Capítulo 3

Higashira Isana no está perdida (…Erm… ¿quieres regresar a la habitación?)

 

Irido Mizuto

 

No es por presumir, pero una vez visité la casa de una compañera de clases.

No es por presumir, pero era mi novia en aquel entonces.

En serio, no es por presumir, absolutamente no.

Quiero decir, había estado en la casa de mi novia, pero nunca fui a la casa de una amiga.

“Mizuto-kun, ¿quieres venir a mi casa mañana?”

Me preguntaba por qué Higashira Isana me llamó de repente, y eso fue lo que sugirió.

“¿Por qué? No es como si necesitara verte.”

“El día está aburrido~. Pero me tendrás cerca.”

“Sólo vendrías de nuevo aquí sin decirme nada, ¿cierto?”

“Es debido a eso. Eso.”

“¿Eso?”

“Bueno, he estado visitando tu casa todos los días. Así que mamá…”

“¿Qué? ¿Finalmente te regañó?”

“No, no—mamá dijo, ‘quiero conocer a Irido-kun’.”

“Ah.”

Ya veo. Es lo que cualquier padre en su sano juicio haría. Probablemente.

Dados todos los indicios hasta ahora, podía darme cuenta de que la madre de Higashira era una persona bastante intensa, pero parecía tener algo de sentido social común.

“Pero, pero, ¿no te parece una molestia llevar a una mamá a la casa de un amigo?”

“Bueno, sí.”

“Entonces básicamente, luego de discutirlo, pensamos que deberíamos invitarte a que tú vengas aquí, Mizuto-kun.”

“Otro problema… ¿por qué tengo que conocer a tus padres?”

“Fufu… se siente como si fuéramos a casarnos.”

“Ahora se me quitan las ganas de ir.”

“¡Por favor! ¡Mamá va a matarme de lo contrario!”

“He estado preguntándome desde hace un tiempo pero, ¿tu mamá es una ex-delincuente o algo?”

“No, en absoluto. Mi mamá no es una delincuente. Sólo es violenta.”

“Ahora definitivamente no quiero ir.”

“No te preocupes. ¡Dijo que sólo quería agradecerte y disculparse contigo, Mizuto-kun!”

“¿‘Agradecerme’ y ‘disculparse’? Eso suena como…”

Suspiré.

Bueno, el fundamento es legítimo, y para ser honesto, no es como si no estuviera dispuesto a aceptar la invitación… mentiría si dijera que no estaba interesado en Higashira. Ya registró mi biblioteca, y sería injusto para mí no devolverle un poco la cortesía.

Pero, bueno…

Miré hacia la habitación de al lado.

Si dijera que me iba a la casa de Higashira, me pregunto qué expresión pondría ella

“¿…No quieres, venir?”

Hubo una voz ligeramente ansiosa al otro de la línea.

“Si de verdad no quieres, no me molesta. Está bien…”

“No. Me parece bien. Iré.”

Le respondí como si el titubeo de recién fuera una mentira.

La voz de Higashira brilló.

“¿En serio?”

“Sí. No me agrada cuando mi privacidad es la única invadida.”

“¿Sólo la invasión?”

“Sólo la invasión. Mañana voy a desnudar tu cuerpo.”

“¿Eh? …Ah, erm, erm, si quieres hacer eso, tendré que preparar…”

“Me mordí la lengua. Quise decir que voy a desnudar tu biblioteca.”

“¡Jugaron conmigo! ¡Mamá!”

“¡Deja de tontear, y vete a la cárcel para cachondas!”

¿Qué pasaría si la visito mañana y termino escuchando un ‘depravado, te atreves a venir y desnudar a mi hija, huh’?

“Mmm… por favor ten cuidado, Mizuto-kun. Nuestra casa nunca se preparó para algo así.”

“La mía tampoco. En definitiva, no es diferente de lo usual.”

“Supongo.”

Limpiaré mi cuarto y te esperaré entonces. Higashira colgó.

Entonces… involuntariamente miré hacia la habitación de al lado.

…No hay razón para que ella se queje, ¿cierto?

En este punto, no tenía obligación de protegerla incluso si hacía sentir sola a Higashira.

 

La casa de Higashira era un apartamento familiar afuera de la avenida principal.

La acompañé a su casa antes, y llegué hasta el frente del departamento, pero siempre la dejaba en la entrada. Es mi primera vez ingresando.

A diferencia de las casas de Kawanami y Minami, no parecían tener cerraduras automáticas. Atravesé la entrada principal, subí al ascensor, y fui hasta el piso que se me dijo de antemano.

La placa “Higashira” estaba al final del pasillo. Era un departamento de esquina.

El intercomunicador estaba justo en frente de mí. Saqué mi teléfono y llamé a Higashira.

“Hola, ¿Higashira?”

“Nnni… fffuuui…”

“¿…Acabas de despertar?”

“Estoy bien… Ahora abro…”

Colgó. Bueno, sólo es la 1 PM, en vacaciones de verano, con razón. Sólo esperaré a que se arregle.

Pensé, y quise sacar un libro para leer, pero antes de que pudiera hacerlo, la puerta se abrió con un crujido.

“Bienvenido…”

Higashira apareció, claramente somnolienta.

Quedé desconcertado cuando la vi.

“¿Así es como recibes invitados?”

Higashira vestía una camiseta grande y pantalones cortos. Claramente acababa de despertar.

No llevaba cinturón ni nada, y la camiseta era sostenida por sus grandes pechos, balanceándose como una cortina en frente de su estómago. El cuello de la prenda estaba suelto y desgastado, y su escote se asomaba. Los muslos expuestos bajo los pantalones cortos estaban indefensos ante mí.

Claramente, ella no estaba aquí para recibir una visita—mucho menos a un hombre.

No es la primera vez que Higashira estaba tan indefensa, pero siempre había estado usando ropa de calle hasta este punto. Sin dudas vestía así en este momento porque estaba sola en casa…

“Hmm… ahora que lo pienso, sigo usando mi ropa de dormir…”

Higashira tiró ligeramente del cuello y revisó su atuendo. Casi se expone totalmente. Incluso mi tranquilo yo tuvo que apartar los ojos.

¿…Hmm? ¿Ahora…?

“Lo siento… estaba dormida antes… fuuaah…”

“Ve a vestirte. Te esperaré.”

“Ahh~, está bien… me cambiaré luego… por favor entra…”

Higashira refregó sus ojos y dejó libre la entrada.

¿Estás segura de que quieres hacer esto? Incliné mi cabeza y atravesé la entrada.

“Kuaaa~…”

Higashira bostezó, quitándose casualmente sus sandalias, y subió el escalón.

“…toto.”

Aún no está totalmente despierta, ¿huh? En el momento que subió, casi tropieza—

—Boing.

¿…Hmm?

Eso fue… extraño. ¿Acaso su pecho… se sacudió…?

“Eso fue peligroso. Jeje~… Ah, Mizuto-kun. ¿Necesitas pantuflas?”

“Ah, no necesito…”

“Ya veo… Entonces sígueme por favor.”

¿Sólo soy yo? Mira, no es como si siempre prestara atención a cómo se sacuden…

Higashira recorrió el pasillo hacia la derecha desde la puerta del frente.

Y entonces, abrió una puerta no muy lejos de allí.

“Este es mi cuarto.”

“Está bastante cerca de la puerta de entrada.”

“¿Verdad~? Es fácil salir. Jeje~~”

“Te envidio. Durante quince años he vivido escaleras arriba.”

“Yo te tengo más envidia. Preferiría tener una casa de dos pisos.”

“¿Y eso?”

A unos pocos metros por el pasillo, a la izquierda, había otra puerta al final.

“Ese es el dormitorio de mis padres~. A la vuelta de la esquina está el living.”

“¿Debería ir y saludarlos primero?”

“Mamá se fue por un rato. Volverá pronto~. Papá no está en casa hoy.”

Especificó que él no está en casa hoy, en otras palabras, está más seguido que lo que no está en casa. En ese sentido, su situación familiar es un poco diferente de la de los Kawanami y Minami.

“Siéntete como en casa~”

Higashira guió el camino, y me invitó a su habitación.

El cuarto de Higashira era bastante, bueno, como lo imaginé.

Hay una biblioteca repleta de novelas, y los libros que no cabían estaban sobre el escritorio, la cama, el piso, en todas partes, formando pilas. Además, los impresos de la escuela y calcetines quitados estaban por todas partes. No hay dudas, tuve esa sensación de ‘Ah, ok, es el cuarto de Higashira’.

Casualmente me senté sobre el suelo, e Higashira cerró la puerta.

“Huh~… puedes sentarte sobre mi cama, ¿sabes?”

“No soy tan atrevido como tú.”

“¿Qué? ¿Es eso tan extraño…?”

Higashira inclinó la cabeza, y se puso sus rodillas sobre la cama donde la sábana era un desastre.

Dijo que limpiaría su habitación, ¿pero por qué terminó así? Los impresos desparramados, no será esa su tarea de verano, ¿cierto? —¿Hm?

En el momento que apoyé mi mano azarosamente, toqué algo como tela.

¿Qué es esto? Rojo como una rosa, dos formas como tazones unidos—

….……………

¿…No es esto un brasier?

Obviamente, era un brasier que yacía azarosamente sobre el suelo. Aunque es diferente del que vi de Yume. ¿Qué es diferente? El tamaño. De acuerdo a ella, recordé que Higashira tiene copa G—

¡Ahh, dios! ¡No hay forma que ella pueda recibir visitas así!

Abortar, abortar. Rápidamente aparté la vista del brasier.

Y mientras apartaba la vista en cierta dirección… un nuevo desarrollo sucedió como una catástrofe.

“Hmm~…”

Higashira estaba encima de la cama sentada en una posición de chica.

Gemía y gemía con una voz ahogada característica de una dormilona.

Probablemente no quería ver su propio estómago.

La forma en que levantó su camiseta era claramente—una de alguien que trataba de quitarse dicha camiseta.

Pude ver el ombligo de Higashira. Pude ver sus costillas y caderas. Y la camiseta atrapaba otras cosas más arriba.

El dobladillo de la camiseta quedó atrapado por ellos.

Gracias a la gravedad, la mitad inferior se liberó de la camiseta.

Fue en este punto que finalmente me di cuenta—la causa de la distorsión que sentía.

Ella no está… usando ropa interior.

Blanco puro. Medialunas de carne, sin la protección de tela, asomándose por el dobladillo de su camiseta levantada.

Quedé inmediatamente atónito.

Para empezar, es mi primera vez viendo la parte inferior de los pechos de una chica—y no esperaba que Higashira no llevara brasier. ¡Nunca lo había pensado siquiera hasta este preciso momento!

“¡Mmm…!”

Higashira forcejeó por un momento con la camiseta que estaba atorada en sus pechos copa G.

Ese forcejeo momentáneo fue el instante que se sintió como la diferencia entre la vida y la muerte.

“¡Oye!”

Justo antes de que pudiera ver las partes fatales, finalmente grité.

Higashira detuvo sus manos, y me dedicó una mirada incrédula.

La parte inferior de sus pechos estaba expuesta mientras ella me miraba durante unos segundos.

Entonces.

“¿…Ah?”

Por fin lucía consciente, y se bajó el dobladillo de la camiseta por encima de su ombligo.

Sujetó la camiseta y estuvo en silencio por un instante.

“…Eso me impactó…”

“¡Eso lo digo yo!”

Respondí con toda mi fuerza. Higashira sonreía tímidamente y dijo, “Uejejeje”.

“Estaba totalmente dormida. Olvidé que tenía a un chico en mi cuarto…”

“Estoy sudando como loco ahora. Eso fue…”

“Perdón por el inconveniente.”

Higashira permaneció sentada sobre la cama, y agachó la cabeza rápidamente.

…En ese momento, el cuello de la prenda cayó, y entonces, como se esperaba, dos bultos blancos quedaron descubiertos frente a mis ojos. A pesar de que aparté la vista—sólo vi blanco, ¿cierto? No vi nada rosado, ¿cierto…?

Eso fue… demasiado indefenso.

Bueno, ella siempre está indefensa, e incluso más cuando estaba dentro de mi cuarto. Dijo que confiaba en mí, pero estamos hablando sobre un deporte completamente distinto. Ella probablemente no tenía un algoritmo sobre cómo comportarse cuando alguien más estaba en su habitación.

“En cualquier caso, estás siendo demasiado descuidada. Y no has arreglado tu habitación…”

“Bueno~ pensé en hacer eso antes de dormir… ah, supongo que no guardé lo que usé ayer.”

“¿…Lo que usaste ayer? Como, ¿lo que yace justo al lado de mí? ¿Esto?”

“Ahhh~… qué vergonzoso…”

“¡¿Hablas en serio?!”

Levanté el brasier por el borde y usé el impulso para lanzárselo a Higashira.

Golpeó a Higashira en la cara, y ella lo abrió y se lo puso sobre su pecho.

“¿Te gusta? Estoy usando algo bastante sexy, ¿cierto~?”

“¿Escuchaste lo que dije?”

“A decir verdad, aún estoy bastante avergonzada. Supongo que por eso estoy haciendo bromas para disimularlo. Por favor entiende.”

…Claro que no. Te habrías sonrojado si eso es en serio.

Higashira escondió su brasier debajo de la sábana.

“En primer lugar, ¿por qué no estás usando ropa interior…?”

“Por supuesto que es porque estaba dormida hasta hace poco.”

“¿Te lo sacas cuando duermes…?”

“Uso algo llamado brasier nocturno. Mira, este.”

Desdobló la tela negra que había sido dejada sobre la cama. Este luce como una camisola corta, y no se sentía tan seguro.

“Escuché que si no uso esto, mis pechos perderán su forma.”

“No creí que prestarías atención a eso.”

“Nop, mamá me matará si no lo uso apropiadamente… ella siempre dice ‘qué sentido tiene no cuidar el crecimiento de unos pechos grandes y hermosos’.”

Si Higashira muere, ¿cuál es el sentido de los pechos hermosos o grandes?

“¿Entonces por qué no lo estás usando?”

“Siempre me lo quito inconscientemente cuando despierto.”

“Ya veo…”

Bueno, los hombres no entenderían la restricción de un brasier. No podía comentar sobre eso.

Higashira lanzó su brasier nocturno, miró sus pechos, “Hmmm~” e inclinó la cabeza.

“¿Puedo… no usar brasier…?”

“Úsalo.”

“Mizuto-kun, serás más feliz si no uso brasier…”

“Nop.”

“¿En serio?”

Higashira tenía ambas manos sosteniendo la camiseta por encima de su ombligo, y mostró el borde de sus pechos.

Y entonces, empezó a tambalearlos hacia arriba y abajo.

“¡Doink doink~♪!”

“¡Basta, idiota!”

Crujido, crujido, los resortes de la cama crujían conforme los bultos de Higashira se balanceaban suavemente. La falta de brasier lo cambiaba todo, y la manera en que rebotaban parecía transmitir el peso y la suavidad de su cuerpo.

Podía ver a Higashira sonriéndome con malicia por la esquina de mi ojo mientras apartaba la vista de ella.

“¿Qué sucede~? ¿El Mizuto-kun que me rechazó? ¿De verdad te molestan los pechos de la mujer que rechazaste?”

“¡No te dejes llevar…! ¡Al menos agradece que estoy actuando como un caballero!”

“Ejeje~. ¡Este Mizuto-kun avergonzado es lindo y adorable~! ¡Vamos! ¡Acércate!”

“¡No te acerques tú!”

Higashira se levantó de la cama y se aproximó a mí. Sólo pude retroceder.

Podría ser una mala reacción de mi parte, pero Higashira escaló las cosas. Levantó sus pechos con ambas manos.

La presión ejercida hacía que sus dedos se hundan sobre su camiseta.

“Son suaves, sabes~, puedes tocarlos, Mizuto-kun~”

¡Se está dejando llevar…!

Es hora de castigarla un poco—o eso pensé, y bajé mi voz un poco.

“¿…En serio?”

“¿Eh?”

“¿Estás segura que puedo tocarlos?”

“¿Eh…?”

Miré a Higashira a los ojos. Ella parpadeaba claramente más que antes.

“No, erm, eso fue…”

“Puedo tocar, ¿cierto?”

Y de esa forma, comencé a acortar la distancia entre nosotros. Higashira por su parte, retrocedió.

“P-puedes… de hecho, quiero que lo hagas… pero quizás debería decir que aún no estoy mentalmente preparada… no creo que mis sentimientos estén preparados para este repentino… m-me dejé llevar—¡¿ah?!”

Higashira, quien había estado apartando la vista de mis ojos con toda su fuerza mientras ofrecía excusas, gritó de repente y se agachó para ocultar su cuerpo.

“¿Qué sucede?”

“Na-nada. Bueno. Gracias a dios… no lo notaste…”

Higashira murmuró algo incomprensible por un momento, y finalmente inclinó la cabeza.

Esa cara suya parecía algo avergonzada.

“Mis pezones… se vieron un poco.”

Higashira rió en tono de broma.

Me congelé.

“¿…Huh?”

“Eje… ejeje. Sólo apenas. ¿Te excitaste un poco? —¡Owie!”

Silenciosamente le di un golpecito en la cabeza a Higashira.

A todas las mujeres, piensen sobre la línea que no tienen permitido cruzar.

 

Salí de la habitación para permitir a Higashira cambiarse.

Dios… ¿ella no sabía sobre la existencia de un código de etiqueta entre amigos? Incluso si habláramos sobre una amante, sigue la necesidad de hacerte ver presentable.

…Bueno, incluso si quisiera decirlo, probablemente me pasé un poco cuando invertí las cosas sobre ella—por supuesto, le expliqué que no lo hice en serio.

Apoyé la espalda contra la pared, y alcé la vista al techo. Me sentía ansioso sólo estando parado en el pasillo de una casa ajena. Su familia se supone que volverá a casa en cualquier minuto—no, en realidad, sería un mayor problema si ella dijera que nadie iba a volver a casa.

“—Regresé~.”

Escuché la puerta abrirse con una voz, y me sobresalté.

Alguien entró por la puerta del frente a mi lado… o mejor dicho, regresó.

No necesitaba pensar quién era.

“Isana~. ¿Estás despierta~? —¿Oh?”

La mujer me divisó de pie en el pasillo, y levantó las cejas.

Era esbelta y alta, y parecía como si perteneciera a Takarazuka (1).

Vestía pantalones delgados, la espalda derecha, brazos y piernas finos, y no parecía tener la personalidad violenta que Higashira mencionó. Pero dado su cabello corto juvenil, capté un vistazo de su personalidad.

Yuni-san ya lucía joven, pero esta persona lucía más joven todavía—nadie dudaría si afirmara ser la hermana mayor de Higashira. Aunque nunca oí que Higashira tenga una hermana.

“…Perdón por la intromisión.”

En cualquier caso, saludé a la mujer—quien muy posiblemente era la madre de Higashira.

La madre (teóricamente) de Higashira frunció el ceño, “¿Hmm?” se inclinó, e instintivamente retrocedí un poco.

“¿Por casualidad… eres… Mizuto-kun?”

“S-sí, soy Irido Mizuto.”

Se refirió a un completo extraño como ‘omae’.

Estaba abrumado por una presión inexplicable, y capté sus ojos con una mirada de desconcierto. Es igual de alta que yo.

La madre (teóricamente) de Higashira inclinó la cabeza.

“Bueno, es extraño… ¿por qué un amigo de Isana sería tan cortés para presentarse ante alguien que acaba de conocer?”

¿Qué pasa con ese sesgo?

“El ‘Mizuto-kun’ que Isana mencionó es un chico malo solitario y antisocial, no un tipo apuesto como tú.”

“¡Oye, Higashira! ¡¿Qué clase de rumores estás divulgando?!”

“¡¿Hyoowaaaa?!”

Pude oír una voz frenética desde atrás de la puerta.

Unos segundos después, la puerta se abrió, e Higashira asomó la cabeza. Sigue en su ropa de noche, su camiseta, pero podía ver la tira de un brasier asomándose por su cuello. Supongo que está usando ropa interior, gracias a dios—no, espera, aún podía verlo.

“Qué estás haciendo—ah, mamá.”

“Isana.”

La madre (confirmado) de Higashira miró con desdén a su hija y entrecerró los ojos.

“¿Dónde está el ‘bienvenida’?”

“Bienvenida. ¡Madre!”

Higashira de pronto alzó la mano y dijo como un juramento. “Bien,” asintió mama (2) Higashira afirmando. ¿Qué es esto? ¿El ejército?

Mama Higashira me señaló con su pulgar.

“Isana. Déjame preguntarte algo. ¿Quién es este sujeto?”

“Es Mizuto-kun.”

“¿Este chico? ¿En serio?”

“En serio. Dije que tiene un rostro muy lindo, ¿no?”

Siempre la he oído hablar con lenguaje cortés ante todos, pero nunca pensé que también lo hacía con su familia. Es muy raro.

“Hmmm…”

La madre de Higashira me midió—ahh, es muy problemático.

“Lo siento. ¿Puedo hacerle una pregunta?”

“¿Qué?”

“Me gustaría saber su nombre.”

“¿El mío?”

“Sí. De lo contrario, tendré que llamarla ‘Obasan’.”

No creía que fuera apropiado llamar a esta persona ‘obasan’, y no insinuaba nada más cuando dije eso. Mama Higashira brillaba, entretenida.

“Heh, un hombre interesante.”

Pronunció un diálogo que aparentemente se derivaba de un manga shoujo.

“Mi nombre se escribe como Nagi Tora. ¿Conoces cuál es el kanji?”

“Nagitora… Nagi como arrullo en el mar, y tora, ¿tigre?”

“¿Cómo lees eso?”

No es femenino leerlo como Nagitora.

“…Natora. Supongo.”

“Correcto.”

Tan pronto como respondí, Mama Higashira—Natora, me sonrió, y palmeó mi hombro.

“¡Bueno~, jajaja! ¡Perdón por molestarte, Mizuto-kun! ¡No eres lo que imaginé!”

“Haa… no me molesta.”

“¡Eres bastante perspicaz! Pudiste descifrar mi nombre a la primera. Supongo que probablemente eres el quinto que lo logró.”

El ‘probablemente’ era de lo más ambiguo. Es cierto que su nombre era un poco extraño, pero no tanto como otros nombres ostentosos y sofisticados. Una aclaración, el único motivo por el que pude asociar Nagi con arrullo en el mar fue porque el nombre de la hija estaba relacionado con el mar (‘Isana’ es un nombre antiguo para ballena).

“¡Y eres bastante educado para un mocoso! ¡Ya te tengo cariño, Mizuto-kun! ¡Eres demasiado bueno para Isana!”

“Gracias por eso.”

Sólo necesito que deje de palmearme el hombro.

“Gracias a dios, Mizuto-kun. Si no le agradabas a mamá, podrías haber recibido martillazos hasta la muerte.”

“¿Eh?”

“Isana, no me denigres en frente de los demás. Sólo lo habría mandado a volar de una patada y fin.”

¿Cuál es la diferencia entre eso y darme una paliza?

“…En cualquier caso, Isana. ¿Qué es esa apariencia? ¿Recibes a tu invitado de esa forma?”

“¿Ehh? Está bien. No voy a salir de todos modos.”

Vistiendo una camiseta y pantalones cortos, Higashira fruncía sus labios con descontento.

Sí. Continúe madre, explíquele lo que es el sentido común.

“Mmm…”

Natora se cruzó de brazos e inspeccionó el atuendo de su hija.

“…No. Me equivoqué. Sólo usarás esto por hoy.”

“¡Yippee!”

¿Qué? ¿Es aceptable? Tenemos el cuello suelto y holgado de una camiseta hasta los hombros exponiendo las tiras de su brasier, ¿sabe?

Mis preguntas no fueron respondidas. Natora-san comenzó a caminar por el pasillo.

“Isana, no has comido nada, ¿cierto? Es tarde, pero aquí está el almuerzo. Mizuto-kun, probablemente comiste en tu casa, así que ten daré un snack.”

“Ah, sí, perdón por las molestias.”

“Huh, eso es un poco tonto de tu parte. Eres el primer amigo que ella invita. ¿Por qué no debería importarme?”

Natora-san sonreía de corazón. Si yo fuera mujer, también podría haberme enamorado de su aspecto galante, pero en cualquier caso, parecía dar órdenes cuando fuera que hablara…

Higashira y yo seguimos a Natora-san hasta el final del pasillo.

Era un living comedor espacioso, y había una gran veranda al fondo, con la ropa lavada secándose.

“Isana, tu almuerzo de hoy es oyakodon. Siéntate y espera.”

“Ok~.”

Natora-san entró a la cocina, e Higashira fue hasta el sofá en el living y se desplomó sobre él. Me miró, y palmeó el lugar a su lado, así que me senté.

Higashira observaba mi rostro.

“Tu bienvenida fue un gran éxito.”

“Así parece… bueno, es mejor que ser odiado.”

“¡A partir de ahora puedes venir a mi casa cuando quieras!”

“Lo pensaré si te vistes de forma decente.”

Dije sin mirar a Higashira a la cara. Si lo hacía, no iba a ser capaz de evadir el pecho que estaba completamente expuesto bajo el escote de esa camiseta.

Higashira refunfuñó, “¿Ehh? No puedo molestarme en cambiar de ropa…” Bueno, podía entender lo que estaba pensando, pero esperaba que tuviera un sentido básico de la vergüenza, como persona.

Pero aun así, es impresionante que ella le permita a su propia hija vestirse así. ¿Qué clase de educación es esa? Supongo que la ingenuidad de Higashira se debía en gran parte a su ambiente hogareño.

Y mientras discutíamos los nuevos lanzamientos del final del mes, Natora-san salió de la cocina.

“Aquí tienes. Come.”

Depositó un tazón de oyakodon en frente de Higashira. Sorprendentemente, debería decir, Higashira no dijo ‘itadakimasu’, sólo tomó el tazón, y empezó a masticar. Era como un verdadero perro comiendo.

“Esto es para ti. Prueba.”

Natora-san dijo y depositó un plato de madera en el medio de la mesa. Eran galletas.

Higashira habló mientras ignoraba los granos de arroz en sus labios.

“Ah, ¿esas? Las que preparó ayer.”

“Perdón que no estén recién sacadas del horno. Pero bueno. Estoy segura que están lo suficientemente buenas. Supongo.”

“¿Lo hizo usted misma?”

“Es un hobby. La vida sin diversión no es interesante después de todo.”

¿El hobby de este personaje es hornear? …Eso me sorprendió, pero la forma caprichosa en que actuaba era un poco genial. El hecho de que no era influenciada por cómo los demás la veían parecía ser un rasgo común con su hija Higashira.

Le agradecí, y probé las galletas. Son deliciosas. Natora-san se sentó en frente de mí.

“De acuerdo, Mizuto-kun. Una vez más, gracias por cuidar de mi hija.”

“Supongo.”

“¿Huh? Mizuto-kun, ¿no deberías decir ‘no, no, ella es la que siempre cuida de mí’…?”

“No, no, yo soy el que ha estado cuidando de ella.”

“¡¿Huh, huh?! ¡¿No deberías estar hablando en contexto pasivo?!”

“¡Jaja! Parece que te ha ocasionado momentos difíciles. Muchas gracias.”

Natora-san flexionó sus piernas y consumió una galleta. Básicamente la comió como una galleta de arroz.

“Isana siempre tuvo cero sentido de la cooperación. Es mejor que ser un personaje NPC, pero esta madre siempre se ha preocupado porque nunca tuvo un amigo. ¿Sabes lo feliz que estuve cuando Isana brillaba al presentarte?”

“N-no estaba brillando…”

“Estabas… ah, bueno, no estabas brillando, estabas haciendo una sonrisa tonta. ¡Eso sí que me repugnó, sabes!”

“¡Eso es terrible! ¡Es abuso!”

Natora-san reía efusivamente. Su familia parecía llevarse bien.

“Hasta donde sé, Mizuto-kun, eres el único que ha tenido la amabilidad de cuidar de mi impredecible hija. Supongo que los dos deben estar en la misma onda. ¿Qué piensas? ¿Eh?”

“…Es cierto que para mí, nunca he conocido a alguien con quien me llevara tan bien como con Higashira. Nunca tuve amigos tampoco.”

“¿Heh?”

“Es-espera, Mizuto-kun… estoy un poco avergonzada…”

“Uuu~” Higashira gimió. No es nada para avergonzarse. Sólo es un hecho.

“¡Jaja!” Natora-san rió enérgicamente y palmeó su rodilla.

“¡De acuerdo! ¡Ustedes, cásense!”

Mi cerebro no pudo computarlo.

“¿…Huh?” “¿Ueeh?!”

Higashira y yo nos quedamos atónitos por un momento.

Natora-san sonreía para sí misma.

“Entonces, Mizuto-kun. Oí que eres el estudiante de honor de tu clase, especialmente en esa preparatoria. Eso es impresionante. Isana nunca va a conocer alguien tan impresionante como tú. Por favor acéptala.”

“No… ¿erm?”

“¿Hay necesidad de sorprenderse? Es natural que una madre se preocupe por su hija. Soy una buena juez, sabes. Sé que puedes hacer feliz a mi hija. Cásate con Isana. Rápido. Tan pronto como cumplas dieciocho.”

Reculé por la presión, y entonces, pensé.

Rápidamente le susurré a Higashira a mi lado.

“(Oye, Higashira… ¿no le dijiste?)”

Higashira me confesó sus sentimientos. Y yo la rechacé.

¿Tal vez Natora-san no lo sabía?

Higashira se encogió de hombros.

“(N-no podría hablar sobre eso…)”

“(¿Por qué?)”

“(S-si digo eso… creo que ella podría matarte, Mizuto-kun…)”

Me callé.

Entonces. Vi los penetrantes ojos de Natora atravesándome.

Un sudor desagradable cayó.

Es posible.

No había visto cuán violenta era Natora-san, pero… la presión claramente insinuaba “Si entristeces a mi hija, te mataré”.

Parecía tan ruda y severa con su hija… pero es una madre bastante idiota también.

No podía decir nada.

Si lo hacía, moriré.

Ya la he rechazado… pero no podía decir eso en esta situación.

“¿Hmm? ¿Qué piensas? No creo que sea una mala idea si no te opones a ella.”

“No. Es sólo que… yo le hablo como amiga.”

“Eso está bien. ¿Qué tiene de malo casarte con tu amiga? Bueno, puede que tengas las manos llenas con esta hija mía, pero no te preocupes, te garantizo que tiene el mejor cuerpo que he visto.”

Natora-san mostró un pulgar arriba. “Ejeje.” E Higashira también lucía avergonzada. ¿Por qué se avergüenza? Ella acaba de regañarte.

Qué tiene de malo casarme con una amiga, huh…

Para ser honesto, incluso si tuviera que llegar a un acuerdo, no me molestaría compartir una habitación…

“Hmm.”

Natora-san resopló y mordió una galleta.

“Eres de esa clase de persona, ¿no? Supongo que eres del tipo que no quiere atravesar el fastidio de enamorarse.”

“…Sí, supongo. Básicamente es eso.”

“Huh~…”

Natora-san suspiró profundamente. Parecía estar decepcionada, pero así es como yo realmente pensaba. Aunque se enfadará si trató de farolearla.

“No lo entiendes en absoluto. Es por eso que no me agradan los mocosos—de hecho, cuanto más lo pienses, más pronto deberías casarte.”

“¿Eh?”

“Escucha, Mizuto-kun. El casamiento es básicamente para aquellas personas que quieren lavarse las manos del complicado mundo del amor.”

Las inesperadas palabras hicieron que reprima una bocanada.

“Si uso un anillo en mi dedo anular izquierdo, nadie tratará de acosarme, y no tengo que preocuparme por mi familia molestándome preguntando ‘¿Tienes novio?’, y ‘¿Cuándo te vas a casar?’. Es más sencillo cuando estás casado, ¿cierto? Aquellos que se casan no tienen que lidiar con esa gente sin remedio que piensa que cada ser humano debería enamorarse.”

Natora-san sonreía irónicamente.

“No niego el matrimonio por amor, pero si me lo preguntas, es básicamente apostar. La persona de la que te enamoras no siempre tiene el mismo estilo de vida que tú. Mira a tu alrededor por ejemplo. Aquellos que salieron en secundaria seguramente rompieron en preparatoria, y aquellos que salieron en preparatoria rompieron en la universidad, ¿cierto? Las emociones solas no van a asegurar que estés con tu compañero por el resto de tu vida—si quieres casarte, elige a alguien con quien te lleves bien. Tómalo como el consejo de alguien que experimentó esto.”

“Ustedes los padres parecen bastante cercanos, ¿huh?”

“Sí. Aún jugamos MonHun juntos.”

“Pero siento que papá siempre recibe regaños de tu parte…”

“Eso es porque olvidó llevar la bomba barril grande.”

¡Gajajaja! Natora-san reía como una pirata.

Entonces aquellos que comenzaron a salir en la secundaria rompían en la preparatoria, ¿huh…?

Bueno, eso tenía sentido. El amor sólo es un lujo pasajero. No decidía al compañero de la vida.

Y una vez casado, no tendré que preocuparme por distraerme…

Tenía sentido.

Higashira y yo podríamos no ser amantes, pero como esposo y esposa, podríamos ser capaces de vivir de manera confortable—supongo que era un hecho innegable.

“Bueno… te dije que te apresures, pero creo que necesitas algo de tiempo para pensarlo. Eres un estudiante de preparatoria, una etapa en la que todavía piensas con tu parte de abajo.”

¿Acaso consideraba a los niños de preparatoria como alguna forma de vida de bajo nivel o algo?

“Oye, Isana.”

“¿Sí~?”

El oyakodon de Higashira estaba vacío. Lamió los granos de arroz de sus labios.

Natora-san miró a Higashira y me señaló a mí. Me señaló a mí.

“Tú. Ve a enjaular a este sujeto.”

“¿Eh~? Lo haría si pudiera.”

“¿Qué dijiste? Maldita seas~, ¿para qué crees que te di esos grandes pechos? Úsalos.”

“Mamá, no sabes la voluntad de acero que tiene Mizuto-kun. Y tu espalda no es la que está sufriendo.”

“Por supuesto que se contiene, idiota.”

“¿Ehh~?”

“Los vecinos no están en casa, ¿cierto? Saldré un rato. Si tienes demasiado miedo para hacer algo, te mataré.”

“Ueeehh~”

Higashira gimió con desagrado.

Bueno, comencé a sentir entumecimiento, ¿pero qué debería decirles siquiera a esta madre e hija? Sentía que me había sido transportado a otro mundo donde el sentido común era distinto.

Natora-san se levantó del sofá.

“Ahora bien, Mizuto-kun, tómate tu tiempo. Nuestras paredes son bastante gruesas, así que pueden hacer ruido.”

“…No se preocupe por eso.”

“No me hagas repetirlo. Por supuesto que me preocupa, ¿sabes?”

Natora-san sonrió con suficiencia y se fue de verdad.

Nos quedamos solos. Por un rato. Pasamos un tiempo comiendo galletas. Sentí que Higashira a mi lado estaba un poco consciente de mí, y no me pidió una almohada regazo como siempre.

“…Ah… Mizuto-kun.”

Higashira tartamudeaba como perdida.

“No tienes que preocuparte por lo que dijo mamá, ¿ok?”

“Lo sé.”

“Es rápida para juzgar todo. Una vez que decide algo, dará la orden.”

“Sí.”

“…Erm… ¿deberíamos regresar a la habitación?”

Miré al costado y vi a Higashira alzando la vista hacia mí.

Bajo mis ojos, podía ver el blanco de su camiseta, el tono de piel de su pecho, y una tela azul claro en la parte baja de mi visión.

“…Bueno.”

—Por supuesto que se contiene, idiota.

Sí. Así es.

No te rechacé porque no me resultaras atractiva.

 

Recordé lo que sucedió en aquel entonces.

Higashira confesó. La rechacé.

—Lo siento, Higashira—no puedo tenerte como novia.

Cuando Higashira escuchó mi respuesta, se quedó allí en silencio por un rato.

No pude hablarle. No pude alejarme. Todo lo que pude hacer fue mirar en silencio, y pensar que eso era todo lo que tenía que hacer.

De hecho, ya me decidí.

Higashira y yo podríamos no ser amigos por siempre.

Tal y como con Ayai en la secundaria, podríamos terminar siendo algo más que sólo amigos.

Y cuando eso pase… seguramente terminaría tomando una decisión por la que Higashira me odiará.

Estaba muy feliz de que ella me tenga cariño… pero ese lugar en mi corazón no se le podía ser entregar a nadie más.

Para mí, no había dudas sobre mi decisión.

Era hacer llorar a la persona en mi corazón, o hacer llorar a Higashira—ese era mi dilema.

Incluso si significaba sumergirme en un mar de desprecio hacia mí mismo, incapaz de perdonarme, esa era la única decisión que podía tomar.

Pero.

Higashira… no lloró en absoluto.

Sólo permaneció allí por un rato, con la cabeza gacha—y entonces cuando la levantó de nuevo.

Mostró una sonrisa relajada.

—Muchas gracias por escucharme… Volvamos a casa, Mizuto-kun.

Actuó como siempre.

Estuve atónito al ver a Higashira actuar como el día anterior.

—¿Te encuentras… bien?

Higashira sonrió engañosamente ante mi estúpida pregunta.

Sujetó su codo derecho con su mano izquierda, como protegiéndose.

—No puedo decir que… estoy bien… es sólo que me asusta estar sola.

Esa fue la primera vez que vi a Higashira Isana dolida.

Si hubiera sido alguien más el que la lastimó. Yo nunca habría perdonado eso. Haría lo que fuera para hacer que el perpetrador se arrepienta.

Y debido a eso.

Cuando me di cuenta de que yo fui el que lo hizo, fui consciente de que tenía que ser castigado.

Sentía que tenía que asumir la responsabilidad por rechazar a Higashira.

Entonces, incluso cuando ella hizo el extraño pedido de volver a casa junto a mí apenas después de su confesión rechazada, sentí que tenía que acompañarla sin importar lo que pase.

Abandoné la entrada de la escuela con Higashira aquel día.

Nos detuvimos en una librería como siempre. Ella dijo que quería cierta serie nueva, y hablamos sobre las mismas cosas de siempre.

Pensé que sería el mejor consuelo para ella.

Y cuando nos despedimos, Higashira dijo.

—Bueno… muchas gracias por lo de hoy.

Fue ahí cuando.

Por primera vez, fue que… la voz de Higashira tembló.

Fue un temblor débil.

Pero decía suficiente.

Me mostraba con cuánta desesperación Higashira trató de mantener sus emociones bajo control cuando volvimos de la escuela y revisábamos novelas ligeras, y cuán desesperada estaba por mantener nuestra relación viva—

Tal vez sea su personalidad.

Tal vez sea una cualidad suya.

Tal vez sea que nunca interactuó realmente con los demás, y que no sabía cómo controlar sus débiles músculos faciales, que nunca lo mostró en su rostro.

Pero—ella es fuerte.

Es completamente distinta a mí que armaba escándalos por cosas triviales, lo opuesto a mí que quería volver al pasado pero nunca lo intentaba.

Su débil apariencia lucía muy glamorosa para mí.

Era tan precioso, que quería protegerlo a como dé lugar.

Entonces—antes de que Higashira volteara.

Antes de que marchara arduamente en su solitario viaje a casa.

Sujeté su brazo.

—¿Eh?

Higashira se sobresaltó. Alzó la vista hacia mí.

Las lágrimas permanecían en sus ojos, y brillaban ligeramente.

Y le dije para evitar que fluyeran.

—¿Qué tiene de malo ser amigos?

—Supongo que los amantes romperán después de algunos años. Como, podríamos no mantenernos en contacto cuando entremos a la universidad. Comparado con eso—

—¿No sería mucho mejor ser amigos?

Podrían ser puros argumentos semánticos de mi parte.

Probablemente sólo sea un montón de tonterías para menospreciar el amor e inflar la amistad.

Pero necesitaba una excusa.

Necesitaba una razón para no hacer llorar a Higashira.

—Podré no besarte, pero puedo abrazarte.

—Puede que olvides tu maquillaje, y que tu ropa no sea linda, pero no me enfadaré por eso. No necesito que tengas ciertos atributos o requisitos para estar junto a mí.

—Es por eso que…

No pude terminar mis palabras.

Antes de que pudiera, Higashira agachó la vista, y jaló del pecho de mi uniforme.

—Por favor para. Por favor…

—Si sigues diciendo esto… ¡sólo te amaré más…!

No negué ni afirmé sus palabras.

Dependía de Higashira decidir si ella debería hacerlo así que…

Pero, le prometí una cosa.

—Siempre seré el Mizuto que conoces.

Nuestra relación no cambiará sólo porque se confesó.

Nuestra relación no cambiará sólo porque la rechacé.

Es la única forma en la que podía compensar su determinación.

Unos pocos segundos después… creí escuchar un resoplido, e Higashira alzó la vista.

Ese rostro lucía como si todo lo anterior fuera un sueño, un rostro despreocupado.

—Bien, entonces así son las cosas. ¡Por favor sigue cuidando de mí!

No. Bueno.

Incluso yo quedé impactado, y aterrado por lo rápido que cambió de humor.

Incluso yo me pregunté si ella se obligó a sí misma a sonreír.

Me saludó alegremente, y se apresuró de regreso a casa. Fue entonces que entendí, esta era Higashira Isana.

Ciertamente entrecerré los ojos cuando la vi alejarse caminando.

Como si hubiera visto algo deslumbrante.

Ah, sí, no iba engañarla al respecto.

Porque no es un lujo pasajero.

—Creo en Higashira Isana.

No es amor. Es fe.

 

Regresaron a la habitación de Higashira, y pusimos algo de distancia entre nosotros.

Higashira se sentó sobre la cama. Yo me quedé junto al escritorio.

La cama crujió, y los ojos de Higashira claramente deambulaban. Jugueteaba con su flequillo. Ella fue la que me dijo que no me lo tomara tan en serio, y aun así estaba claramente nerviosa.

“Higashira.”

“¡Hyah! ¿Hyaiiii?”

Saltó en el momento que la llamé, y sacudió las manos frenéticamente.

Es divertido. Sigamos molestándola un poco.

“¿No vas a hacer nada?”

“¿Eh? …Ah, ¿m-me saco la ropa ahora?”

“No tienes suficientes cartas para jugar.”

Incluso si quisiera capturarme, esa debería ser la última carta, el as bajo la manga.

Auuu~. Higashira cayó de costado sobre su cama, y gimió.

“No puedo hacerlo después de todo… y fui rechazada porque no pudimos hacerlo…”

“No te preocupes por eso. Incluso si fuera otra chica, yo tampoco sería capaz de hacerlo.”

“Bueno, supongo. Quizás me saqué la lotería al invitarte a mi habitación, Mizuto-kun.”

Absolutamente. Incluso cuando estaba en una relación, no habría entrado a su habitación si no fuera por un resfriado.

Traté de aliviar la tensión de Higashira al mirar el escritorio. No parecía apropiado que husmee en la habitación de otra persona tan descuidadamente, pero ya que Higashira siempre está revolviendo cada rincón de mi cuarto, supongo que estamos a mano.

Había una tablet PC, varias novelas ligeras, y unos audífonos polvorientos y otras cosas sobre el escritorio de Higashira. Claramente no estaba estudiando en absoluto. ¿Terminó sus tareas siquiera?

“¿…Hm?”

Hay un cuaderno de hojas sueltas enterrado allí.

¿Su cuaderno de estudio? Pero no hay texto sobre él…

Tenía curiosidad, así que moví la novela ligera que estaba encima. “¡Ah!” Higashira balbuceó.

“Espera. ¡Mizuto-kun… eso es…!”

Qué mal, demasiado tarde.

Vi lo que estaba dibujado sobre esa hoja suelta.

Sí—era un dibujo.

Era una ilustración.

Parecía ser una ilustración de la heroína de la novela ligera que estaba encima del cuaderno.

“Hmm… ya veo.”

“¡Arrrgh! ¡No mires, no mires, no mires!”

“No te precipites. Ya supuse que escribías novelas y dibujabas ilustraciones.”

“¡¿Eh?! ¿Viste lo que está en la tablet?”

“¿Entonces la novela está guardada en la tablet?”

“¡Argh! ¡¡¡Cavé mi propia tumba~…!!!”

Higashira presionó su rostro contra la almohada y gritó en agonía.

Mientras tanto, saqué el cuaderno y examiné la ilustración detenidamente.

“No estás calcando… nada mal si realmente dibujas desde cero.”

“No, en absoluto… sin importar cuántas veces lo redibuje, los brazos, piernas, y rostro lucen extraños…”

“Hmmm, no puedo distinguirlo como amateur realmente.”

Como mínimo, diría que ella es al menos lo suficientemente buena para atrapar miradas en clase de arte.

Higashira rodó sobre la cama.

“¡Eso no es cierto~! ¡No puedo dibujar las ilustraciones divinas que hay en las redes sociales!”

“¿Quieres ser una ilustradora divina?”

“¡Por supuesto!”

Higashira de pronto se levantó y me miró directamente.

“Escucha, Mizuto-kun—si no puedo dibujar bien, no puedo dibujar ecchi.”

“¡O-ok!”

“¡Si dibujo mal, no será erótico! ¡Si no tengo las habilidades, no puedo dibujar ilustraciones de humanos uniéndose!”

Esta chica menor de edad está quebrantando la ley descaradamente.

“¿Por qué quieres tanto dibujar imágenes eróticas…?”

“¡Porque quiero ver los pezones de mi heroína favorita! ¡No hay muchos fan art de novelas ligeras, así que tengo que dibujarlos yo misma!”

Es raro hallar una mujer que sea tan honesta sobre sus deseos sexuales adolescentes.

“Bueno, no puedo descartar eso como motivación. No puedo aconsejarte que yo mismo soy un amateur, pero ya que has llegado tan lejos, deberías hacer tu mejor esfuerzo.”

“¿Ehh~? Pero necesito practicar dibujo y demás si quiero ser buena en esto.”

“La gente dice que lo básico es importante en todo a fin de cuentas.”

“¿Pero no te resulta aburrido dibujar manzanas y esas cosas? El sólo verlas es aburrido.”

“No es como si hubiera un regla de que tienes que dibujar manzanas cuando practicas. ¿No puedes simplemente elegir algo que te guste y dibujarlo?”

“Mmm… entonces, Mizuto-kun.”

“Sí… ¿hm?”

Lo dijo como si se refiera a algo obvio, y por un momento, no pude reaccionar.

Higashira inclinó la cabeza con desconcierto.

“Dijiste que debería dibujar algo que me guste, ¿cierto? Te dibujaré a ti entonces, Mizuto-kun. Por favor ayúdame~.”

“No… bueno, no es que no puedas.”

¿Debería decir que es muy despreocupada, o que no duda en absoluto…? Como sea, no podré soportar esto si me sobresalto cada vez que Higashira hacia esto.

Higashira saltó de la cama, y tomó la tablet PC de su escritorio. No va a dibujar de forma analógica, sino digital.

“Por favor siéntate en esta silla~.”

Jaló una silla de debajo de su escritorio, me la ofreció, y regresó a su cama.

Me senté en la silla, Higashira se sentó en triángulo, y apoyó la tablet sobre su regazo.

“¿Puedes dibujar en esa postura?”

“Síp. Por favor no te muevas demasiado~.”

Tomó el lápiz óptico, echó miradas sobre mí repetidamente, y comenzó a dibujar.

“Nunca tuve a nadie que modele para mí. Estoy un poco nerviosa.”

“¿Entonces siempre dibujas todo en tu imaginación? Eso es impresionante.”

“Bueno, en realidad, suelo dibujar lo que veo. El cuerpo humano no tiene sentido para mí cuando trato de dibujarlo.”

“Ahh, ¿entonces buscas imágenes de modelo en internet?”

“Incluso sin eso, tengo mi propio cuerpo.”

“¿Eh?”

“Poso, me tomo fotografías, y luego las miro… ¿quieres ver?”

“…No miraré.”

“Gracias a dios. Todas son sin censura.”

¿Qué diablos trataba de dibujar? A propósito, no debería preguntarle.

“En aquel entonces, usaba ese espejo para selfies para poder tener material de referencia, pero como Minami-san me enseñó, he estado usándolo más seguido para su propósito original.”

Cómo se vería Higashira sobre el espejo de la pared… traté de imaginarlo.

Está sola en la habitación, haciendo una pose escandalosa, apuntando su smartphone al espejo—

—Oh dios. Para, para, para, no pienses más.

Tenía una severa sensación de culpa cuando tenía esas imaginaciones sobre Higashira—probablemente porque yo tenía la oportunidad de hacerlo, y sentía que estaba negándome a mí mismo al elegir no hacerlo.

Si me retractara de mi respuesta a esa confesión en este momento, estoy seguro que Higashira lo aceptaría alegremente.

Si ese día realmente llegaba—no debería retractarme de mi decisión con intenciones malévolas.

“Nurufufufu, el cuerpo de Mizuto-kun…”

…Bueno, ella es la personificación de la maldad.

“Tienes una figura muy delgada y hermosa. Tus dedos son muy finos. Es como si hubieras salido de un manga shoujo.”

“Me faltan músculos. Seré puro huesos si me sacara la ropa.”

“Nnnnnmmm… entonces te agregaré un poco.”

“…Oye, espera un segundo. Estoy usando ropa, ¿de acuerdo?”

“Es difícil dibujar ropa.”

“¡Oye!”

“¡Está bien, está bien! ¡No voy a dibujar esas cosas que requieren mosaicos! …Aunque será una historia distinta si me muestras los datos.”

“¡Por supuesto que no te mostraré!”

“Tch~.”

Higashira chasqueó la lengua con rencor. Es de no creer…

Incluso mientras hablamos, Higashira seguía moviendo el lápiz óptico. Parecía muy feliz al respecto. A propósito, Yume era igual cuando me tomaba fotografías como modelo. ¿Qué tiene de divertido pedirme hacer esas poses?

“…Ustedes sí que tienen sus fetiches extraños…”

Murmuré, e Higashira alzó la vista.

“Este es mi primer amor. No sé qué tiene de extraño eso.”

“No lo digas de forma tan directa. Me asustaré.”

“Entonces, Mizuto-kun… ¿Has tenido novia?”

Higashira preguntó en tono de charla entre amigos, y su rostro ya estaba dirigido hacia la pantalla de la tablet, con el lápiz óptico sin mostrar indicios de detenerse.

¿No te importa? Naturalmente, no hice tal pregunta, ya que sabía que Higashira Isana no era una persona de mente cerrada.

“…Nop, no tengo nadie que me guste.”

“¿Ehh~? ¿Por qué mientes? Recuerdo que—cuando me confesé a ti, tú dijiste ‘Hay alguien ocupando el asiento dentro de mi corazón’.”

“……”

“Pensé que fue algo extraño para decir. ¿No significa que tienes alguien a quien amas?”

Hasta este punto, nunca presté atención a con cuánta precisión Higashira entendió mi respuesta.

Quizás a Higashira nunca le importaron los detalles; esa era la pequeña esperanza que yo tenía.

Pero, bueno… eso no podía suceder.

“…Nop, no tengo nadie que me guste… en este momento.”

“¿En este momento?”

“¿…De verdad quieres oír al respecto?”

“¡Quiero! ¡Siempre me ha interesado un poco esto!”

“¿Un poco? Deberías interesarte un poco más. Quiero decir, podrías habérmelo preguntado en la confesión.”

“No estaba de humor. ¡Tuve un desamor justo antes de ese momento!”

“No, espera, ese no parece ser el caso… bueno, no debería tratar de inflarte aquí. Pero primero diré esto, no te enfades, ¿ok?”

“¿Sí?”

Higashira inclinó la cabeza, y fortalecí mi determinación.

“En la secundaria—tuve una novia.”

Nunca le conté a nadie sobre esto hasta ahora.

El hecho que estaba sellado brotó de mi boca.

El lápiz óptico de Higashira se detuvo.

Gigigigi. Alzó su rostro como una extraña máquina.

“¿…Huh?”

Higashira abrió la boca con 999ms de lag.

“¿N-novia?”

“Sí.”

“¿Amante?”

“Sí.”

“¿Con Mizuto-kun?”

“Sí.”

Higashira me miraba boquiabierta, como un pez.

“¡E-estás mintiendo!”

Grgrgr, retrocedió sobre la cama, y golpeó su espalda contra la pared.

“¡U-un otaku como Mizuto-kun! ¡En verdad! ¡T-tuvo novia…! ¡Novia…!”

“Lo dice la que se confesó a mí.”

“…Ah. Tienes razón…”

Higashira se tranquilizó.

Creí que se enfadaría. Higashira siempre parecía estar en la misma onda que yo—y definitivamente asumía que yo era como ella, pasando mis días de secundaria en solitario. Nunca le conté sobre esto porque no podía soportar traicionar esa expectativa…

“Ya veo… estoy algo shockeada… de que tuviste una novia, Mizuto-kun…”

“Me alegra que sólo sea ‘algo’.”

“Pensé que sería algún tipo de historia espeluznante donde dirías ‘No puedo olvidar a la chica que me prestó un borrador’…”

“¿Cómo crees que es el chico del que te enamoraste?”

¿Ella no estaría en problemas si tuviera a tal persona sobre un pedestal debido a este pequeño acto?

Higashira lentamente continuó moviendo su lápiz óptico.

“Entonces ‘tuviste’… ¿lo que significa que rompiste con ella…?”

“Sí. Cuando nos graduamos… en realidad, estábamos prácticamente separados medio año antes de ese entonces.”

“Woah~~… se siente un poco repugnante escuchar eso de ti, Mizuto-kun.”

“Si realmente lo odias, me detendré.”

“Síp, por favor para.”

¿No deberías ser esta la parte donde ella diga ‘No, no lo odio’?

“Hmm… ya veo~… ¿Entonces me rechazaste debido a esta ex-novia?”

“Así… es, supongo.”

“En resumen. Sigues pensando en tu ex, ¿no?”

“Ugh.”

“Todavía tienes muchos arrepentimientos en tu mente, ¿no~?”

“…N-no, en absoluto…”

“¿En serio?”

Por un momento.

Los ojos de Higashira lucieron tristes y desconsolados conforme agachaba la vista.

“…Realmente te gusta, ¿huh?”

Era obviamente una mirada de envidia.

Tenía envidia de una persona que ella no conocía, y anhelaba ser una existencia así también.

“Estoy segura de que fuiste muy gentil y amable con ella, Mizuto-kun… como el héroe en un manga shoujo, siempre ayudándola.”

El lápiz óptico se detuvo de nuevo.

Ella alzó la cabeza con una mirada nostálgica.

“…Ah…”

Y soltó un suspiro.

“…Se siente espeluznante…”

“Oye.”

¿Esta no debería ser la parte donde debería revisitar la amargura de su primer amor perdido?

“Pero en serio, es espeluznante. Es impropio del apuesto Mizuto-kun ser dulce con una chica.”

“¡Eso probablemente sea verdad mirándolo ahora…!”

“Qué tal si lo intentas conmigo (LOL).”

“¡Estás sonando como una niña a la que le gusta hacerle bullying a los demás!”

¡Inténtalo si te atreves! ¡No termines enamorándote de mí otra vez, idiota!

Aunque estaba modelando, no podía permanecer callado mientras me provocaban así. Me levanté de la silla, y me senté al lado de Higashira sobre la cama.

Higashira continuaba mirando su tablet, y yo me acerqué a su rostro, recorriendo suavemente su patilla a un lado.

“…Nn…”

“Déjame echar un vistazo más de cerca.”

Recordé los varios eventos del pasado e incliné mi rostro más cerca del de Higashira, poniendo una voz gentil.

“Bueno, eres muy linda y adorable… no lo ocultes tanto.”

Higashira alzó su cabeza, me miró a los ojos, y los suyos brillaron.

Y entonces—

“—¡Pfft!”

Estalló a reír, cubriéndose la boca.

“¡Aja! ¡Ajajajajaja! ¡Ajajajajajajajajajajaja!”

“¡Deja de reír!”

Traté de detener a Higashira, quien estaba rodando sobre la cama, sujetándose el estómago.

Ahora que me calmé y lo pensé, ¡sí se sintió como una broma! ¡Pero fui tan serio en aquel entonces! ¡Ahhh, quiero morir!

“Hiii~…resollo… ah~, eso fue gracioso. Por favor hazlo otra vez (LOL).”

“¡Por supuesto que no!”

Pfft, Higashira seguía resollando mientras se escurría cerca de mí.

Posó su mano sobre mi hombro, sus labios cerca de mi oído.

“(…Mizuto-kun, eres más genial de lo que pensé, ¿sabes?)”

“¡Fghhh…!”

“Ah, acerté, ¿cierto? Ya veo. Entonces así era tu ex. Es una conversación estúpida.”

“¡Cállate! ¡Todas las parejas son idiotas!”

“Nurufufufu, bien, a continuación…”

“¡Eso es suficiente! ¡Es desagradable!”

“¡Ukyaaa!”

Sujeté a Higashira de los hombros, y la acorralé contra la cama.

“¡Ah!” Los ojos de Higashira se abrieron pretenciosamente al tiempo que la acorralé.

“Ya que tuviste novia… ¿algunas vez has…?”

“…No, nunca llegué tan lejos.”

“Ah~, ya veo~, entonces es por eso que todavía tienes arrepentimientos sobre ella…”

“¡No! Mira, supongo que tengo que explicártelo. Te rechacé porque pensé en cada una de las razones, y no porque siga enamorado de ella—”

“¿Ah?”

Higashira giró su rostro a un lado como si algo la jalara.

Y yo, quien la acorraló contra la cama, miré en la misma dirección.

“……”

La puerta estaba ligeramente abierta.

Dos ojos espiaban en silencio a través de la brecha, mientras nosotros estábamos sobre la cama.

Era Natora-san.

“…Bien hecho, Isana. Pero pónganse lo que tiene que usar.”

Natora-san dijo, y aventó una pequeña caja por la brecha.

Esa cosa—para decirlo moderadamente… era una caja de bolsas nocturnas. En otras palabras…

“Es demasiado pronto para embarazarte, sabes. Así que, buena suerte con eso.”

Dijo Natora-san, y cerró la puerta.

No tuve tiempo de excusarme.

“¿Hmm…?”

Higashira observó la pequeña caja con curiosidad… ¿Huh? ¿Acaso ella…?

Se deslizó desde debajo de mí, gateó sobre la cama, y levantó la cajita.

“Qué es esto… ¡¿Ah?! ¿Esto es…?”

Higashira inclinó la cabeza mientras inspeccionaba la pequeña caja, y me la mostró alegremente.

“¡Mira esto, Mizuto-kun! ¡Es eso! ¡Es lo que te pones en tu pene! ¡Nunca lo había visto! Wow~. Entonces así se ve. Woah~…”

“…Supongo.”

Higashira no escuchó mi incómoda respuesta y empezó a abrir la caja. Antes de que pudiera detenerla, arrancó una de las bolsitas cuadradas de la tira.

“Mizuto-kun. ¡Mira! ¡…Ahmm, pongámoslo sobre la tapa de los doujinshis~!”

“¡Detente, idiota!”

“¡Owie!”

Abofeteé a Higashira en la cabeza, y las bolsitas cuadradas cayeron de su boca.

¡¿Cuántas veces tengo que enseñarte esta lección, jovencita?!

 

“Nos vemos luego. Adiós.”

“Podías haber pasado la noche aquí. Es lo que mi mamá dijo.”

“No estoy tan loco como para quedarme en una casa en la que nunca he estado.”

Le dije a Higashira mientras me acompañaba hasta la entrada de su apartamento.

Después de todo eso, Natora-san prácticamente me obligó a cenar, e incluso a tomarme un baño. A este ritmo, no iba a poder volver a casa, así que escapé apresuradamente.

Higashira estaba vestida con su camisón y cárdigan. Frotaba sus brazos ligeramente.

“Por favor visítanos otra vez.”

“Sí, lo haré… cuando no haya nadie, espero.”

“Eh~~. ¡No~! ¡Pervertido~!”

“Esa es una estúpida mirada de vergüenza.”

Higashira dirigió la manga de su cárdigan a su boca y rió.

“Juguemos algún juego o algo la próxima vez. Mamá tiene un juego de terror, y quiero verte asustado, Mizuto-kun.”

“Soy bastante fuerte con esos juegos.”

“Quién sabe, si ese es el caso. ¿Dirás lo mismo cuando alguien te corte el brazo en VR?”

“¿En serio, tienes VR? …Ahora estoy un poco interesado.”

“Tengo padres gamers después de todo. ¡No hay forma de que pudiera comprar cosas tan caras con mi mesada!”

Higashira se mecía y balanceaba para expresar su emoción. Al ver eso, mis labios de curvaron ligeramente hacia arriba.

Supongo que mientras yo siga siendo quien era, e Higashira siga siendo Higashira.

Nada cambiará. Si me confesaba o la rechazaba, si ella se confesaba o me rechazaba, nada era nada.

No nos perdíamos en un momento de estupidez.

“Ok. Envíame un mensaje por LINE cuando llegues a casa.”

“Ok. Te responderé cuando tenga ganas.”

“Dices eso~, ¿pero no tienes un índice de respuesta del 100%~?”

“Eso es porque si no leo tus mensajes, vas a spamear emojis, ¿cierto?”

Nijeje. Higashira soltó una risita.

Eso está bien para nosotros.

 

Irido Yume

 

Era alrededor de las 8 PM cuando oí la puerta del frente.

La cena ya acabó, y yo estuve inquieta en el living todo el día, así que me apresuré hasta el pasillo.

En la puerta de entrada, vi a Mizuto sacándose los zapatos.

“¡Espera!”

“¿…Hm? Ah. Regresé.”

“Bienvenido… ¡No!”

“¿Qué?”

“¿Dónde has estado todo este tiempo? ¡Dijiste que ibas a regresar después de la cena, y mamá sólo miraba lascivamente sin contarme nada!”

Es la primera vez que sucedía esto con Mizuto.

Inicialmente pensé que sólo estaba pasando el rato con Kawanami-kun, y que salió a cenar, pero no podía quitarme de encima ese mal presentimiento.

Mamá sonreía de esa forma después de todo, como si tuviera algún significado particular…

Mizuto ignoró mi frustración y caminó bruscamente por el pasillo.

“Fui a la casa de Higashira.”

Respondió simplemente.

¿…Eh?

“Quiero decir, como Higashira ha estado viniendo a nuestra casa, sus padres dijeron que yo debería ir a saludarlos. No esperaba que me hicieran cenar allí también—ah, sí.”

Mientras me congelaba, Mizuto rápidamente pasó por mi lado, y abrió la puerta hacia el living.

“Yuni-san, papá, ¿están aquí?”

“Oh, Mizuto-kun, bienvenido. ¿Qué sucede?”

“Los padres de Higashira quieren venir de visita. Quieren saber cuándo es un buen momento.”

“¡Oh! Claro. Espera un minuto. Veamos cuándo estoy libre.”

Mamá empezó a revisar su agenda en su teléfono, y la ansiedad invadió mi cuerpo.

“¡Qué, qué, qué, qué, qué, qué, qué, qué…!”

“¿Hmm?”

Sujeté el hombro de Mizuto desde atrás, y él giró con desconcierto.

“¡¿E-en qué estás pensando…?! ¿Olvidaste lo que mamá piensa de Higashira-san ahora…?”

Ellos asumían que Higashira-san era la novia de Mizuto.

¡Si ese malentendido se difundía a la familia de Higashira-san…!

“¡…Ah—!”

Mizuto apartó la vista como si quisiera farolearme.

“A decir verdad, sobre eso…”

“¿Eh? ¿Qué? ¿Qué? ¡No quiero oírlo!”

“Quizás sea… una causa perdida.”

El tono de Mizuto era claramente uno de resignación.

¿Qué quieres decir? No necesitaba preguntar eso.

¡En otras palabras, la familia de Higashira-san ya reconoció su relación…!

—¡¿Qué está pasando?!

¡¿Por qué parecía como si Higashira-san estuviera logrando más progreso que yo que vivo con él?!

 

NOTAS DEL TRADUCTOR

  1. Supongo que se refiere a Takarazuka Revue, la compañía femenina de musicales más prestigiosa de Japón.
  2. Por las dudas no sea evidente, no le puse tilde porque es el “mama” / “papa” (ママ / パパ) que usan a veces los personajes de anime/manga/novela para dirigirse a sus padres.

 

Traducción al Inglés: Hellping
Traducción al Español
: nahucirujano
Corrección: nahucirujano

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