Epílogo – Reparador
Respecto al ataque de la Academia
Akatsuki sobre la Academia Hagun, hubo un video que grabó los edificios de
Hagun incendiándose que inmediatamente fue titular de las noticias en toda la
nación. Contra los terroristas que se llamaban a sí mismo Academia Akatsuki y
que perpertraron esta brutalidad sin precedentes, el comité directivo del
Festival de Arte de la Espada inició el proceso de revocación de las
cualificaciones como estudiantes caballeros de la Academia Akatsuki, y
considerar una severa investigación de sur esponsabilidad. Condenarlos más
rigurosamente que nadie, arrestarlos, censurarlos. Era natural creer que no se
les permitiría participar en el Festival de Arte de la Espada.
Pero—cuando la persona que se
identificó como el director de la Academia Akatsuki apareció, la situación
cambió por completo. El nombre del hombre de mediana edad que se presentó y se
reveló a los medios como el director de la Academia Akatsuki era—Bakuga
Tsukikage. Era el actual primer ministro, en otras palabras, el jefe ejecutivo
de la nación de Japón.
En la investigación por los
hechos, él no se disculpó. Por el contrario—dijo esto con una revigorizante
sonrisa.
“Es magnífico, ¿no lo creen? Qué
asombroso. Una academia vinculada a la Liga no fue un digno oponente para
ellos. ¡Esa es la fuerza de la Academia nacional Akatsuki de Japón, y que
reemplazará a las Siete Estrellas, los perros de la Liga!”
Y declaró su propósito: que la
Academia nacional Akatsuki conquiste el Festival de Arte de la Espada de las
Siete Estrellas, para dejar obsoleto al sistema de entrenamiento de Blazers
dominado por la Liga de Naciones de Caballeros Mágicos, y que Japón recupere su
supremacía.
Luego de ese discurso, la
situación comenzó a desenvolverse en una dirección que nadie había imaginado.
La policía, el sistema judicial, no tomaron ninguna medida en absoluto en
contra de la brutalidad de la Academia Akatsuki. Por el contrario, afirmaron 「El ataque contra la Academia Hagun fue un falso
informe. En realidad, sólo se trató de un accidente durante un enfrentamiento
mutuamente aceptado.」 y comenzaron a divulgar eso como la verdad.
Generalmente, esta era una
afirmación inaceptable, pero al insistir tanto el gobierno, fue fácil que el
público terminara confundida. Por supuesto las siete escuelas comenzando por la
Academia Hagun, al igual que el comité directivo del Festival de Arte de la
Espada, se enfurecieron. Inmediatamente actuaron para suspender el derecho de
los estudiantes de la Academia Akatsuki a participar en el Festival.
Pero esta acción no fue
ejecutada. Llegó una directiva desde el cuartel general de la Liga de Naciones
de Caballeros Mágicos. Respecto al entrenamiento de los Blazers de Japón, una
atrocidad como esta no podía ser ignorada. Por lo tanto, la Academia Akatsuki
debe ser destruida en el Festival de Arte de la Espada de las Siete Estrellas,
y la pertinencia de la Liga de Naciones de Caballeros Mágicos se mostrará
públicamente.
Todo—había ocurrido exactamente
como Hiraga describió. El enemigo espiaba detrás de escena, pero el enemigo era
el propio país, y encima el cuartel general de la Liga fue el que dio aquella
orden, por lo que las personas a cargo del comité directivo del Festival de
Arte de la Espada y las siete escuelas no pudieron hacer nada en absoluto. Al
final, sus denuncias habían terminado en un lloriqueo, y la Academia Akatsuki
se ganó su reputación y un grado de atención como un grupo de poderosos y
prometedores caballeros que dejaron medio destruida a la Academia Hagun con
apenas siete personas, y formalmente ingresaron al Festival de Arte de la
Espada como la octava escuela.
♦♦♦♦♦
“Lo siento.”
Refiriéndose a las circunstancias
del ataque a Hagun, Kurono se disculpó con Ikki y Shizuku por su propia
impotencia. En respuesta, Ikki le rogó a Kurono que levantara la cabeza.
“No, no hay razón para que se
disculpe, Directora.”
“Pero es increíble, ¿no...? Que
había algo así oculto, fuera de la vista en este país.”
“Ha estado ardiendo desde el fin
de la segunda guerra mundial.”
Kurono dijo ante el murmullo de
Shizuku.
Desde el comienzo, la unificación
del país nunca pudo considerarse pacífica. Después de la segunda guerra
mundial, el cansancio del público respecto a la guerra fue conveniente para
detener el imperialismo temerario del Primer Ministro, y para progresar hacia
un mundo en armonía al conceder territorio. El ingreso de Japón a la Liga de
Naciones de Caballeros Mágicos fue un paso para llevar a cabo ese plan.
“Sin embargo, fue un acto que
renunciaba a los privilegios de una nación poderosa. Naturalmente, hubo muchas
voces de discenso, y surgió un gran conflicto político. A pesar de que el
Primer Ministro en aquel momento obligó al país a inclinarse hacia la armonía
internacional, la discordia de esa era sigue existiendo aun ahora. Hubo
personas que creían que Japón tenía el poder para seguir siendo un gran país
sin unirse a otros como Rusia y Estados Unidos. Estaban aquellos que pensaban
en una reforma. Y también hubo muchos que consideraban un problema que el
entrenamiento y disciplinamiento de los Blazers sin aprobación de la Liga de
Naciones de Caballeros Mágicos no se sancionara—estas personas tenían una gran
influencia y se oponían a la creación de una rama de la Liga.”
“¿Crear rama de la Liga?”
“Desde el comienzo, la rama de la
Liga que tenemos ahora anteriormente era un departamento de guerreros de la
época en que los Blazers eran llamados samuráis, un cuerpo armado de Blazers
directamente controlado por el gobierno japonés, ahora separado del gobierno
con nada más que un cambio de nombres. La relación que tenemos con la rama de
la Liga que nos arrancó nuestra autoridad no puede considerarse como buena.
Bueno, como esto también era para obligarnos a que nos inclinemos por el
sendero de la cooperación internacional, habría cierta presión. Y el punto de
vista de la anti-Liga también era compartido por parte del público.”
El porcentaje de extremistas
entre ellos era especial, pero la declaración de la anti-Liga afirmando que
sería extraño que los propios soldados de la nación sean entrenados con un
sistema creado por extranjeros era bastante lógica. Pero entonces, como también
estaban aquellos que debenfían las ventajas de la Liga, era difícil decidir
quién tenía razón—
“...Y así, la opinión pública fue
presionada por medio siglo y esa influencia se expandió hasta el gobierno
dominante que tenemos hoy en día, pero puede que el incidente de esta vez fuera
inevitable.”
“En resumen, el plan del Primer
Ministros Tsukikage era demostrar sus propios logros en donde la Liga celebra
el Festival de Arte de la Espada de las Siete Estrellas. ¿Básicamente demuestra
sus logros directamente, y le roba la autoridad a la Liga para educar a los
Blazers?”
“Esa sigue siendo una conjetura
optimista. En el peor de los casos, puede que su objetivo sea cortar
completamente las relaciones con la Liga.”
“¿Y que hay del programa de
entrenamiento de la Academia Akatsuki que proviene de Rebelión, el grupo
terrorista?”
“La única evidencia de que los
estudiantes de la Academia Akatsuki son miembros de Rebelión es el testimonio
de Arisuin, después de todo. Si ellos fingen ignorancia y honestidad, no hay
nada que podamos hacer. Incluso en el caso de que realmente haya prueba de
ello, el gobierno usará todo su poder para eliminarla. Igual que con el ataque
a Hagun.”
Mientras soltaba un suspiro,
Kurono sacó un cigarrillo.
“Pero sigo sin poder crrerlo. Que
Tsukikage-sensei haga algo así...”
Se quejó con un rostro amargo.
“Sensei, ¿usted conoce al Primer
Ministro Tsukikage?”
“Era el director de Hagun cuando
yo asistía aquí. Lo recuerdo como una persona intelectual, racional, y muy
respetable, pero... ¿qué sucedió con él después convertirse en político?”
Mientras expresaba dudas,
encendió su cigarrillo. El cenicero sobre su escritorio de trabajo estaba tan
lleno de cigarrillos usados que parecía un erizo de mar. En parte probablemente
se debía a su irritación.
“De todas maneras, ya se ha
decidido formalmente que la Academia Akatsuki participará en el Festival de
Arte de la Espada. Ellos son elites del bajo mundo. No sería exagerado decir
que el Festival de este año será completamente distinto de lo normal. Por eso
los profesores están pensando en permitirles a los estudiantes decidir no
participar. Esto significa que ustedes deciden si todavía quieren aparecer.”
“¿Entonces es así?”
Ikki finalmente comprendió por
qué había sido llamado a la oficina de la directora.
“Arisuin y Toutokubara, al igual
que las hermanas Hagure, ya se han retirado. Arisuin siente que es su
obligación, como se esperaba. Oí que Toutokubara se quedará junto a Touka,
quien aún no ha recuperado el conocimiento. Y en cuanto a Kikyou y Botan
Hagure, parece que perdieron la confianza luego de atestiguar la fuerza de
Akatsuki.”
“...Ya... veo. Supongo que no
podía evitarse, ¿huh?”
“¿Qué van a hacer? Dadas las
circunstancias, haré una excepción respecto a mi promesa contigo—”
“No, no hay problema en
absoluto.”
Ikki interrumpió a Kurono, porque
no necesitaba la concesión que ella estaba ofreciendo. Ikki ya lo había
decidido en su corazón.
“Participaré en el Festival de
Arte de la Espada. La promesa puede seguir como hasta ahora.”
“¿Estás seguro?”
“Sí. En primer lugar, el Festival
de Arte de la Espada de este año no parecía normal para mí. En un festival
donde usualmente sólo aparecen caballeros legítimos, se están entrometiendo
criminales poderosos del bajo mundo. Eso es todo. Más que un Festival de Arte
de la Espada celebrado para definir a los mejores caballeros estudiantes de
Japón, el de este año quizás ni siquiera pueda considerarse como un verdadero
Festival de Arte de la Espada.”
Entonces—
“Hay algo que quiero. En
cualquier caso, lo que piensan el Primer Ministro Tsukikage y aquellos que
están con él, no nos interesa a los estudiantes. Como siempre, sólo apunto al
lugar donde prometí luchar de igual a igual con Stella.”
Respondiendo con una fuerte voz,
mostró un rostro verdaderamente determinado.
“...Y además, hay un oponente que
me preocupa un poco.”
“¿El Emperador Espada de Viento?”
“No.”
Ikki lo negó de inmediato.
“No puedo decir que no me
preocupa mi hermano Ouma, pero hay alguien más.”
“¿Más que el Emperador Espada de
Viento? ¿Quién?”
“El representante que
originalmente era de la Academia Kyomon. Amane Shinomiya.”
“Onii-sama, ¿ese es el chico del
rostro extremadamente lindo?”
Ikki asintió ante la pregunta de
Shizuku. Kurono inclinó la cabeza ligeramente, confundida ante esa
confirmación.
“...Pero no lo vi como un
caballero particularmente notable.”
“Yo también lo pensé.”
“¿Qué?”
“Los que están implicados con
esto deben tener una ambición excepcional como mi hermano Ouma. Entre los
miembros de la Academia Akatsuki, no hay ninguno que no deje una impresión especial.
Y creo que mis impresiones son básicamente correctas. Su poder como caballero
no es tan grande comparado con el resto de los de Akatsuki... Y a pesar de eso,
por alguna razón siempre he tenido una extraña impresión acerca de él. Una
sensación desagradable lo suficientemente fuerte para asombrarme incluso a mí—”
¿Por qué tenía tales sensaciones
de desagrado solamente para con Amane? El propio Ikki no lo sabía. Por esa
razón, no podía evitar pensar que era un mal presagio.
“¿Por qué siento tanto rechazo hacia
Amane-san? Quiero saberlo.”
No lo entendía ahora, pero debe
haber una razón. Ante las palabras de Ikki, Kurono asintió con comprensión.
“...Es cierto, no eres del tipo
de persona quemira a los demás con asco sin razón, Kurogane. Quizás eres el
único que notó algo sobre este chico llamado Shinomiya. —De todas formas,
entiendo tu determinación. Seguiré tu participación en el torneo.”
“Muchas gracias.”
Ikki expresó su gratitud, y le
preguntó algo que daba vueltas en su mente.
“Por cierto, Directora. ¿Stella...
también participará?”
En respuesta, Kurono contestó con
una pequeña risa.
“Si le hubieras preguntado esta
mañana, ella habría contestado con un ‘¿Te pegas a mí como el musgo?’”
“Esa respuesta se parece mucho a
lo que Stella-san diría, Onii-sama.”
“...Supongo que sí.”
Ante las palabras de regaño de
Shizuku, Ikki asintió un poco.
“Ahh, eso me recordó algo,
Kurogane. Ella dejó un mensaje para ti. ‘Durante la semana hasta que comience
el Festival de Arte de la Espada, no regresaré al dormitorio.’ Y también dijo
‘¡Sólo porque no estoy allí no quiere decir que debas dejar que Shizuku haga lo
que quiera!’.”
“Me niego.”
Aunque Shizuku respondió de
inmediato a esa parte del mensaje, alzó los ojos y miró a Ikki, confundida.
“¿Pero a qué se refiere con que
no vendrá por una semana?”
“—Me lo pregunto.”
Ante la pregunta de Shizuku, Ikki
rememoró... las palabras de Stella cuando ayer fueron a visitar a Touka y
Utakata quienes aún no habían despertado. Miró a los dos por la ventana. Y
apretando los puños con muchísima fuerza, habló con una voz temblorosa.
「No sabía... que ser débil... era tan doloroso...」
“...Estoy seguro de que Stella también ha estado pensando en muchas cosas.”
Esos comentarios, esas lágrimas,
probablemente no eran lo que Stella deseaba. Por eso Ikki vagamente pudo
responder por encima la pregunta de Shizuku.
“Por cierto, Shizuku Kurogane.
Tengo algo importante que discutir contigo.”
De pronto, Kurono le presentó una
cuestión a Shizuku quien había permanecido al lado de Ikki todo el tiempo.
“Sí, ¿de qué se trata?”
“La verdad es que, como Kanata
Toutokubara, Nagi Arisuin, Kikyou Hagure, y Botan Hagure han rechazado
participar, iba a ofrecerte a ti el derecho de aparecer en el torneo. Eres la
única caballero que logró una victoria en este incidente. No hay problema con
tu capacidad. Si estás dispuesta a aceptar esta oferta, haré que se cumpla de
manera acorde, entonces... ¿qué harás?”
La expresión de Shizuku no
mostraba asombro ante la pregunta. Quizás Arisuin ya le había contado al
respecto. Shizuku, sin demostrar ningún titubeo en particular, asintió.
“Claro, acepto agradecidamente la
oportunidad de participar.”
“Entonces vamos a encargarnos de
eso.”
Y así, Kurono escribió algunas
palabras en documentos que tenía a mano, y agregó su sello. Luego de eso, alzó
su rostro y le informó a Ikki y Shizuku quienes se encontraban frente a ella.
Mostrando una sonrisa valiente, dijo—
“Este año, se desató un alboroto
anormal antes de que pudiéramos reaccionar, pero como dijo antes Kurogane, no
hay necesidad de preocuparse por la conspiración de los adultos en torno al
Festival de Arte de la Espada. Los protagonistas en el Festival son sin dudas
los caballeros estudiantes. Esta es una buena oportunidad para encontrarse en
combate con los miembros de Rebelión, en un lugar donde ellos no pueden luchar
rompiendo las reglas. Ya sea en la
sociedad pública o en el bajo mundo criminal, en este festival se están
reuniendo personas poderosas sin tales distinciones, para decidir quién es
realmente el más fuerte de Japón. ¿No es espléndido? El escenario más alto e
incomparable. ¡Pónganse a prueba y diviértanse hasta los límites de su fuerza!”
“¡Lo haremos!”
♦♦♦♦♦
Al mismo tiempo, Stella Vermillion
se encontraba en frente de un gimnasio en el Área Metropolitana de Tokyo
reservado para uso exclusivo de los contendientes del Rey de Caballeros. Estaba
esperando a alguien.
“Bueno, bueno, no pensé que nos
encontraríamos en ese lugar.”
La que finalmente apareció era la
Princesa Yaksha, Nene Saikyou. Esta era una institución que Saikyou usaba
mientras se quedaba en Hagun.
“La estaba esperando,
Nene-sensei.”
“¿Oh? ¿Dices que tienes asuntos
conmigo, Princesa?”
Suponiendo sus intenciones por
aquellas palabras, Saikyou escuchó el importante tema del que Stella quería
hablar con ella. La expresión de Stella era extremadamente seria—o quizás muy
preocupada—conforme respondía.
“Durante la semana hasta que
comience el Festival de Arte de la Espada, le pido que me entrene.”
“Una vez más, que palabras tan
abruptas. ¿A qué viene esto?”
Ante esa pregunta, Stella se
mordió los labios, y respondió con una voz tensa.
“...Desde que no pude superar
definitivamente a Touka-san en las batallas de práctica durante el campamento,
he sido apenas consciente de algo. Pero esta vez me di cuenta realmente.”
La sensación al enfrentar el
Kusanagi de Ouma seguía viva en las manos de Stella. Era la primera vez que lo
había experimentado, perder en fuerza, en su propio campo, en su fuerte: la
ofensiva. El impacto de esa derrota, junto con Touka quien la había protegido y
que seguía sin recuperar el conocimiento, había hecho que Stella enfrentara la
realidad.
“Soy... débil. A este ritmo, no
podré unirme a Ikki en el lugar que prometimos.”
“¿Entonces es por eso que quieres
que te entrene?”
Stella asintió con énfasis.
“¡Por como yo lo veo, usted es la
más fuerte de esta academia, Nene-sensei! ¡Por eso quien pasar este última
semana entrenando con usted! ¡Por favor!”
“¿...Y si digo que no?”
Saikyou contemplaba mientras
Stella bajaba la cabeza profundamente, y cuando Stella la levantó rápidamente
para responder—
“Las chispas que caen sobre todos no pueden ignorarse, ¿cierto?”
A través del cabello que colgaba frente a sus ojos, Stella miró a Saikyou con ojos ardientes. Si Saikyou no acompañaba a Stella, Stella la obligaría. Si Saikyou no aceptaba, Stella atacaría de inmediato. Eso era lo que estaba diciendo la mirada de Stella.
Dándose cuenta de eso, Saikyou
suspiró por dentro.
Supongo que está metida en una situación difícil,
¿huh?
Saikyou lo reconoció. Hoy,
Stella—estaba luchando. La experiencia de una derrota absoluta que nunca antes
había tenido. La sensación de impotencia que nunca antes había tenido. Frustración,
amargura, el dolor de querer hacer algo, cualquier cosa, pero sin saber cómo
hacerlo. Porque si no hace nada, la ansiedad la aplastará.
Honestamente, lo que necesita ahora es algo que la
calme, pero...
Entrenar forzosamente por
impaciencia y agitación sólo sería peligroso. No había nada más importante que
decirle eso claramente. El potencial que tenía Stella se encontraba en otra
dimensión. El hecho de ser rebajada al nivel de una persona ordinaria, y
alcanzar el techo en la habilidad de una prodigio que goza del poder mágico más
grande del mundo, había constituido una gran pérdida para Stella. Por lo tanto,
decirle que se calmara era la mejor opción para una profesora.
Aun así—
...Como se esperaba, esto requiere de un poco de
compasión, ¿huh?
Viendo la tensa expresión de
Stella al punto de que podría romper en lágrimas en cualquier momento, Saikyou
pensó. Ciertamente, pensando a largo plazo, calmarla podría ser la mejor
opción. El potencial de Stella sin dudas estaba por encima del resto. Probablemente
no había nadie más en Hagun que pudiera igual al Emperador Espada de Viento.
Para Saikyou, era fácil imagina el futuro.
Pero—eso sería en tres años. En
este momento, la ansiedad que Stella estaba sintiendo era una verdad
inconfundible. En los términos del Festival de Arte de la Espada de este año,
probablemente sea difícil que Stella llegue a las finales en su estado actual.
Como Stella comprendía eso, le estaba preguntando a ella qué podía hacer.
Eres del tipo con gran talento, así que... bueno,
eso no es razón para que deba ayudarte, ¿sabes?
Recordando sus propios días como
estudiante, Saikyou soltó una sonrisa irónica desde sus más profundos
pensamientos. Cuando era joven, había hecho varios pedidos idiotas con el fin
de incrementar su fuerza y mejorar sus resultados. La vez fue demasiado lejos y
tuvo que rendirse por usar una fuerza mortal contra Kurono en aquel
enfrentamiento, sería un buen ejemplo. Aquella vez era muy similar a lo que
estaba sucediendo ahora. Stella no estaba mirando al futuro. Esta chica estaba
pensando que si ganaba, no habría problemas ni aunque muriera.
Los chicos tienen su propio sentido de los valores.
Sería el pensamiento ilógico que
uno esperaría de los inexpertos y ridículos. Sin embargo, obligar a los chicos
a que piensen como adultos racionales sería—
—Ilógico, ¿no...?
Así que Saikyou le hizo una
propuesta.
“Oye, Stella-chan. Pondré una
condición. Si la aceptas, entonces te entrenaré.”
“¡¿E-En serio?! ¡¿Cuál es su
condición?!”
“Es simple. Te daré un curso
breve. Sin embargo, no te enseñaré nada.”
“¿Eh...?”
“En otras palabras, Stella-chan,
durante esta semana no haré más que darte una paliza como si fueras un saco de
boxeo. Quizás tu cuerpo se quiebre, y quizás se quiebre tu corazón antes de
eso. Seguiré golpeándote sin piedad. Si estás de acuerdo con esa clase de
entrenamiento, ¿debería dártelo?”
“¿Entonces dice que mientras
tanto, tengo que descubrir todo por mi cuenta?”
“Así es. Por supuesto, no puedo
garantizar que aprendas algo, pero—¿qué quieres hacer?”
Eso fue lo mejor que se le
ocurrió a Saikyou. Mostrarle su fuerza absoluta. Hacer que Stella se dé cuenta
de su propia impotencia. Sin embargo, Stella tendrá que hallar la solución por
su cuenta. Si no lo había, a Saikyou no le importaba. Era una propuesta que una
profesora normal no ofrecería, pero—en su estado actual, para Stella era más
que atractivo. En cualquier caso, Stella quería una dirección. Con el fin de
hacerme más fuerte, necesitaba alguna clase de estímulo para avanzar. Y si
podía hallar el camino de esta manera, era imposible que se negara.
“¡Es suficiente! ¡Muchas
gracias!”
“Entonces ven conmigo... Durante
una semana, te mostraré el infierno.”
Y así, todos los participantes pasaron su última semana a su propia manera. Arriba y debajo de la superficie, adultos y niños, todos sus deseos y ambiciones giraban en un torbellino y se reunían, encarando el Festival de Arte de la Espada de las Siete Estrellas.
Y dos días antes de la apertura
del Festival, las eliminatorias del torneo fueron finalmente anunciadas. Al ver
la distribución de las eliminatorias, los labios de Ikki Kurogane se torcieron
en una sonrisa.
¿Estaba sonriendo por confianza?
¿O amargura?
Luego de que se descartara a
quienes decidieron no participar, la cantidad final de contendientes era de
treinta y dos. Entre esos treinta y dos nombres, el del oponente que Ikki
enfrentaría en la batalla de apertura era—un estudiante de tercer año de la
Academia Bukyoku.
El Rey Espada de las Siete Estrellas Yuudai Moroboshi.
El campeón del Festival de Arte de la Espada del año pasado. El hombre que en este momento sin dudas se encontraba en la cima de los caballeros estudiantes de Japón.
Traductor al
Inglés: KLSymph
(Baka-Tsuki)
Traductor al Español: nahucirujano
Corrección: Sin corrección.
Traductor al Español: nahucirujano
Corrección: Sin corrección.
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