ascensor llegó al primer piso mientras Sudou seguía con sus ejercicios de respiración.

“Perdón por hacerlos esperar. ¿Qué está haciendo Sudou-kun?”

“Respirando profundo al parecer.”

Horikita miró ligeramente curiosa por un momento, pero rápidamente regresó a su usual expresión tiesa.

Partimos hacia el lugar de reunión designado. A saber, las salas de Karaoke en el centro comercial Keyaki. Era un sitio extremadamente popular para salidas nocturnas ya que estaba abierto hasta las 10:00 PM, los siete días de la semana.

No hacía falta decirlo, pero el Karaoke era una de las muchas instalaciones recreativas en el campus. Era un lugar principalmente usado para liberar estrés y charlar con amigos, pero en esta escuela, tenía otra ventaja vital e importante.

Su alto grado de privacidad. Era un lugar ideal para mantener discusiones detalladas afuera del reino del ojo público.

De todos los lugares del campus, era la ubicación más conveniente para reunirte sin ser notado por otros.

Por supuesto, en términos de privacidad pura, no había mejor lugar que tu propia habitación en el dormitorio, pero eso no era apropiado para personas específicas.

Con el examen especial la próxima semana, no parecía que haya muchas personas dando vueltas a esta hora del día.

Dado eso, uno podría decir que este era el mejor horario para mantener una discusión secreta con Housen.

“Oigan. ¿En serio creen que podemos lograr que ese mocoso de mierda de primer año trabaje con nosotros?”

“Si no pensara que podríamos cooperar con él, yo no habría pasado tanto tiempo intentándolo para empezar.”

Eso era todo lo que había. Habíamos partido hoy precisamente porque creíamos que era posible.

“La mayoría de los alumnos académicamente capaces ya han sido tomados por Sakayanagi-san y Ryuuen-kun. Por el otro lado, Ichinose-san se ha convertido en un faro de esperanza para los débiles. A estas alturas, si queremos cambiar de estrategias, no tendremos más opción que luchar con puntos o con confianza.”

“Cierto… No vamos a derrotar a Sakayanagi y a Ryuuen con puntos, y no somos rivales para Ichinose cuando se trata de confianza…”

“Exacto. Es por eso que la existencia de Housen nos provee tanto crisis como oportunidad.”

A Housen no le importaba la seducción de la marca Clase A o alguna suma despreocupada de puntos privados.

Asimismo, ni siquiera echó un vistazo al ofrecimiento de ayuda de Ichinose.

Y era por eso que nosotros, la Clase D, teníamos una chance.

“Entonces sólo tenemos que ver cuánto podemos lograr que acepten sin renunciar a nada.”

“Ciertamente. Conforme se acaba el tiempo, nosotros los de segundo año seremos los que estemos en peligro. Puesto que muchos estudiantes ya han hallado un compañero, no podremos evitar terminar en desventaja.”

Si declinamos los términos que Housen nos presente, él simplemente permitirá que nuestros compañeros sean decididos al azar sin pensarlo dos veces. No le importará en absoluto el hecho de que sus propios compañeros también serán sancionados.

Me interesaba ver cómo iba a enfrentarlo Horikita.

 

1

 

“Por cierto… La reunición es a las 9, ¿cierto? ¿No estamos yendo demasiado temprano?”

Aún faltaba media hora hasta el horario prometido.

“Está bien. Quiero llegar temprano.”

Sudou no podía entender el razonamiento de Horikita, pero mantuvo la boca cerrada y continuó.

Quizás ella quería estar en algún punto de observación para alguna trampa, o tal vez sólo quería tiempo para serenarse.

En cualquier caso, Sudou sólo pensaba en nuestro oponente como estudiante de primer año, mientras que Horikita no parecía bajar la guardia en lo más mínimo.

Podría ser incluso que estaba siendo excesivamente cautelosa, pero como nuestro oponente era el propio Housen, no existía la idea de ser demasiado cauteloso.

Luego de recibir un trozo de papel con el número de sala y el recibo de un empleado, los tres nos dirigimos a nuestra sala de Karaoke designada.

“¿Podrías hacerle saber a Nanase-san que ya estamos aquí?”

“De acuerdo.”

Le envié un mensaje a Nanase, contándole que ya habíamos llegado, junto con el número de sala.

Respondió poco después, diciendo que deberían llegar aquí para la hora agendada.

“Adelantémonos y pidamos nuestras bebidas primero entonces.”

“¿No deberíamos esperarlos?”

“Está bien.”

Después de que cada uno eligió una bebida del menú, ella dirigió nuestra atención al menú de comida.

“Pueden ordenar algo si quieren. ¿Qué les gustaría?”

“Entonces pediré algunas papas fritas. ¿De acuerdo?”

“Está bien por mí.”

Con eso, Horikita fue hasta el teléfono fijo que había instalado en cada sala de Karaoke y llevó a cabo la orden.

Sintiéndose algo aliviado por el hecho de que la comida estaba en camino, Sudou fue y con nervios tomó el micrófono de la mesa.

“Ehm, bueno, tenemos algo de tiempo y todo así que, ¿qué tal si cantamos una canción o dos? ¿Eh, Suzune?”

“No me interesa.”

“¿No te interesa?”

Horikita hizo que los tres lleguemos temprano, y luego nos preguntó si queríamos pedir comida y bebidas.

Para Sudou, cantar un par de canciones probablemente se sentía como el siguiente paso lógico, y si se hubiera tratado de alguien más, la mayoría seguramente hubiera estado de acuerdo.

El sentimiento de decepción estaba escrito por todo su rostro, probablemente porque quería escuchar la voz de canto de Horikita.

“Sudou-kun. Sólo para recordártelo otra vez, no digas absolutamente nada innecesario, ¿okey?”

“E-Entiendo, pero como que, ¿no deberías decirle lo mismo a Ayanokouji?”

“Él no es del tipo de persona que habla cuando no es necesario. Mejor dicho, él ni siquiera habla cuando tiene que hacerlo.”

En lugar de elogiarme, Horikita aprovechó esta oportunidad para ventilar sus quejas.

Sudou hizo un puchero, aparentemente descontento con la respuesta de Horikita.

Luego de un rato, una vez cumplida la hora acordada, Nanase apareció por la entrada de la sala.

“Perdón por hacerlos esperar.”

“Fuera del camino, Nanase.”

Una voz resonó por detrás de ella, obligándola a hacer un paso más adentro conforme Housen Kazuomi finalmente hizo su aparición.

“Entonces llegaste a tiempo. Estaba casi segura de que llegarías tarde.”

Horikita estaba diciendo que no se hubiera sorprendido si Housen llegaba tarde a propósito para irritarla, tal y como Miyamoto Musashi había llegado tarde a su duelo contra Sasaki Koujiro en Ganryuujima (1).

“Soy un tipo puntual cuando quiero serlo. No me agradan los bobalicones que tratan de dificultar las mierdas sólo por llegar un poco tarde. Dejando eso de lado, me parece que ustedes llegaron aquí muy temprano… ¿Tenían tanto miedo de hacerme esperar? No sean tan cobardes.”

“Qué interpretación egoísta. Sólo estábamos aprovechando esta rara oportunidad para pasarla bien.”

Con eso, Horikita instó a Housen a echar un vistazo al estado de la sala.

Había varias bebidas, algunas vacías, sobre la mesa junto a comida a medio consumir.

Todo preparado para lucir como si hubiéramos estado disfrutando de una sesión de Karaoke hace sólo unos momentos.

“Así parece.”

Aunque de manera informal, la batalla entre los dos ya había empezado.

“Bueno, como sea. Pronto descubriremos si mienten o no.”

Housen se despatarró sobre uno de los sofás y estiró las piernas, ocupando los lugares de tres personas para él solo.

Se sentó de una forma que uno esperaría de un pez gordo, haciendo difícil imaginar que el hombre en frente de nosotros era en realidad un estuainte de primer año.

“¿Entonces? Según lo que Nanase me contó, suena como que quieren que mi clase los ayude.”

Por cómo sonó, parecía pensar que la Clase 1-D ya estaba bajo su control, su propiedad.

Apenas habían pasado dos semanas desde que ingresó a esta escuela, y aun así hablaba sin el más mínimo ápice de incertidumbre en su voz.

“Es ligeramente distinto de eso. Pretendemos hacer que nuestras clases colaboren la una con la otra. No habría diferencias de estatus entre nosotros, una relación de igualdad por así decirlo.”

“¿Oh, en serio? ¿Entonces no vas a mencionar el hecho de que están un grado por encima de nosotros, eh? No dejan que la antigüedad se les suba a la cabeza. Jugada inteligente.”

Conforme Housen hablaba, Nanase observaba en silencio sin expresar sus propios pensamientos sobre el asunto.

Dado que había asumido el rol crucial de mediadora y que era la única persona que Housen había traído consigo a la discusión, probablemente era seguro asumir que Nanase era alguien a quien Housen reconocía.

Me preguntaba si él estuvo impresionado con su valiente habilidad para declarar que no cedería ante sus amenazas de violencia o si era algo totalmente distinto. En cualquier caso, aún había una manera de forzar su mano y traer a Nanase a nuestro lado.

“Soy muy consciente de que a cierto número de estudiantes de primer año no les importa que sus compañeros de clase estén en problemas. Sin embargo, si echas un vistazo a nosotros, a nuestra clase, estoy segura de que entenderás tarde o temprano que llegará un momento en que necesites la asistencia de tus pares.”

“Entonces, ¿estás diciendo que deberíamos trabajar juntos y evitar que alguien sea suspendido? ¿Es así?”

“Si realmente posees tanta autoridad sobre tu clase que has llegado a ver a tus compañeros como tu propiedad, entonces todo este proceso resulta mucho más conveniente. Todo lo que debería requerir es una sola orden y tendrías a la mayoría de tus compañeros de clase listos para obedecer, ¿cierto?”

En lugar de responder, Housen introdujo su dedo meñique izquierdo en su oído y empezó a girarlo un poco.

Y entonces, una vez que terminó, lo levantó y sopló sobre él en dirección a Horikita.

La expresión de Sudou se endureció de inmediato, pero se mantuvo en línea con la advertencia de Horikita e hizo su mejor esfuerzo para soportarlo.

Sus puños cerrados estaban temblando, presionados contra sus muslos.

Sin embargo, Horikita simplemente aceptó la conducta vulgar descargada de Housen de frente.

“¿Podrías parar?”

“En primer lugar…”

No estaba claro si Housen ignoró por completo la pregunta de Horikita o no, conforme empezó a hablar con lo que parecía ser un tema distinto.

“Eres la líder de la Clase 2-D, ¿no?”

Finalmente se puso a trabajar, verificando que Horikita era alguien digno con quien hablar.

“Podría decirse eso.”

“No creo que haya nada fuera de lugar con que Horikita-senpai sea la líder, dadas sus habilidades.”

Por primera vez desde que llegaron, Nanase abrió su boca y le habló directamente a Housen.

“Entonces le daré a esta ‘líder’ una advertencia. No tengo ninguna intención de cooperar con esta mierda retrasada de ‘igualdad’ tuya.”

No parecía que vaya a facilitarnos las cosas después de todo.

Era inevitable que habría algún tipo de contraste entre nosotros, quienes queríamos proteger a nuestros compañeros cueste lo que cueste, y Housen, a quien particularmente no le importaban los suyos.

Sin mencionar que, entre la expulsión y los tres meses sin puntos privados, existía demasiada diferencia en nuestras respectivas sanciones por reprobar el examen.

“¿Es así? Bueno, supongo que es el tipo de persona que eres.”

“Si puedes comprender eso, ¿entonces por qué no dejas de ser tan jodidamente miserable? Soy todo oídos.”

“¿Todo oídos? ¿Qué estás esperando? ¿En serio piensas que te pagaremos con el fin de que nos ayudes?”

A pesar del hecho de que estábamos en una posición menos que favorable, Horikita no cedió, rehusándose a conceder una pulgada.

“Pagarán. Estoy seguro de que lo harán. No hay una mierda que puedan hacer a estas alturas sin gastar algo. Nanase. Agua.”

Housen expresó sus demandas a Nanase mientras echaba un vistazo al menú del Karaoke.

Ante esto, Nanase asintió y realizó el pedido de agua por teléfono.

“Sé que estoy repitiéndome aquí, pero nuestra propuesta para ti está basada en la igualdad. No tiene nada que ver con nosotros entregando puntos, bienes, o cualquier otra forma de compensación.”

“Si vas a seguir soltando mierda como esa, entonces supongo que no tengo que quedarme esperando a que el agua llegue aquí.”

No había un ápice de vacilación en su rostro conforme empezaba a actuar como quitándose polvo inexistente de las piernas, infiriendo que pronto se levantaría y se iría.

“Por favor espera un momento, Housen-kun. Pienso que primero deberías esperar a que Horikita-senpai termine.”

Nanase, quien había estado escuchando a un costado en silencio, lo instó a detenerse.

“¿Dejarla terminar? Esa mierda no es necesaria.”

“No, lo es. Si seguimos como están las cosas ahora, nuestra clase nunca podrá unirse.”

Horikita estoicamente observó mientras los dos chicos de primer año conversaban.

“¿A quién le importa un carajo? La basura desobediente debería pudrirse. No es gran problema si perdemos algunos don nadies de todas formas.”

“Eso no es así.”

“Nanase, ¿eres una idiota?”

Housen exhaló fuerte, aparentemente más por exasperación que por enfado.

“No recibo nada aceptando sus condiciones como un marica. ¿Qué gano yo de eso?”

“Entiendo lo que dices, Housen-kun, lo entiendo. Es verdad que Horikita-senpai y los demás estudiantes de segundo año están más desesperados que nosotros por proteger a sus compañeros. De hecho, existe un motivo por el cual ellos no tienen más opción que protegerlos. Si nos les damos una mano, sus compañeros correrán el riesgo de ser expulsados. Incluso si fingen ser duros ahora mismo, en algún punto tendrán que conceder, y eso es exactamente lo que estás esperando, ¿no?”

Basado en sus palabras, parecía que Nanase había elegido hablar porque sabía exactamente lo que Housen trataba de hacer.

“No creo que haya algo necesariamente malo en tu estrategia, Housen-kun. Mientras que las otras clases están peleando para buscar compañeros, tú te mantuviste firme, absteniéndote intencionalmente en las etapas tempranas de las negociaciones entre clases. Todo hecho con el fin de asegurarte la ventaja más tarde.”

Conforme la fecha límite se acercaba más y más, los alumnos de segundo año restantes que no habían hallado compañeros empezarán a sentirse más y más impacientes.

Y como resultado, incluso estudiantes sobre los cuales originalmente no valía la pena gastar puntos, de pronto comenzarían a subastarse por un precio decente.

“Ya que tienes todo tan claro, ¿qué tal si tratas de decirme por qué debería aventarle un hueso a esta chica Horikita?”

“Una relación de confianza mutua.”

Nanase giró y miró a Horikita por un momento, a lo cual Horikita asintió en respuesta.

“No me hagas reír. ¿Confianza mutua? Esa es una mierda inútil. Jodidamente inútil.”

“¿Estás seguro de eso?”

Nanase encaró a Housen de frente, desafiándolo conforme procedió a hablar otra vez.

“Es cierto que puede que no necesitemos ceder mucho para este examen especial. Sin embargo, lo mismo podría no cumplirse en futuros exámenes, ¿verdad? Si terminas convirtiendo en enemigos a todos los de segundo año ahora, es posible que no puedas hallarte un compañero más tarde, independientemente de cuántos puntos les ofrezcas. Mientras que estarías bien si sólo tuvieras que lidiar con la sanción del 5%, ¿qué crees que pasaría si la persona con la que acabas sabotea intencionalmente el examen? No serías capaz de evadir la expulsión.”

“¡Ha! ¿De verdad crees que un bobalicón tendrá las pelotas para sacrificarse a sí mismo de esa forma?”

“Te haré saber que he oído que esta escuela tiene algo conocido como puntos de protección.”

Ante eso, Nanase desplazó su mirada de Housen y la fijo sobre Horikita por primera vez.

Puntos de protección. La cosa que yo había mencionado al final de nuestra conversación el viernes en la biblioteca.

Aunque Horikita estaba ligeramente sorprendida de oír a Nanase hablar sobre ellos, inmediatamente captó a lo que Nanase apuntaba y asintió.

“Nanase-san está en lo correcto. Son un tipo especial de puntos que puede cancelar una única instancia de expulsión.”

Por la mirada en el rostro de Housen, no había dudas de que era la primera vez que escuchaba sobre ellos.

“Es comprensible que nunca hayas escuchado sobre ellos, dado que apenas te matriculaste aquí. Es por eso que deberías mentenerlos en mente. Si llegara a haber algún tipo de examen similar a este en el futuro, si la persona con la que te emparejas posee un punto de protección, entonces… bueno, dependiendo de la situación, podrías terminar siendo expulsado por tu propia cuenta.”

Si eres el que convierte a los demás en sus enemigos, cuantos más hagas, más probable será que te toque la negra, como suelen decir.

Sigue la idea de que, cuanto más odie alguien a Housen, más probable será que ese alguien use los medios que sean necesarios para expulsarlo.

“Por eso es importante empezar a construir confianza con los demás, ¿no estás de acuerdo?”

“Ya veo. ¿Entonces ustedes dos retrasadas tenían algunos trucos estúpidos bajo la manga para lidiar conmigo, eh?”

“Soy una estudiante de primer año, por lo que naturalmente mi mayor prioridad es la Clase 1-D. Además, Housen-kun, creo que eres vital para el bienestar de nuestra clase, por lo que no quiero que cometas el error de mirar las cosas a corto plazo.”

Horikita se había esforzado por entender a Housen antes de volcar su atención sobre Nanase.

Había logrado que Nanase coopere con ella, y juntas, desataron el golpe final.

La tendencia había comenzado a invertirse ligeramente.

Todo lo que quedaba era esperar y ver si Housen aceptaría nuestra propuesta una vez que comprendiera todo por completo.

Ver si aun así pediría algún tipo de compensación, decidido a encarar las desventajas que vendrían más tarde.

“Entiendo que las dos se tomaron la molestia de idear todo esto, pero——no voy a cooperar en pie de igualdad.”

Horikita y Nanase se habían tomado el esfuerzo de realizar todo el trabajo preliminar para conseguir que él acepte.

Y aun así, Housen las rechazó sin siquiera fingir que lo pensaba.

“Oye, Housen. En serio estás seguro de estar preparado para convertirte en enemigo de todos nosotros los de segundo añ——”

El temperamento de Sudou comenzó a arder, pero Horikita lo contuvo antes de que pudiera terminar.

“Detente. Aún no ha abandonado la mesa de negociación todavía.”

“La chica tiene razón. No saltes a conclusiones.”

Housen seguía desparramado sobre el sofá, sin mostrar indicios de retirarse pronto, con su actitud tan intimidante y arrogante como siempre.

“¿Entonces qué sigue? No tenemos intención de formar una relación no equitativa.”

“Por supuesto. Ya dejaste eso bastante claro. Tienes agallas, te concederé eso.”

Lentamente unió sus manos en aplauso, aparentemente elogiando a Horikita por sus arduos esfuerzos.

“Dicho eso, esta idea de mierda tuya de una relación ni siquiera es ‘equitativa’ en primer lugar.”

“¿Entonces estás diciendo que si probamos que nuestra oferta es equitativa, cooperarás con nosotros?”

“Eh, podría decirse.”

“Bueno, ahora estoy confundida. ¿Por qué piensas que no es igual? Ambos estaríamos bajo las mismas condiciones.”

“Tienes coraje para tratar de jugar esta basura de relación de confianza, pero esa mierda tiene que ir para ambos lados. Y eso no es suficiente para mí. Es muy lindo que nos cuenten que podríamos terminar en una situación similar en algún punto. Pone malditas lágrimas en mis ojos. Pero eso sólo son ustedes viniendo con esa mierda, nada que puedas garantizar, ¿no?”

Housen ciertamente tenía razón allí.

A nivel fundamental, la propuesta de Horikita estaba basada en la premisa de que nuestras clases se apoyarían la una a la otra. Sin embargo, nosotros éramos los que realmente necesitaban ayuda ahora mismo. El trato sólo se volvería equitativo una vez que la Clase 1-D necesite nuestra ayuda en algún punto en el futuro.

Era una póliza de seguro, por así decirlo, y existía una buena posibilidad de que ellos no sean capaces de usarla.

“Ya veo. Bueno, ya que estás con eso, ¿entonces qué tal si nos cuentas qué quieres exactamente? Sólo como referencia.”

“Entreguen un millón de puntos privados como garantía. Si alguna vez acudimos llorando a ustedes por ayuda, encantado te lo devolveré por completo.”

La cantidad era bastante razonable comparado a cuánto nos costaría hacer un trato con las otras clases.

Sin embargo, si ellos nunca terminan haciendo uso de la póliza de seguro, esencialmente habrían recibido un millón de puntos de manera gratuita.

En resumen, cada punto terminaría directamente en el bolsillo de Housen.

“Si esta mierda tuya de relación de confianza es tan importante, ¿entonces cuál es el problema?”

Si ellos realmente terminan necesitando nuestra ayuda más adelante, entonces el depósito definitivamente regresará a nosotros en algún punto.

“Si te preocupa, ¿qué tal si lo hacemos por escrito?”

Mientras que un contrato por escrito sería reconocido e impuesto por la escuela, eso estaba basado en la premisa de que Housen realmente nos pidiera ayuda en primer lugar.

Existía la posibilidad de que recurra a utilizarlo si alguna vez se encuentra bajo riesgo de expulsión, pero no parecía muy probable que entregaría tantos puntos sólo para ayudar a sus compañeros.

En otras palabras, sería mucho más peligroso que simplemente entregar algunos puntos y firmar un contrato.

Housen no era un arrogante cerebro de músculos. Había realizado su jugada con la más alta habilidad y precisión.

Un oponente calculador, formidable, tal y como Ryuuen.

“Es cierto, lo que estás diciendo no es completamente irrazonable. Dicho eso, no puedo aceptar tus términos.”

“¿En verdad? Qué lástima. Me tomé la molestia de mostrarte una salida a todo esto, y sigues aquí dificultando esta mierda.”

“Ciertamente.”

No parecía que Horikita pretendiera comprometerse si significaba permitir que Housen se llene sus propios bolsillos. Pero con el camino en que las cosas se estaban dirigiendo, parecía que podríamos terminar dejando que nuestros compañeros se decidan al azar. En cuyo caso, no tendríamos más opción que hacer que nuestros compañeros con clasificación de Habilidad Académica baja escapen a las otras clases, incluso si significaba quemar los fondos necesarios para hacerlo.

“¡Ha!”

Luego de soltar una corta risa, Housen se inclinó hacia delante de su posición despatarrada sobre el sofá por primera vez desde que se sentó.

Y entonces, se cercó a Horikita y la sujetó del cuello de su camisa.

El primero en reaccionar fue Sudou, quien había estado vigilando atentamente al lado de ella.

Con una mirada furiosa en sus ojos, sujetó el musculoso brazo del estudiante de primer año.

“Oye, bastardo… No le levantes la mano a una chica.”

“Oho, ¿así que el retrasado más grande por fin se sube al escenario?”

“Tranquilo, Sudou-kun.”

“¡Pero——!

“Sin peros. Las negociaciones no terminaron aún.”

Mientras que parecía como si las negociaciones se hubieran roto, Housen aún no había declarado tal cosa de manera explícita.

“Sí que tienes ojos llenos de confianza. ¿Crees que no moleré a palos a una chica? ¿O tal vez tratas de abusar del hecho de que eres una humilde perra para que puedas vencerme?”

“Qué palabras tan inapropiadas para decir en estos días y época. ¿Qué tal si te retractas de la misoginia para evitar poner en tu contra a las mujeres del mundo?”

“Bueno entonces qué tal si te doy una mejor opción. Si pueden vencerme en una lucha, aceptaré tu pequeña propuesta. ¿Qué tal eso?”

Con lo cual, Housen nos presentó una oferta bastante infantil.

“¿Qué tal si te tomo la palabra entonces? ¿Tienes algún problema con eso?”

“Puedes ser tú, ese aburrido Ayanokouji, o incluso esta perra. Al diablo, ¿por qué no los tres al mismo tiempo?”

Housen habló sin pudor.

“¿Está bien, cierto, Suzune? Si gano, terminaremos con toda esta basura. Además, ya estoy muy pero muy harto de este bastardo.”

Sudou estaba alcanzando a los límites de su paciencia con Housen, cuya mano seguía aferrada al cuello de Horikita.

“Decidir el resultado de esta negociación con una pelea es demasiado absurdo. Incluso si es la única carta que nos queda para jugar, no estaremos de acuerdo.”

“¿Por qué no? El bastardo dijo que estaba de acuerdo, no veo el problema.”

Ignorando las objeciones de Sudou, Horikita serenamente expresó sus pensamientos con palabras.

“En verdad pensé que serías un poco más inteligente que esto, Housen-kun. Hace no mucho, cuando apareciste la primera vez afuera de los salones de segundo año, las cosas que dijiste me dieron la impresión de que querías que nuestras clases trabajen juntas. Yo sentí lo mismo. Sentí que sería maravilloso si pudiéramos cooperar como estudiantes colegas de la Clase D.”

“Bueno, puede que haya dicho algo así.”

“Pero—— Parece que sólo fue un malentendido de mi parte. En realidad no pensabas eso en absoluto.”

Horikita cerró sus ojos por un momento y se tranquilizó a sí misma antes de continuar.

“Esta discusión se acabó.”

Al final, no fue Housen quien puso fin a las negociaciones, sino la propia Horikita.

En el momento que las palabras cruzaron sus labios, rastros de enojo se asomaron a través de la expresión antes despreocupada de Housen.

Entonces, Housen soltó su agarre de la camisa de Horikita, y al ver esto, Sudou se tragó su enfado, soltó el brazo de Housen, y empezó a resituarse en su asiento.

Pero menos de un segundo después——

¡Salpicadura! Gotas de agua esparcidas por toda la sala de Karaoke.

Housen había levantado su vaso de agua y lo había volcado en el rostro de Horikita.

Probablemente no había forma de que Horikita hubiera podido anticiparlo antes de que sucediera.

Pero, antes de que pudo siquiera emitir un solo sonido, Sudou ya se levantó de la mesa, a momentos de lanzarse contra Housen.

“¡¡¡Hijo de perra!!!”

Sudou ya había estado haciendo todo lo que pudo por mantener su temperamento bajo control, pero finalmente perdió todo sentido de la razón debido a lo que acababa de pasar.

Nadie podía culparlo por perder la calma, después de todo, la chica que le gustaba había sido humillada frente a sus propios ojos.

Housen, por otra parte, permanecía tan presumido y desdeñoso como siempre.

“¡Detente!”

Conforme Sudou arremetió hacia él, rugiendo con furia, Horikita vociferó con una voz severa, haciendo que pare.

Si se lo hubiera dicho apenas un segundo después, el puño de Sudou habría golpeado directamente la mejilla de Housen.

“Sudou-kun… No caigas en su trampa tan descuidadamente.”

“¡Lo sé, maldición, pero aun así!”

Horikita fijó sus ojos sobre Housen sin siquiera tomarse la molestia de secar su cabello mojado.

“Si estabas desconforme por el hecho de que las negociaciones se hayan roto, quizás deberías haberte comportado un poco mejor.”

Horikita había querido establecer una relación cooperativa con Housen cueste lo que cueste.

Y aun así, a estas alturas, incluso ella comprendía la inutilidad de mayor discusión.

Luego de un breve intercambio de miradas intimidantes, Horikita giró y apartó la vista, como diciendo que había visto todo lo que necesitaba.

“Vámonos.”

“¿E-En serio?”

Aunque Sudou estaba frustrado, le preguntó a Horikita otra vez, sólo para asegurarse.

“¿Estás seguro, Housen-kun?”

Nanase le hizo a Housen la misma pregunta al mismo tiempo.

“¿Sí?”

“Personalmente pienso que deberíamos haber cooperado con Horikita-senpai.”

“¡Hah! Ellos son los que lo cancelaron. ¿Quieres que vaya y los detenga?”

Y así, la discusión terminó sin Housen diciendo no más que eso, y así nada más las dos partes se divolvieron.

Discretamente eché una mirada de reojo a Horikita. Después de todo, el fracaso de hoy sin dudas crearía un montón de problemas de aquí en adelante.

Pero desde donde me encontraba, la expresión de Horikita no parecía desanimada en absoluto.

A juzgar por la mirada en su rostro, no parecía que esto haya acabado aún.

 

2

 

Una vez que Horikita había pagado nuestra cuenta, los tres abandonamos el Karaoke. Mientras que parecía que esto fue el fin de todo el asunto, Housen y Nanase nos seguían por detrás. Conforme caminábamos, Sudou ocasionalmente veía por encima de su hombro para mirarlos de manera amenazadora, pero no llegó al extremo de expresar sus quejas ya que ellos tenían la misma ruta de regreso.

Housen, habiendo notado lo que Sudou estaba haciendo, nos habló sospechosamente.

“¡Esperen!”

“No hay razón para que los esperemos. Terminamos de hablar.”

Horikita hizo oídos sordos, pero Housen no mostró signos de ceder.

“De acuerdo, lo admito. Tenías razón, Horikita. Aquel día, salí con la intención de reunirme con la Clase 2-D. Después de que llegué aquí, no me tomó mucho darme cuenta de que la Clase D era el grupo más debilucho de la escuela. En vez de ser ridiculizado por el resto de las clases, pensé que sería más rápido ir y trabajar con ustedes, siendo colegas de la Clase D y todo.”

Parece que Housen ciertamente había estado enviando señales a la Clase 2-D en aquel entonces, tal y como Horikita había predicho.

Dicho eso, si su objetivo había sido o no formar la misma relación cooperativa equitativa con Horikita, era una cuestión completamente diferente.

“¿Y?”

“¿Y? ¿Estás segura que no quieres continuar la discusión? Tú y yo somos similares, camaradas incluso. Dos líderes que pensaron lo mismo.”

“Mientras pretendas seguir haciendo demandas ridículas, nada va a cambiar.”

“¿Qué, en serio vas a continuar a ciegas? ¿Aceptando la sanción y dejando que esta mierda se decida al azar?”

“Síp. Estoy totalmente preparada para aceptar la sanción si tenemos que hacerlo.”

Mientras que era ciertamente una posición dolorosa, no era nada que no fuéramos capaces de superar.

Gracias a los esfuerzos de Kushida y los demás, muchos de aquellos con rangos D y E ya habían encontrado compañeros, prácticamente garantizando su seguridad.

“Ya veo. ¿Entonces qué tal si propongo algo así?”

Horikita no había acordado reabrir las negociaciones, sin embargo Housen empezó a hablar por su cuenta.

“Le ordenaré a los bobalicones de mi clase que formen pareja con ustedes, así que entreguen los puntos. Dos millones.”

En lugar de conceder, Housen abrió la discusión de nuevo e incrementó el precio todavía más.

“¿Dos millones? Parece que por fin enloqueciste, ¿hmm?”

“Eres libre de decir lo que quieras, pero esta es tu única forma de garantizar que ninguno de ustedes sea eliminado. La mayoría de los chicos de las otras clases ya han encontrado compañero. No conseguirás una mierda si sigues siendo tacaña. ¿O tal vez realmente quieres que los aplaste?”

A estas alturas, llegamos a la intersección de los dos caminos hacia los dormitorios del primer y segundo año.

Horikita se detuvo antes de voltear para responderle.

“¿Aplastar? ¿Y cómo planeas hacer eso? ¿Saboteando intencionalmente sus puntajes? No serías lo suficientemente valiente para hacer eso. No podrías. Después de todo, tienes que cumplir con las reglas como todos los demás. Dicho eso, todo lo que mis compañeros y yo necesitamos hacer es concentrarnos en asegurar al menos 501 puntos sin importar cuáles combinaciones al azar terminen sucediendo.”

“No hay necesidad de ir con algo tan complicado. Los aplastaré con esto aquí mismo.”

Con una sonrisa sinmiedo, Housen mostró su puño.

“¿Gobernar por violencia, huh? Gente como tú abunda a montones, tal parece.”

“No me importa un carajo lo que pienses al respecto. Así es como hago las cosas.”

“Qué bien. En ese caso, no parece que nos volvamos a ver cara a cara entonces.”

Ante eso, Horikita siguió caminando una vez más.

Parece que no tenía intención de ceder hasta el final.

“Aguarda.”

“¿Ahora qué?”

“Entiendo. Pensaré sobre lo que dijiste.”

En el último momento posible, Housen dijo algo que yo no había esperado que dijera.

“¿Qué tratas de decir?”

“Tratar de mantener la ventaja hasta el último minuto, mierda como esa es natural en una negociación, ¿no?”

Con eso, Housen estaba diciendo que todo esto sólo había sido parte de su estrategia de tratar de forzar una concesión de Horikita.

“Entonces en otras palabras, ¿estás aceptando iniciar en una relación completamente equitativa con nosotros?”

“Piénsalo como si nuestra discusión entrara en tiempo extra. Probablemente haya personas mirando aquí, ¿qué tal si vamos a otra parte?”

Era alrededor de las 10:00 PM del domingo. Mientras que la mayoría de los estudiantes ya deben haber vuelto a los dormitorios, si alguien aparecía, definitivamente podrá escuchar nuestra conversación.

“Aun así, no podemos traerlos al dormitorio con nosotros.”

Dado el toque de queda, no había ningún lugar apropiado para continuar la discusión.

Sin embargo, el tiempo se estaba acabando y ninguna de las partes quería alargar esto más de lo que ya lo habían hecho.

“Donde sea está bien. Detrás del dormitorio, en alguna otra parte, no me importa. No tomará mucho.”

Housen estaba rebosando de confianza, por lo que Horikita no tenía mucho motivo para rechazarlo.

Después de todo, a pesar de haberlo desestimado primero, que Housen la siguiera después de esta forma era exactamente lo que ella había estado esperando.

“…Bien. Te daré 10 minutos.”

“Por allí entonces.”

Housen nos guió a los dormitorios del primer año que habían pertenecido a los estudiantes de tercero el año pasado.

Y entonces, rodeamos el frente del edificio y nos dirigimos a la parte de atrás.

Era una área silenciosa y oscura que no servía particularmente para nada más que ser un lugar donde se descartaba basura, por lo que parecía seguro asumir que no nos toparíamos con nadie dado lo tarde que era.

“Entonces continuemos con esto, ¿sí? Nuestras condiciones no han cambiado en absoluto. Estás de acuerdo con eso, ¿verdad?”

“Bueno…”

Como un gesto para denotar su consideración, Housen se cruzó de brazos por un momento.

Poco después, descruzó sus brazos y extendió su mano derecha con tres dedos levantados en el aire.

“Tres millones. Entrega eso, y salvaré a todos tus compañeros retrasados de inmediato.”

Todos los presentes, incluido yo, quedamos absolutamente perplejos ante su ridícula propuesta.

“¿Qué diablos estás diciendo siquiera?”

Era total y completamente desconcertante. Incluso Horikita no pudo evitar suspirar.

Housen se suponía que trataba de salvar la discusión, no elevar el precio cada vez.

Parece que había ido más allá del reino del sentido común a estas alturas.

“¿Estás sorda, maldita perra? Dije que entregues tres millones, y resolveremos esta mierda.”

“¿Qué, estás jodiendo con nosotros? ¡Suzune ya te dijo que no entregaremos un solo punto!”

“No estoy bromeando. Después de todo, me tomé la molestia y el esfuerzo de darles otra oportunidad aquí, ¿no?”

Hablaba como si él fuera el que había arreglado todo esto en primer lugar.

“Traté de darles otra oportunidad, pero parece que fue un juicio equivocado después de todo…”

La chance de que Housen hubiera tomado una decisión sincera había sido un último rayo de esperanza, pero al final, esa fe había sido inapropiada.

“¡Detente ahora mismo! ¡De verdad piensas que puedes irte?”

Housen golpeó ligeramente su puño contra la pared a su lado, demostrando su actitud intimidante por completo.

“Oh, entonces sólo porque estamos detrás de los dormitorios quieres resolver esto con uno de tus distintivos arrebatos violentos, ¿es eso? ¿De verdad crees que te saldrás con la tuya así?”

“Al menos podré molerlos a palos a ustedes, estúpidos de mierda. ¿Qué tal eso?”

“Bien, haz lo que quieras.”

Negando con la cabeza, Horikita empezó a retirarse.

Probablemente no pensaba que Housen realmente recurriría a lo físico.

Sin embargo——

Nanase, quien había permanecido de pie a un costado, volteó y apartó la vista.

Casi como si hubiera anticipado qué iba a pasar a continuación.

Housen hizo su jugada.

“¡¡Suzune!!”

Sudou frenéticamente gritó al tiempo que corrió hacia ella y la jaló hacia atrás.

El pie de Housen velozmente barrió a través del mismo sitio donde Horikita había estado hace sólo unos momentos.

Y entonces, así nada más, el enorme estudiante de primer año procedió a arremeter hacia ella.

“¡¿?! ¡Qué dia——!”

En este punto, Horikita finalmente se dio cuenta de que Housen iba en serio, pero su cuerpo estaba congelado y no se movía aunque quisiera.

Para protegerla, Sudou se ubicó entre los dos, atrapando el golpe con su cuerpo.

“¡Guh!”

“¡Jajaja! ¡Veamos cuánto puedes aguantar!”

“¡Venga! ¡No tendré piedad con un bastardo que levanta su mano contra Suzune!”

Riendo alegremente, Housen desató un ataque sobre Sudou.

Y, habiendo alcanzado el límite de su paciencia hace mucho, Sudou respondió con todo.

“¡¿Qué, qué demonios está pensando este sujeto…?!”

Era comprensible que Horikita se sintiera sacudida por el inicio de una lucha auténtica frente a sus propios ojos.

Podría no ser suficiente para una expulsión directa, pero la suspensión seguramente no quedaría afuera de la mesa.

“Horikita-senpai, ¿podrá ser que, tal vez esta escuela es un poco distinta de cómo era antes?”

Nanase, quien había estado observando este inexplicable giro de eventos con una mirada fría en su rostro, le hizo una pregunta a Horikita.

“Así como ustedes los superiores están más familiarizados con los eventos del año pasado, nosotros los alumnos de primer año tenemos una mejor comprensión del sistema actual.”

“¿Qué quieres decir…?”

“Poco después del ingreso, varios representantes del primer año fueron convocados al salón del consejo estudiantil para recibir una explicación personal del Presidente Nagumo. Él dijo que, a partir de este año, los estudiantes tendrán permitidas ciertas libertades con el fin de convertir a la escuela más en una meritocracia.”

“¿Estás diciéndome que pelear es una de esas libertades?”

“No diría eso. Aunque, a partir de lo que Housen-kun ha confirmado, el Presidente ha declarado que cierta cantidad de riñas entre estudiantes es inevitable, y por lo tanto prometió que no sería juzgado tan duramente como lo era antes.”

Comparado con Manabu, el hermano mayor de Horikita, Nagumo tenía una mentalidad más tolerante cuando se trataba de luchar.

Ya que el consejo estudiantil actuaba como árbitro en disputas entre estudiantes, si era verdad que ahora toleraban cierto grado de peleas, entonces ciertamente sería difícil que esto lleve a un recurso apropiado.

Conforme la conversación entre Horikita y Nanase progresaba, la pelea entre Sudou y Housen ya había comenzado a inclinarse en una dirección.

“¡Oraa!”

Incluso cuando se lo comparaba con la alta fuerza y rápidos reflejos de Sudou, Housen se encontraba en otro nivel conforme procedía a golpear a Sudou contra la pared.

Housen entonces procedió a sujetar a Sudou del cuello con ambas manos y lo levantó, haciendo que sus piernas se eleven en el aire.

“¡B-Bastardo!”

Habiendo perdido terreno en más de un sentido, Sudou llevó a cabo una muestra desesperada de resistencia, pero dada su posición, no había mucho que pudiera hacer.

Con su objetivo completamente inmovilizado, Housen empezó a aplicar presión sobre su agarre, como tratando de aplastarlo con la pared.

“¡Kh! ¡H-Hijo de perra!”

Sudou aferró el brazo de Housen y, a pesar de su limitado espacio, desató un golpe con su rodilla, haciendo que Housen se tambalee ligeramente.

Entonces aprovechó la oportunidad para liberarse del agarre de Housen, sólo para que Housen desate una patada directa momentos después. Mientras que Sudou se había preparado para soportar el golpe, la fuerza bruta ejercida lo envió a chocar contra la pared atrás.

Los dos parecieron estar igualados el uno con el otro antes que la pelea empezó, pero luego de ver la forma en que había progresado, la diferencia entre ellos era considerable.

Dada su tendencia a crear enemigos constantemente, Sudou muy seguramente había estado involucrado en varias peleas antes de esto.

Su habilidad atlética y físico habían sido entrenados a través de los años de jugar básquet, por lo que él probablemente nunca había conocido a alguien que pueda igualarlo.

Housen, no obstante, era incluso más excepcional. Comparado con Sudou, Housen probablemente había participado en un número inconcebible de peleas y desafiado otras incontables situaciones peligrosas. La diferencia en experiencia era tan clara como el día. Su gran contextura física y brazos largos se sentían fuera de lugar dado que había apenas un año de diferencia entre ellos. Y aun así, a pesar de su masivo tamaño, seguía siendo notablemente rápido con sus pies. Su talento natural ciertamente era digno de admirar.

Esta fue la razón por la que el propio Ryuuen de entre todas las personas, había evitado pelear con él.

Ryuuen sabía que simplemente no era un oponente que podía ser derrotado en un combate directo mano a mano.

Pero aun así, Sudou no iba a caer tan fácilmente. Después de todo, su fuerza pura era casi sin igual entre todos los de nuestro año escolar. Sin embargo, eso simplemente significa que sería el saco de boxeo de Housen hasta que lo haga.

Housen procedió a desatar una cortina constante de puñetazos sobre Sudou.

A pesar de que Sudou quería aprovechar cualquier oportunidad que podía para devolver los golpes, tenía las manos ocupadas bloqueando los ataques de Housen.

Cada vez que trataba de pasar a la ofensiva, aunque sea sólo un poco, otro golpe llegaba e instantáneamente atravesaba sus defensas.

“¡Ninguno de nosotros gana nada haciendo las cosas así!”

Horikita vociferó, pero Housen no escuchaba. A estas alturas, sería imposible detener a Housen sólo con palabras.

Su voz, sin embargo, sí alcanzó a Sudou, quien miró en su dirección por un segundo.

La voz de Horikita, la voz de la chica que tenía que proteger, de alguna forma encendió una llama dentro de él.

“¡¡¡Graaaah!!!”

Con la determinación de sacrificarse de ser necesario, embistió a Housen y lo alejó de la pared, tratando lo más que pudo por derribar a su oponente.

“Oho. ¿Así que tratas de venir a mí con fuerza bruta, eh?”

Housen recibió el impacto de la gran contextura física de Sudou de frente, burlándose conforme sujetó el cuerpo de Sudou y lo levantó otra vez.

“¡¿W-Woaah?!”

Entonces dio media vuelta antes de soltar a Sudou y alejarlo de un empujón con su mano izquierda, efectivamente intercambiando lugares con él.

“¿Acaso estar contra la pared fue demasiado para ti? ¡Esto debería ser suficiente ventaja, así que hazte hombre y ven contra mí!”

“¡Deja de joder conmigo!”

Sudou rugió, con su motor corriendo a máxima potencia.

Se preparó para arremeter contra Housen, totalmente comprometido a aprovechar la ventaja, pero antes de que pudiera——

“Oye, Sudou, echa un vistazo a la cara de Horikita. Está mirándote con ferocidad, ¿ah?”

Conforme habló, Housen abrió su puño y señaló a Horikita, quien estaba de pie detrás de Sudou.

Justo cuando su pelea estaba llegando a su pico, Housen bajó la guardia. En este punto, Sudou de repente se dio cuenta que había perdido la calma y se había involucrado en una completa lucha. Preocupado por cuán enfadada Horikita debe estar con él por romper su promesa, le dio la espalda al formidable enemigo que yacía en frente de él.

Por supuesto, no era como si Horikita estuviera contenta de que Sudou peleara.

No obstante, su expresión no era una de enfado, sino una de preocupación y angustia por no saber qué necesitaba hacer.

Sólo pudo gritarle, rogándole que se diera vuelta. Sólo para ver cómo él cedía este letal momento de descuido.

Para el momento que él se dio cuenta que lo había arruinado, ya era demasiado tarde.

Con una diabólica sonrisa en su rostro, Housen enterró su puño directo en la mejilla de Sudou mientras estaba de espaldas.

Un feroz golpe que parecía haber surgido de ninguna parte.

Aunque Sudou era más que capaz de recibir un puñetazo, probablemente nunca había experimentado un golpe como este.

Si se hubiera tratado de un estudiante común sin entrenamiento en su cuello, este puñetazo podría haber tenido serias consecuencias.

Voló con tal fuerza que se deslizó por el suelo luego de que aterrizó, incapaz de siquiera intentar mitigar la caída.

“¡¿Guh——?!”

Sudou exclamó con una voz casi inaudible, casi desmayándose del ataque de dolor.

A pesar de que había estado ganando sin el uso de trucos engañosos, Housen había elegido deliberadamente ponerle fin teniendo esta trampa.

Había querido lastimarlo, no sólo física, sino también mentalmente. Aunque no parecía que Sudou haya perdido la consciencia, puesto que estaba retorciéndose sobre el suelo en pura agonía.

Luego de atestiguar todo lo que había visto hoy, me encontré reevaluando qué clase de persona era verdaderamente Housen Kazuomi.

¿En qué estaba pensando? ¿Qué estaba sintiendo? ¿Qué le había llevado a concurrir a las negociaciones de hoy en primer lugar? Horikita tuvo razón cuando dijo que él había sonado como si quiera unirse a nuestra clase en aquel entonces cuando lo conocimos. Encima, incluso había admitido antes que vio el valor en tener a las dos Clases D trabajando juntas. Hasta hace poco, había estado haciendo completo uso de su posición ventajosa con el fin de presionarnos, y eso no había sido un enfoque exactamente malo a tomar.

Sin embargo, una vez que vio lo difícil de someter que era en realidad Horikita, probablemente resolvió que su enfoque no iba a funcionar.

Se había dado cuenta que, si nada cambiaba, Horikita se rendiría con la idea de trabajar juntos. Pero incluso entonces, en lugar de tratar de comprometerse, él decidió aumentar la agresión todavía más, eventualmente llevando a un comportamiento increíblemente beligerante.

Había volcado agua sobre Horikita antes, y ahora había llegado al punto de forzar una confrontación seria con Sudou.

¿Cómo podía mantener una actitud tan engreída y violenta cuando la suspensión y la expulsión se encontraban en la línea?

Me había estado haciendo esta pregunta desde hace mucho tiempo.

¿Realmente pensaba que podía decidir todo sólo con violencia?

Eso no parecía acertado tampoco. No parecía razonable pensar que fuera tan estúpido.

En cuyo caso, ¿qué buscaba? ¿Qué rayos conseguiría Housen al forzar una pelea así?

“De acuerdo, parece que tu confiable guardaespaldas tragó el polvo. ¿Quién sigue?”

Housen empezó a acercarse, alternando su mirada entre Horikita y yo.

A pesar del hecho de que había estado peleando con Sudou, su respiración no estaba fatigada en lo más mínimo.

“Tú… ¿De verdad crees que nos rendiremos ante la violencia?”

“Si no, entonces voy a molerlos a palos, hacerlos llorar un poco, y que escriban un par de contratos de cumplimiento obligatorio. Y si dicen que no, entonces seguiré volviendo, cazándolos, estúpidos, hasta que queden muertos en el piso.”

Sin importar cuán tolerante pueda ser el consejo estudiantil cuando se trata de riñas, seguiría habiendo problemas si las cosas iban demasiado lejos. Además, si él la obligaba a ella a firmar un acuerdo escrito bajos estas circunstancias, no había forma de que se sustente luego. También era posible que fingiéramos obedecerle con el fin de zafarnos de esto, pero Horikita probablemente no querría hacer eso. Después de todo, ceder ante la forma de hacer las cosas de Housen simplemente no era una opción.

“…Que así sea. Yo seré quien te detenga entonces.”

Horikita fortaleció su determinación y adoptó una pose de lucha.

“Ooh, interesante. Si quieres desafiarme, entonces encantado te tomaré la palabra.”

Housen probablemente no esperaba que Horikita tuviera alguna experiencia en luchas o artes marciales.

Pero él no era un oponente que caería con un truco barato como ese, algo que Horikita aún no había logrado comprender.

De repente, sin previa advertencia, Housen sacudió su brazo.

Horikita ágilmente burló su alcance y procedió a ir por un nocaut con un golpe dirigido a su mandíbula.

Había apostado todo en preparar este golpe único e instantáneo.

“¿Oh?”

Sin embargo, antes de que el golpe pudiera hacer contacto, Housen sujetó su delicada muñeca sin mucho más que parpadear.

“Maldita perra, ese fue un movimiento bastante bueno. Pero——”

Housen levantó su otra mano alto en el aire y la agitó hacia abajo duro, abofeteando a Horikita en la cara.

Horikita trató como pudo de esquivar o protegerse, pero frente a la abrumadora velocidad y poder de Housen, simplemente no había nada que pudiera hacer más que recibir un golpe directo. Su cuerpo voló como si hubiera sido golpeado por un puño. Tropezó en el suelo, mitigando su caída.

“¡S-Suzune!”

Sudou exclamó conforme hacía su mejor esfuerzo por ponerse de pie, apretando los dientes por el dolor.

Pero sus piernas no se movían como quería, por lo que no pudo levantarse apropiadamente.

“Yo, Horikita. Hagamos un maldito trato de una vez.”

Horikita alzó la vista hacia Housen desde donde se encontraba en el piso conforme el estudiante de primer año se acercaba a ella, expresando sus demandas.

“Cinco millones. Ese monto, y todos tus problemas desaparecerán. ¿Qué tal?”

El precio exigido se había disparado aún más. Tan alto, de hecho, que no podíamos pagarlo aunque quisiéramos.

“¿Q-Qué clase de broma enferma es esta…? Ayanokouji-kun… Llama a alguien, llama a los profesores…”

La intervención adulta probablemente era la única forma que quedaba para contener la situación a estas alturas.

Alternativamente, si un gran número de personas fueran a reunirse, incluso Housen no tendría más opción que frenar su puño.

“¿Entonces a esto se han reducido…? Bueno, supongo que tiene sentido. ¿Pero están seguros de que quieren buchonearme? Aunque ninguno de ustedes hizo una mierda, ¿qué planean hacer sobre el hecho de que los dos también lanzaron puñetazos? ¿En serio quieren ser suspendidos junto a mí?”

Incluso si apelábamos que sólo habíamos actuado en defensa propia, inevitablemente también enfrentaríamos algún tipo de repercusión.

Dicho eso, seguiríamos estando mucho mejor al hacer que intervenga una tercera parte que si dejamos que las cosas continúen así.

“¡¡Hijo de perra!!”

“¡Quédate ahí, retrasado!”

De vuelta de pie, Sudou se lanzó a sí mismo contra Housen una vez más, sólo para ser pateado de forma despiadada de regreso al piso. Luego de lo cual, el alumno de primer año finalmente puso su vista sobre mí.

“¿Cuánto más planeas quedarte ahí mirando, cabrón?”

“E-Escapa… Ayanokouji… kun…”

“¿Escapar? Ni siquiera lo pienses. ¡Tú marica te vas de aquí, y haré que esos dos felpudos conozcan todo un nuevo mundo de dolor!”

Incluso ahora, sigo pensando.

¿Exactamente qué quería Housen de todo esto?

¿Realmente trataba de obligarnos a cumplir con sus exigencias que no tenían chance de ser aceptadas?

No, eso era muy poco realista.

“Horikita. Te daré una última oportunidad.”

“¿Última…?”

“Si te sometes ante mí aquí mismo, ahora mismo, y entregas los puntos——dejaré vivir a Ayanokouji.”

Tras lo cual, Housen metió la mano en su bolsillo y sacó algo. Se había puesto bastante oscuro afuera, por lo que por un momento fue difícil discernir de qué se trataba exactamente, pero una vez que reveló su punta afilada, un brillo plateado destelló en la luz de la luna.

“¡¿Q-Qué estás, eso…?!”

“¿No te funcionan bien los ojos? ¡Es un cuchillo, así de simple!”

Por la forma en que la hoja brillaba, claramente era distinto de uno de esos cuchillos retráctiles de juguete que solían usarse para trucos de magia y demás.

“Si me niegas otra vez, apuñalaré a Ayanokouji con esto.”

“¡Deja de hacerte el tonto!”

“No estoy jodiendo con ustedes. Encantado apuñalaré a este gamberro si significa conseguir los puntos.”

Blandiendo el cuchillo en su mano derecha, Housen lentamente giró para encararme.

“Aun así, incluso después de todo esto no logro encontrarle un maldito sentido. ¿Qué hace a un gamberro como tú tan jodidamente especial?”

Con sus ojos fijos sobre mí, Housen habló, con una voz cargada de exasperación.

“¡Al demonio, quizás ni siquiera necesitaba hacer toda esta mierda riesgosa en primer lugar!”

Por la forma en que estaba hablando, parecía como que la ridícula cadena de eventos que él había orquestado hasta ahora había sido llevada a cabo porque era consciente de algo. Esperando algo.

Se acercaba a mí, un paso a la vez.

Sin embargo, Nanase, su propia compañera de clase, se interpuso entre los dos, deteniéndolo en seco.

“¡Por favor no sigas más! ¡No puedo aprobar tus métodos después de todo… no puedo!”


Abrió sus brazos en un intento por bloquear su paso.

“Fuera del camino, Nanase. Tu trasero sólo está aquí para evitar que ellos escapen, conoce tu maldito lugar.”

“Tomé la decisión de prestarte mi fuerza hasta el final, diciéndome a mí misma que era por el bien de la clase. Sin importar cuán deplorable fue tu estrategia, pensé que estaría dispuesta a aceptarlo. Pero ahora veo que me equivoqué.”

Con sus pies firmemente plantados entre Housen y yo, desplazó su mirada hacia Horikita.

“Horikita-senpai, trabajar junto con Housen-kun ha sido imposible desde el principio. Estuviste inspirada para cooperar con nosotros después de escucharlo mencionar a la Clase 2-D cuando fuimos a buscarlos en frente de los salones de segundo año, pero… Eso sólo fue una estratagema para lograr que las cosas progresen hasta este punto. Incluso si pagaras la intolerable cuota que está pidiéndote, seguirías quedando sujeta a este mismo destino.”

Naturalmente, la angustia de Horikita se sintió aún más luego de oír a Nanase exponer tal impactante revelación.

Sin importar lo mucho que ella intentara negociar, Housen nunca hubiera aceptado de todas formas. Y esto no era culpa suya tampoco. Ninguno de nosotros podría haber predicho que las cosas resultarían así.

Considerando todo, esta incomprensible serie de eventos probablemente se reducía a un desequilibrio de información. Housen y Nanase habían recibido información que nosotros no. Siendo ese el caso, no había manera de que hubiéramos podido tener una negociación apropiada en primer lugar.

“Todos tus chillidos me están cabreando. Tú fuiste la que me pidió que lidie con esta mierda para empezar. Nuestra clase recogerá pilas de dinero si nos deshacemos de este tipo Ayanokouji. Sólo piensa en la ventaja que nos daría.”

“Eso es cierto. Sin embargo, no puedo entender la razón por la que necesitamos apuntar a él de esta manera.”

“Esa mierda no tiene nada que ver conmigo. ¡Si vas a estorbarme, entonces tú también puedes irte a la mierda!”

Housen preparó un amplio arrebato y barrió a Nanase a un lado con la palma de su mano, tal y como lo había hecho antes con Horikita.

Mientras permanecía de pie solo, observando esta escena desatarse en frente de mí, llegué a una sola conclusión. Y con ella, todo encajó.

“¡Prepárate, Ayanokouji!”

Vino hacia mí, arma letal en mano. Naturalmente, todos los presentes estaban viéndolo ir y tratar de apuñalarme con él.

Riendo, levantó el cuchillo por encima de su cabeza.

Pude sentir mi mente empezar a aclararse mientras bajaba mi postura.

“¡Ayanokouji-kun——!”

Mientras que la mayoría de la gente hubiera tratado de escapar, en cambio arremetí contra él.

Y al hacerlo, todos los que miraban deben haber pensado que enloquecí.

Después de todo, precipitarse de cabeza contra un oponente con un cuchillo no era un indicio de cordura.

Especialmente cuando dicho oponente era alguien tan formidable como Housen. La sonrisa de Housen se agrandó todavía más cuando lo hice. Probablemente pensó que yo era un tonto por salta arremeter contra él.

Pero yo no estaba tratando de evitar ser apuñalado en absoluto.

Conforme me acerqué más, Housen agitó su brazo, haciendo caer el cuchillo, atravesando el aire.

El objetivo de ese cuchillo, lo que su hoja buscaba——no era mi cuerpo.

Era el suyo propio.

Usé mi mano izquierda para detener la hoja descendente y evitar que llegue a su objetivo deseado.

No estaba tratando de sujetar la mano de Housen o esquivarla, en cambio permití que la hoja atraviese mi palma.


“¡¿Qué——?!”

Esto claramente no fue lo que Housen había esperado de mí. Habría sido casi imposible predecir mis acciones con antelación.

Después de todo, ¿quién hubiera pensado que alguien deliberadamente se dejaría apuñalar?

El brazo que manejaba el cuchillo se congeló y se detuvo abruptamente, y con ello, la sonrisa de Housen se desvaneció.

“Tú… ¡Ayanokouji!”

Estaba confundido. Cualquiera en su sano juicio lo estaría luego de ver lo que yo me había causado a mí mismo.

En la mayoría de los casos, mis acciones aquí hubieran sido arriesgadas, autodestructivas incluso.

Sangre fresca y brillante pronto comenzó a chorrear de la herida en mi palma.

“Ese cuchillo, o para ser más preciso, ese cuchillo Petty, es el que yo compré, ¿no?”

“¿Qué diablos estás diciendo…?”

“Ibas a apuñalarte a ti mismo en el muslo con mi propio cuchillo. Después de eso, elevarías una queja a la escuela sobre tu herida, y la usarías como evidencia para hacer que me expulsen. ¿Ese era tu plan, no?”

Por la forma en que sujetó el cuchillo en su mano, era obvio que no pretendía apuñalar a un oponente. Había puesto la hoja del cuchillo hacia arriba para hacerlo parecer como que alguien más lo había apuñalado a él. Además, había sujetado el mango invertido, para permitir que la hoja atraviese su pierna con más efectividad.

“¡Ha! A pesar de que lograste unir todas las piezas, ¿aun así viniste y te apuñalaste a ti mismo? ¿Estás loco?”

Housen lucía un poco sacudido mientras soltaba una risa seca.

“Esta era la mejor forma de cancelarte por completo. Además, no creo que seamos tan diferentes. Después de todo, tú también viniste hasta aquí totalmente preparado para sufrir una herida grave.”

Incluso si uno sabía que era el curso de acción correcto, la mayoría de las personas no estarían dispuestas a continuar con un acto tan peligroso de autolesión como este. Esta era la razón principal por la que él habría sido capaz de apuñalarse a sí mismo y culparme por eso.

“Parece que hay algún tipo de pseudo-examen especial en efecto que sólo le dieron a un número limitado de ustedes los de primer año. Y basado en tu conversación con Nanase, suena como si la premisa del examen fuera hacer que me expulsen. Entonces con ese fin, comenzaste a desarrollar un plan. Comenzaría contigo atrayéndonos aquí afuera y obligándonos a pelear. Entonces, después de golpear un poco a Sudou y Horikita, dirías que yo saqué un cuchillo que llevaba conmigo en caso de una emergencia y que te apuñalé con él en un acto de furia, eventualmente llevando a mi expulsión. Esa es la absurda narrativa que estuviste tratando de construir este tiempo.”

Incluso si el consejo estudiantil iba a ser más tolerante, blandir un cuchillo en una pelea no sería excusado sólo con una suspensión.

Justificaría una expulsión, o incluso podría resultar en cargos criminales.

“Escuché que eras gran cosa, pero a mí me pareciste un maldito marica, por lo que no pensé tanto sobre ti. Pensar que te apuñalarías a ti mismo… ¿Cómo supiste que el cuchillo era tuyo?”

“He hecho mi propia investigación. Hasta ayer, yo seguía siendo el único que ha comprado ese modelo de cuchillo Petty. Por lo que es natural que uniría todas las piezas al verte sacar exactamente el mismo.”

Fácilmente podría haber esquivado el cuchillo y sujetado el brazo de Housen. Pero hacer eso no habría resuelto el problema fundamental aquí. Todo lo que él hubiera tenido que hacer era crear algo de distancia e iniciar su plan otra vez. Con el fin de evitar que haga eso, no tuve más opción que apuñalarme a mí mismo.

Housen trató de soltar el cuchillo, pero usé mi propia mano para mantener su puño en el lugar.

“¿…¿Qué demonios…? ¿Quién diablos eres…?”

Habiendo atestiguado mi fuerza de primera mano, la serenidad que Housen había mantenido hasta ahora fue arrasada por completo.

“Entonces, ¿qué sigue ahora? A pesar de que soy el dueño del cuchillo, tú eres el que me apuñaló con él. Además, un investigación revelará que trataste de comprar el mismo modelo de cuchillo. Si no puedes hallar una manera de escapar de esto y convencer a todos, serás expulsado, Housen.”

Mientras que mis huellas dactilares estaban sobre el mango del cuchillo, las de Housen también. Y el hecho de que el cuchillo estaba atravesando mi mano ahora no era algo que podría explicarse muy fácilmente. Su propia estrategia había terminado jugándole en su contra.

“¡¿Pensaste esto con tanta anticipación…?!”

Luego de mirarme de forma amenazadora por un momento, Housen soltó su agarre y tomó distancia, dejando el cuchillo atravesado en mi palma.

Y de esa forma, se había dado vuelta el marcador.

Mientras tanto, Horikita y Sudou se habían puesto de pie lentamente y ahora estaban recuperando su fuerza.

“¿E-Estás bien, Ayanokouji-kun?”

“Ayanokouji…”

“No se preocupen por mí.”

No era irrazonable que se preocuparan por mi condición, pero este no era momento de preocuparse por eso.

Lo más importante ahora era asegurar que Housen no reciba otra oportunidad.

“¿Cuánta información tienen ustedes, bastardos…? Espera, Nanase, ¿tú les buchoneaste?”

“No les conté nada.”

“Al principio sentí que había algo fuera de lugar cuando Amasawa y yo fuimos juntos de compras al centro comercial Keyaki.”

Asombrada por escucharme mencionar el nombre de Amasawa, Horikita habló.

“¿Amasawa-san? ¿Estás diciendo que ella está mezclada en todo esto…?”

“Sí. De acuerdo con el vendedor de la tienda, cuando Housen estuvo a punto de terminar de pagar por el cuchillo, ella llegó y evitó que completara la compra.”

Después de responderle a Horikita, giré de nuevo hacia Housen.

“Tú fuiste el que ideó esta ridícula estrategia, pero Amasawa fue la que ayudó a refinarla a la perfección. Después de todo, si te apuñalabas a ti mismo con tu propio cuchillo, naturalmente llevaría a problemas una vez que la escuela investigara qué sucedió. Sin embargo, si de alguna forma podían lograr que yo comprara el cuchillo en cambio, entonces tendría potencial para cambiarlo todo.”

La razón por la que Amasawa y Housen habían elegido usar este costoso cuchillo Petty fue porque era el único que venía junto a una vaina, convirtiéndolo en la opción más conveniente disponible.

Por supuesto, mientras que había una variedad de otras formas de ocultar una hoja, era más rápido y fácil comprar uno con una vaina dada la portabilidad agregada.

En aquel entonces cuando fui de compras con Amasawa, ella había logrado localizar y elegir este mismo cuchillo sin buscarlo en absoluto, a pesar de que debería haber sido la primera vez que visitaba esa tienda. Y esto sólo fue la primera cosa que me llamó la atención. El viernes había aparecido en mi cuarto diciendo que había perdido su liga para el cabello, pero eso no había sido nada más que una excusa para recuperar el cuchillo. Es natural asumir que ella había plantado la liga con antelación o simplemente mintió sobre haberla dejado allí. Encima, ya que existía la posibilidad de que yo notara que faltaba e cuchillo si lo recuperaba demasiado pronto, ella esperó, retrasando su jugada hasta el último momento posible. Después de eso, sólo necesitaba sacar el cuchillo de mi habitación sin dejar huellas dactilares sobre él y entregárselo a Housen.

Si ella no hubiera podido retirar el cuchillo, probablemente habrían optado por posponer el plan.

“Tch, nunca debí confiar en esa chica random en primer lugar.”

“No, fue gracias a Amasawa que este plan tomó forma siquiera. Sin su ayuda, todo se habría derrumbado.”

“Como sea. Parece que tienes la ventaja ahora. ¿No es así, Senpai? ¿Entonces ahora qué?”

Encima de todo lo que había sucedido, la sangre de mi mano había manchado la vestimenta de Housen. No había forma de que pudiera zafarse de esto convenciendo a los demás.

Incluso si sacaba el cuchillo y se apuñalaba en el muslo, simplemente ya no era posible para él salir victorioso.

Por supuesto, incluso si tratara de hacer eso, usaría toda mi fuerza para detenerlo.

Las chances eran que Housen ya había discernido también eso por sí mismo.

La parte importante es qué sucedería a continuación.

“Horikita, Sudou, y yo podemos prometer mantener silencio acerca de lo que sucedió esta noche. ¿Qué tal eso?”

“¿Qué estás diciendo? ¿De verdad vas a desperdiciar tu chance de sacarme de aquí?”

“A cambio de hacer eso, tengo dos condiciones.”

“¿Dos?”

Probablemente conocía la primera sin que yo deba decirlo.

“La primera es que aceptes formar una relación cooperativa equitativa entre nuestras dos clases.”

“Bueno, no es como si tuviera que pensar mucho entre eso y una expulsión. ¿Cuál es la segunda?”

“Quiero que formes pareja conmigo para este examen especial.”

Desde la vez que posé mis ojos sobre Housen, me hallé a mí mismo pensando que si me encontrara en posición de seleccionar a quien quisiera, entonces él sería mi primera opción por mucho. Mientras que había varias razones para esto, la más grande era que a él no le importaba llamar la atención debido a su comportamiento problemático. Si yo estuviera en los zapatos de Tsukishiro, probablemente habría instruido a mi sicario que evite destacar tanto como sea posible. Había considerado la opción de contactarlo de forma privada para discutir la idea de trabajar juntos si la discusión de Horikita terminaba fracasando. Entonces en ese sentido, esta serie de eventos había resultado ser bastante conveniente para mí.

“¿…Lo dices en serio?”

“Acabas de matricularte aquí, por lo que estoy seguro que hay muchas cosas que no has tenido oportunidad de hacer todavía. Si eres expulsado ahora, se habrá acabado todo antes de que puedas disfrutar de hacer alguna de ellas. No sé cómo fueron las cosas en aquel entonces cuando estabas en secundaria, pero los rumores diciendo que eres un rival para Ryuuen terminarán permaneciendo de esa forma. Y eso es todo por lo que cualquiera te recordará. Como mínimo, por lo que he visto de Ryuuen durante el pasado año que he estado aquí, no puedes ni siquiera compararte con él como te encuentras ahora mismo.”

“¡Hijo de perra…!”

Obviamente, el joven conocido como Housen Kazuomi tenía un firme sentido del orgullo.

Provenía de una convicción habitual y egoísta de que él era una de las personas más fuertes por ahí.

A pesar de que probablemente se encontraba un paso por encima de Ryuuen en términos de fuerza física, el hecho de que dije que Ryuuen era mejor era inaceptable para él.

Pero por sobre todo, no había forma de que pudiera tolerar el hecho de que yo había sido más astuto que él.

Él tenía una B+ en Habilidad Académica, por lo que si fuera a contenerse y sabotear el examen, definitivamente sería expulsado.

Dicho eso, no parecía razonable pensar que optaría por sacrificarse para vengarse de mí. Mientras que Housen era casi tan inocente como uno podría ser, la verdad era que no había forma realmente para asegurarme al 100% que él no provenía de la Sala Blanca. En ese sentido, sin importar cuánto lo intente yo, no podré librarlo de toda sospecha. No obstante, después de lo que sucedió aquí esta noche, las cosas eran distintas. Incluso si Housen se contenía en el examen, el hecho de que yo había sido apuñalado permanecía.

Mientras yo dejara dolorosamente claro que algo inusual había acontenido detrás de escenas, incluso Tsukishiro no sería capaz de forzar mi expulsión de inmediato.

La escuela llevaría a cabo una investigación para descubrir qué había pasado exactamente, y la decisión de Housen de sacar un cero en el examen sería puesto a debate.

Cualquier truco que Tsukishiro intentara poner en práctica, yo permanecería firme como una roca hasta que la expulsión ya no estuviera sobre la mesa.

“¡Jodida mierda buena, Ayanokouji-senpai! Eres el primer oponente que me ha hecho hervir la sangre. Obligarte a rendirte ya no será suficiente para mí. En cambio voy a matarte a palos, así que espéralo con ansias.”

Los pequeños rastros de temblor que había mostrado antes eran cosa del pasado. Ahora, Housen ya había desplazado su atención a prepararse para su próxima pelea.

“Yo me quedaré aquí. Hay algo que siento que debería explicarle a Ayanokouji-senpai.”

“¿Huh? ¿Qué vas a contarles, Nanase?”

“Algo que he decidido será útil para la Clase 1-D en general. Ayanokouji-senpai y Horikita-senpai ya tienen mucha cautela de nosotros. Siendo ese el caso, ¿no sería mejor si les dijéramos que tengan cuidado con las otras clases también?”

“Haz lo que quieras.”

Mientras que los detalles de lo que estaba diciendo no eran claros, Housen aceptó la propuesta de Nanase.

Al final, Housen fue la primera persona en retirarse y regresar al dormitorio.

 

3

 

Ahora sólo estábamos nosotros tres y Nanase.

Mientras que había un par de cosas que discutir dado lo que había sucedido, una cuestión tomó precedencia sobre todo eso.

Y eso era calmar a Horikita, quien había perdido la calma al ver el cuchillo atravesado en mi mano izquierda.

“¿Q-Qué deberíamos hacer…? ¿Deberíamos, uhm, s-sacar el cuchillo?”

La Horikita usualmente equilibrada probablemente nunca había estado en una situación como esta.

“No. Sé que no es exactamente placentero de ver, pero es mejor dejar el cuchillo donde está por ahora.”

Si el cuchillo no era extraído apropiadamente, correría riesgo real de una hemorragia.

“Más importante, ¿ustedes dos están bien?”

“Comparada contigo, estoy prácticamente ilesa…”

“Sí… Yo también estoy bien.”

Sudou se acercó para echar un mejor vistazo e hizo una mueca al ver el grotesco estado de mi mano.

“Amigo, ¿cómo puedes permanecer tan tranquilo con tu mano así?”

“Hmm, no lo sé.”

Estaba haciendo las cosas como usualmente lo hacía, no había nada especial al respecto realmente.

“Pero, hombre… no sabía que eras como, tan fuerte…”

“Sólo hice lo que pude para bloquear el cuchillo.”

“…Aunque a mí no me pareció eso.”

Expresó su impresión honesta sobre mi enfrentamiento con Housen.

Sudou había desafiado un buen número de peleas bajo su cinturón, por lo que no parecía que pueda engañarlo, o a Horikita tampoco en ese sentido.

Con mi mano derecha, saqué mi celular y llamé a Chabashira.

“Sucedió algo con lo que necesito un poco de ayuda. ¿Podría reunirse rápido conmigo detrás de los dormitorios del primer año? Sola, por supuesto. Y además, traiga una toalla de baño con usted por favor.”

Aunque Chabashira parecía confundida ante mi repentina llamada, logró captar la urgencia de la situación y prometió dirigirse inmediatamente. Mientras tanto, lo mejor era quedarnos aquí y esperar a que ella llegue.

Sería peligroso si otros estudiantes vieran el estado de mi mano mientras cambiamos de ubicación.

En cualquier caso… incluso luego de ver las repercusiones de cerca, Nanase no lucía atónita en lo más mínimo.

A pesar del hecho de que había un cuchillo atravesado en mi palma y la sangre salpicada, se encontraba perfectamente tranquila y serena.

La naturaleza gráfica visualmente intensa de la escena no le afectó en absoluto.

“¿Podrías explicar para nosotros qué sucedió aquí, Nanase?”

“Si no lo hago, parece que la Clase 1-D quedará en una posición complicada, así que lo haré.”

“Eras consciente de que las negociaciones iban a resultar así… ¿Es eso correcto?”

“Correcto. El plan era hacer que Housen-kun se apuñalara a sí mismo en el muslo para hacer que Ayanokouji-senpai sea expulsado.”

Habló sin resevas, explicando su plan con el mismo tono educado de siempre.

“¿Estás diciendo que la bondad que nos mostraste sólo fue parte de un acto pensado para cumplir ese objetivo?”

“No, no es nada así, Horikita-senpai. De verdad quiería unir fuerzas con ustedes y establecer una relación de apoyo entre nuestras dos clases. Es sólo que… apuntar a Ayanokouji-senpai había sido nuestra mayor prioridad, eso es todo.”

La razón por la que Housen y Nanase habían estado tan obsesionados con la Clase 2-D era simplemente porque yo era miembro de ella.

“¿Por qué ese era su objetivo? No recuerdo haberte perdonado por lo que sucedió aquí esta noche, esas fueron las palabras de Ayanokouji-kun, no mías. Dependiendo de tu explicación, podría terminar informando esto a la escuela de inmediato.”

Horikita presionó a Nanase por respuestas, incapaz comprender por qué yo era el objetivo.

“Mientras que estoy de acuerdo en que hubo un problema con nuestro método, la escuela aprueba la noción de actuar para hacer que Ayanokouji-senpai sea expulsado. Sólo unos pocos estudiantes selectos de primer año saben actualmente sobre esto, pero es posible recibir un tremendo número de puntos privados sólo por forzar su expulsión.”

Al menos, la razón por la que Housen había ido por mí finalmente sale a la luz.

“Se nos dijo que el estudiante que logre expulsar a Ayanokouji Kiyotaka de la Clase 2-D recibirá una suma de 20 millones de puntos privados. Ese es el examen especial que se nos fue dado a nosotros.”

“No entiendo qué estás diciendo. No tiene ningún sentido. ¿Quién rayos idearía un examen especial tan extraordinario y estúpido?”

Nanase mantuvo la boca cerrada, no dispuesta a responder la pregunta de Horikita.

“…Por ahora, he dicho todo lo que necesitaba decir. Con esto, deberías darte cuenta de cuán cauteloso necesitas ser respecto de las otras clases de primer año, ¿cierto, Ayanokouji-senpai?”

No entró en más detalles, revelando sólo lo mínimo requerido para transmitir la idea. No había falta decirlo, si Housen y Nanase sabían sobre este ‘examen especial’, entonces Amasawa probablemente también. Extendiendo esa lógica, tenía sentido que estudiantes en la Clase 1-B y 1-C también esuvieran al tanto.

“¿No esperas que de verdad acepte eso como respuesta, o sí? El hecho es que Ayanokouji-kun recibió una herida grav——”

Horikita empezó a acosar a Nanase con preguntas por mi bien, así que la detuve.

“Está bien, Horikita. Un entendimiento general de la situación es más que suficiente. Aprecio la ayuda, Nanase.”

“Por el bien de mi clase, la Clase 1-D, elegí cooperar con Housen-kun sabiendo muy bien cuán horribles eran sus métodos realmente. Porque, si la recompensa de los 20 millones de puntos fuera a caer en manos de otra clase, ocasionaría serias ramificaciones para nosotros de aquí en adelante.”

Con 20 millones de puntos, sólo tendrías suficiente para comprar un solo pase a la Clase A.

Pero dada la utilidad durante los exámenes especial tales como este, cuanta mayor influencia financiera tenga tu clase, mejor te encontrarás.

“Sin embargo, esa no fue la única razón por la que cooperé con Housen-kun.”

El tono de Nanase era suave y tranquilo, y aun así había algo en la forma en que me miraba, un filoso pero sutil brillo en sus ojos.

“Yo (2)… simplemente no creí que una persona como tú sería apropiada para esta escuela, Ayanokouji-senpai.”

Esta era la primera vez que Nanase había dirigido este aparente sentimiento de odio hacia mí.

Sí, no podía entender por qué.

Poco después, Nanase hizo una reverencia y abandonó este lugar.

 

NOTAS DEL TRADUCTOR

  1. Kiyotaka hace una referencia cultural a Miyamoto Musashi y su duelo con Sasaki Kojirou, un samurái con fama de invencible, en una isla japonesa. Esto sucedió en 1612 y se supone que es algo que realmente pasó. En la mañana del duelo, Musashi se trasladó en barca hasta la isla en cuestión. Durante el trayecto, talló con su wakizashi (sable corto japonés) un remo de repuesto del barquero, y se hizo una espada grande de madera. Usó un cordel de papel para atar su kimono. De esta forma se presentó ante Kojirou. Musashi saltó de la barca y caminó sobre el agua hasta la arena. Llegaba bastante tarde y eso enfureció a su oponente más de lo normal. Durante la batalla, después de esquivar un golpe lanzado por Kojirou con su katana, Musashi se colocó de espaldas al sol y se lanzó hacia él, derrotándolo de un preciso golpe en la cabeza. Así y todo, existen varias versiones de cómo y por qué sucedió, la tardanza, la conversación, etc.
  2. Para aquellos que no lo sepan, el japonés tiene múltiples pronombres de primera persona, más de 10, todos usados con distintos propósitos, edades, y géneros. Cada persona de la serie (hasta ahora), sólo ha suado uno de esos para referirse a sí mismos, y lo han usado de manera consistente en adelante. Aparte de esa única vez en el capítulo anterior, Nanase ha usado exclusivamenteo ‘watashi’. Como se aclaró antes, es una forma típicamente neutral, quizás un poco femenina, de pronombre que Horikita y la mayoría de los personajes femeninos más serios y respetados (y Kouenji) también usan. En este caso particular, Nanase vuelve a usar ボク o‘boku’, un pronombre en primera persona usado principalmente por jóvenes varones. Ahora bien, Hirata e Ike también usan boku, pero ellos usan(el kanji) para decirlo en lugar de la forma estilizada en katakana (ボク) que Nanase ha usado. Lo importante sobre esto es que, de esta forma, Nanase es apenas el segundo persona en toda la serie que usa su pronombre de primera persona escrito en katakana. El primer personaje es Kiyotaka, con su uso de オレ u ‘ore’, el cual es una forma de pronombre aún más masculina que boku. Housen, Ryuuen, Sudou, y la mayoría de los personajes masculinos también usan ‘ore’, pero usan el kanji para hacerlo, no el katakana, haciendo que Kiyotaka sea un caso especial. Al tener el boku de Nanase también escrito en katakana, el autor está destacando o enfatizando algún tipo de conexión entre Kiyotaka y ella. Desafortunadamente todo este asunto es imposible de traducir o reflejar tanto en inglés como en español.

 

Traducción al Inglés: Graze, D3nj4l, Hina, Heero, y Liam (Confused Translations)
Traducción al Español
: nahucirujano
Corrección: nahucirujano

Regresar

1 comentario: