Capítulo 3 – Akatsuki en Escena
Personajes —— Escritora • Kagami Kusakabe
NENE SAIKYOU
■ PERFIL
Afiliación: Liga RDC Clase A
Rank de Caballero: A
Arte Noble: Arte Prohibido ・ Hodou Tensei
Apodo: Princesa Yaksha
Resumen Personal: Profesora Especial en la Academia Hagun
Gráfica de Atributos (empezando por el extremo izquierdo, siguiendo el sentido de las agujas del reloj)
Habilidad Física: A
Suerte: A
Poder Ofensivo: A
Poder Defensivo: A
Cantidad de Maná: A
Control de Maná: E
¡Checkeo de Kagamin!
A continuación pasamos a una competidora activa de la liga RDC que se encuentra rankeada tercera en el mundo, la Princesa Yaksha Nene Saikyou-sensei. Una persona llamativa en persona y en privado, siempre está a la cacería de gente deliciosa.
Su Dispositivo es un par de abanicos de hierro. Su habilidad es un sistema de manipulación de gravedad. Su técnica única, Hodou Tensei, consiste en el poder de extraer escombros del espacio exterior, y al segundo siguiente golpear al enemigo con una velocidad cósmica. Es lo mejor de lo mejor en términos de poder ofensivo entre las técnicas avasallantes. Ya que se trata de un poder al nivel de las armas nucleares que pueden destruir países, ha recibido especial tratamiento al haber sido designada como un arte prohibido y no puede usarlo sin permiso de la Unión, pero ya que tenía un poder excesivo para atacar a las personas una por una como estudiante caballero, fue impactante cuando lo desató durante la batalla decisiva en el Festival de Arte de la Espada contra Shinguuji-sensei (anteriormente Takizawa). Terminó en abandono. Si Shinguuji-sensei no hubiera podido defenderse contra eso, ¿las islas japonesas tendrían un gran agujero en el medio ahora?
***
Era la víspera del último día del
campamento de entrenamiento combinado. Con el fin de recibir a los estudiantes
que estaban a punto de regresar, la instructora de la Academia Hagun, Yuuri
Oreki, estaba barriendo la entrada principal con una escoba de bamboo.
En ese momento, una estudiante
vestida con un suéter le habló.
“Buenas noches, Oreki-sensei.”
La voz que llegó por encima de su
hombro, aunque no la sobresaltó, le recordó a una chcia de tercer año. Era una
estudiante de una de las batallas de selección que Oreki había supervisado hace
un tiempo. Oreki buscó el nombre de la chica en su memoria, y devolvió el
saludo.
“Oh cielos, buenas noches,
Ayatsuji-san. *tos*”
“Gracias de nuevo por su ayuda en
aquel entonces.”
Ayatsuji le ofreció su gratitud
haciendo una reverencia, refiriéndose al asunto de la batalla de selección
contra Ikki Kurogane.
“No hice nada, ¿sabes? Fue todo
obra de Kurogane-kun, dando lo mejor de sí.”
“Pero Oreki-sensei, si usted no
hubiera mirado a otro lado mientras yo rompía las reglas, probablemente no
sería capaz de estar aquí ahora.”
“Eso también fue porque
Kurogane-kun me lo contó de antemano. *tos*
Ya que tenías el asunto de tu padre, pensé que definitivamente regresarías a tu
hogar durante el verano.”
“Intenté estar con mi Padre durante
s rhabilitación, pero me echó. ‘No dejes de entrear durante tu período de
crecimiento. Me encargaré por mi cuenta.’—dijo.”
“Ja ja, es el Último Samurái
después de todo... ¿cierto?”
“Bueno, ha estado durmiendo por
dos años. Después de despertar, ha estado muy enérgico. No perderé contra él,
así que recién vuelvo de correr.”
“Sí, es gran dedicación. Creo que
tu otro profesor también está trabajando duro en este momento, Ayatsuji-san.”
Diciendo eso, Oreki miró hacia el
cielo despejado, al norte. Ayase dijo “es verdad” en voz baja, y contempló el
mismo cielo.
“Kurogane-kun es impresionante,
¿huh? Derrotó incluso a la presidente del consejo estudiantil bajo esas
circunstancias.”
“¿Verdad que sí? Incluso yo me
sorprendí un poco~”
“Escuché rumores, ¿pero es verdad
que usted fue la que estuvo a cargo del examen de ingreso de Kurogane-kun?”
“*Tos*... sí, es verdad.”
“Entonces Sensei, tuvo buen ojo,
¿huh?”
Al mirar sólo los atributos de
Ikki Kurogane, él era un rango F. No alcanzaba la elegibilidad mínima para la
Academia Hagun. El hecho de que Ikki estaba en esta escuela debe haber sido
gracias al juicio de Oreki. Pensándolo de esa manera, Ayase elogió a Oreki.
Sin embargo, Oreki negó con una
expresión de alguna forma pesarosa.
“No, no, para nada. La realidad
es que yo también lo rechacé.”
“¿En verdad?”
Oreki asintió.
—Era extraño que a una persona le
faltara talento a ese grado. Cuando Oreki tuvo su primera impresión de Ikki, no
dudo en decidir que no iba a permitirle aprobar. Así, intentando apegarse a las
reglas, ella presumió de sus propios méritos como Blazer.
“¿Pero qué crees que ese chico
dijo sobre mi alarde?”
“¿Qué... dijo?”
“‘Puedo derrotarla.’—así nada
más.”
Un niño que ni siquiera era de
primer año, a una callaero mágica instructora rango C.
“¡Me sorprendí tanto que no podía
creer lo que escuchaba!”
“...U-Una confianza sorprendente,
¿cierto?”
“*Tos*... Y además de eso, iba a ganar hasta que fuera aceptado. Aun
si no era contra mí.”
“Ya veo. ¿Entonces pasó algo
así...?”
Escuchando los detalles de aquel
ingreso escolar, Ayase asintió con admiración. Quizás el propio Ikki lo
entendía. No podía triunfar con el examen usual. Por esa razón, provocado a
Oreki, y creó una oportunidad para demostrar su fuerza.
Ayase pensó en ello. Falta de
poder, atributos insuficientes, en compensación por sus factores negativos,
tenía que detectar cualquier medio de supervivencia sin importar lo inferior
que fuera.
A decir verdad, era muy típico de
Ikki—sin dudas ahora, y en el futuro, seguiría siendo así.
Pensando en él, Ayase le preguntó
a Oreki.
“Oreki-sensei, ¿cree que
Kurogane-kun puede convertirse en el Rey Espada de las Siete Estrellas?”
En respuesta, Oreki dijo—
“Ese chico está destinado a
convertirse en todo tipo de cosas, así que lo veo con una luz bastante
favorable. Creo que tiene la fuerza suficiente para llegar muy lejos...
Pero...”
“¿Pero?”
“Este año, no sólo están las
personas que tienen la fuerza para convertirse en el Rey Espada de las Siete
Estrellas. Puede que no sea capaz de llegar más allá de eso, ¿cierto?”
Le devolvió una respuesta de
alguna forma pesimista.
“¿Se refeire al caballero rango A
que es el hermano mayor de Kurogane-kun?”
Ante las palabras de Ayase, Oreki
lo aclaró y asintió.
“También está él, pero además de
eso... hay muchos niños este año a los que no conozco bien. Estudiantes de
primer año desconocidos cuyas habilidades son poco comprendidas y que
representran a casi cada una de las escuelas. ¿Qué clase de poder tienen esos
niños? El Festival de Arte de la Espada evolucionará de manera grandiosa, creo.”
“Uh, huh... como con Stella-san,
este año será muy productivo.”
Ante las palabras despreocupadas
de Ayase, Oreki se quedó en silencio un momento.
Productivo. Eso era ciertamente
verdad. La mayoría de los años, ingresaban sólo uno o dos nuevos representantes.
No era inusual que no haya gente nueva cada año. Pensándolo de esa manera, un
año en donde diez personas de todas las escuelas ingresaban sin dudas era una
gran cosecha.
Pero había algo pesado en el
estómago de Oreki.
Estaría bien si fuera sólo un
año. ¿Pero acabaría sólo con los desconocidos?
...Es como si algo hubiera estado trabajando de
manera encubierta todo el tiempo, ¿cierto?
Si la Directora Shinguuji y
Saikyou regresaban de Osaka, ¿debería pedirles sus opiniones? Conforme Oreki
pensaba en eso...
“¿Oh? Oreki-sensei, ¿parece que
mcuha gente está viniendo para aquí?”
Ayase le informó a Oreki de esto
mientras señalaba a la entrada principal. Cuando lo dijo, Oreki también miró
hacia esa dirección. Ciertamente, por fuera de la entrada principal, las
figuras de siete personas se estaban aproximando a la Academia Hagun en fila.
Era una escena inusual desde los
dormitorios de los estudiantes hasta la academia. Sin mencionar que estamos en
vacaciones de verano, era muy extraño que tantas personas vinieran en grupo
hacia aquí.
Pero de las suete personas, dos
estaban montando una bestia salvaje enorme que lucía como un león. Era extraño.
Preguntándose quiénes eran esas
personas, Oreki entrecerró los ojos.
“Eh, acaso no es ese...”
Sus ojos entrecerrados se
abrieron grandes por el asombro. Entre las siete personas, había un rostro que
ella conocía del pasado.
“¡¿El caballero rango A de la
Academia Bukyoku, Ouma Kurogane...?!”
¿Por qué alguien de Bukyoku venía
a Hagun? Esa pregunta rosó la mente de Oreki, pero rápidamente se desvaneció de
sus pensamientos, porque notó algo en su campo de visión que no dejaba lugar a
preocupaciones triviales en su mente.
Eran los otros además de Ouma.
Oreki había visto sus rostros en la información distribuida al staff del Festival
de Arte de la Espada de este año.
No sólo es Ouma-kun. ¡Bunkyoku, Donrou, Reitei, e
incluso los otros...!
Había varios representantes de
las siete escuelas que habían ingresado al Festival de Arte de la Espada de
este año.
Los estudiantes de primer año
desconocidos por los que Oreki se había estado preguntando estaban en fila
aquí. En un instante, Oreki sintió un impronunciable escalofrío en su nuca.
¿Por qué se habían reunido
representantes de todas las escuelas?
¿Por qué se había reunido y
marchado hacia Hagun?
¿Por qué estaba recordando una
promonición desagradable?
Y más que nada—¡¿por qué habían
manifestado sus Dispositivos?!
En ese momento, las preguntas se
arremolinaban en la mente de Oreki, y—
“¡Ayatsuji-san! ¡Vete ahora mismo!”
En ese momento—comenzó.
Una de las siete personas. A
pesar de que era verano, una chica llevaba demasiada ropa como para enfrentar
el clima frío. La representante de Donrou, Yui Tatara, de pronto acortó la
distancia entre ella y Ayase con la velocidad de un ventarrón.
Y atacó a la indefensa Ayase con
un Dispositivo con forma de motosierra que cargaba con ambas manos.
“¿Eh?”
Una malicia brutal que fue
simplemente demasiado inesperada. Ayase se quedó petrificada, incapaz de
responder. La rugiente hoja descendió, y—
“¡Haa!”
Antes de que la hoja atravesara
el cuello de Ayase, Oreki lo bloqueó con un Dispositivo con forma de alfanje.
Bloqueada suavemente, el cuerpo de Tatara se sacudió. Oreki no desaprovechó esa
oportunidad.
Primero, tengo que tomar control de esto...
Por qué había desatado de pronto
ese asalto era algo que Oreki podría preguntarle una vez que despierte.
Decidiendo eso, Oreki giró su muñeca, y con el más ligero movimiento viró su
espada. Apuntó con forma ilusoria a la arteria carótida de Tatara. Una vez que reciba
el corte, su conciencia se desvanecería. Cortarla con el más pequeño movimiento
le permitiría evadir cualquier hendidura de su defensa. Y como Oreki planeó, su
alfanje se dirigió hacia la arteria carótida de Tatara—
“Reflejo Total.” (1)
—En ese instante, la boca de Tatara trazó un arco torcido, y un misterioso impacto chocó contra la tajada de Oreki.
♦♦♦♦♦
Era anocheciendo, y el cielo
estaba teñido de rojo.
Ikki y el equipo de los
representantes de Hagun para el Festival de Arte de la Espada que él estaba
liderando, así como Shizuku y todo el consejo estudiantil quienes fueron para
asistirlos, se encontraban en un autobus descendiendo lentamente por las
montañas. Finalmente estaban regresando a la Academia Hagun. En el autobús, los
cercanos compañeros estaban sentados juntos y comiendo dulces, charlando
pacíficamente.
Pero en medio de eso, sólo Stella
tenía los hombros decaídos con un rostro decepcionado.
“...Haa~”
“Anímate, Stella.”
Aunque Ikki quien se encontraba
sentado junto a ella estaba preocupado, ella no recupero su animosidad.
“Pero es frustrante...”
De pronto, dos estudiantes le
hablaron. Dos chicas con el mismo rostro, sus camaradas representantes del
Festival de Arte de la Espada, Kikyou y Botan Hagure.
“¿Qué sucede, Stella-chan?”
“¿Se siente mareada, Su Alteza?”
Ikki les hizo un gesto como
diciéndoles que no se preocupen.
“Parece que está molesta por su
récord contra Toudou-san.”
Explicó la razón de la depresión
de Stella.
“Ahora que lo mencionas, lucharon
algunas cuántas veces, ¿huh? Por cierto, ¿cuál fue el resultado?”
“...Tres victorias, tres
derrotas.”
Ante la pregunta, la propia
Stella respondió en voz baja.
Sí. El objetivo de Stella en este
campamento era lograr más victorias que derrotas contra Raikiri. Pero de una
manera u otra, había terminado en un empate, y ese objetivo no fue logrado.
Stella se había decepcionado de sí misma.
“Pero creo que eso ya es bastante
asombroso tratándose de la presidente de los estudiantes como tu oponente.”
“No, Stella-chan es una caballero
rango A. Ella querría ganarle a un oponente de menor rango, ¿cierto?”
“...Aunque no pienso que
Touka-san sea de rango menor al mío.”
Stella pronunció esas palabras en
respuesta al argumento de Kikyou. No pensaba que Touka fuera de menor rango. De
hecho, era lo contrario. Stella pensaba que ella era inferior a Touka en el
presente. Por esa razón—estuvo tratando de ganar en este campamento, con el fin
de lograr confianza en el inminente Festival de Arte de la Espada. Pero—el
resultado no fue como Stella quería.
“¡Oooooh! ¡Qué frustrante! ¡Es
tan frustrante que no me puedo calmar! ¡Si es así, debería correr de regreso en
lugar de tomar el autobús!”
“Eso no tiene sentido...”
Ikki soltó una sonrisa irónica.
Bueno, así era Stella.
“...En un momento así, sería
mejor que me distraiga con comida.”
Diciendo eso, Stella sacó tres
barras de Snic●ers (2) de su bolso
de viaje, y acurrucándose, comenzó a comerlos con impaciencia.
Viendo a Stella así, las hermanas
Hagure gritaron.
“¡Te comiste tres tazones de udon
y ramen durante el almuerzo en la estación de servicio, ¿y ahora estás comiendo
otra vez?!”
“Vas a engordar, sabes—”
En respuesta, como si no fuera un
problema, Stella les dio—
“Está bien. No subo de peso sin
importar cuánto coma.”
—esa breve explicación.
Ciertamente, era misterioso, pero
aunque Stella era una glotona absurda, su cuerpo estaba bellamente tonificado y
no engordaba. Incluso para Ikki quien consideraba que su propio cuerpo era
especial, esto era un misterio. Sólo podía considerarlo injusto.
Bueno, incluso Ikki se sentía un
poco irritado por ello—
“¡¿Huh?!”
Eso pareció ser devastador para
las dos estudiantes superiores que habían lo descubierto pro primera vez
durante el campamento. Las expresiones de ambas se congelaron, y...
“...Botan-chan. Los tazones udon eran... kitsue, curry, y kakiage (3). El ramen era de shouyu, miso, y
tonkotsu (4). ¿Es posible no
engordar después de comer todo eso en el almuerzo y encima agregarle Snic●kers?”
“No existe tal magia negra. Debe
tener barriga debajo de su ropa.”
“E-Es imposible que tenga algo
así. Qué ruda. Parece que mi constitución acumula todo el peso en mi pecho, por
lo que nunca tuve mucha grasa corporal desde que nací.”
Stella respondió mientras comía
la barra super gruesa y dulce ruidosamente, y cuando lo hizo—Ikki, quien estaba
sentado junto a ella, definitivamente escuchó un sonido como si algo se hubiera
quebrado por la mitad.
“¡¡¡No nos mientas!!!”
Y las hermanas Hagure quienes habían emitido ese sonido mostraron rostros de enfado que parecían máscaras demoníacas, abalanzándose sobre Stella.
“¡¿Whoa?!”
Sacando a Stella de su asiento
tomándola por los hombros, las dos la sostuvieron con firmeza.
“¡¿Qu-Qué están haciendo?!”
“¡Nada de eso! ¡Sabemos que
escondes gordura ahí abajo! ¡Confiesa!”
“¡Ya dije que toda la grasa se va
a mi pecho, ¿no?!”
“¡¿Cómo puede ser verdad algo tan
indignaaaaanteee?!”
“¡Definitivamente haremos que lo
pruebes!”
Girando los hombros de Stella,
las dos comenzaron a toquetearle el cuerpo. Ante esto, Stella se sonrojó y
gritó.
“¡Oigan! ¡Deténganse! ¡¿Dónde
creen que están tocando?! ¡Ikki no te quedes ahí, ayúdame!”
“¡Ah, sí, cierto! ¡Cálmense,
ustedes dos!”
Al momento que Ikki trató de
intervenir—¡Destello! Dos pares de ojos rojos salvajes se dirigieron hacia él—
“Esta es una cruzada chicas, a la
cual no nos rendiremos.”
“Los chicos deberían quedarse
sentados comiendo Pocky (5).”
“O-Okey. Por favor, discúlpenme.”
“¡¿Ikki—?!”
Perdón, son muy aterradoras.
Derrotado por la avasallante
intensidad de las dos hermanas, Ikki apartó sus ojos de la escena que podría
llevar a un problema internacional.
Y en el asiento vacío del cual
Stella había sido sacada, una chica bajita de cabello plateado se sentó. Era la
hermana menor de Ikki, Shizuku Kurogane.
Shizuku dirigió sus ojos verdes
hacia las tres personas en el escenario del forcejeo, y habló en broma.
“Es una escena que habría hecho
feliz a Kusakabe-san presionando el obturador si estuviera aquí, ¿no?”
“Ah, ja ja... Es cierto. Estoy
seguro de que se lamentará cuando lo descubra luego.”
Ikki estuvo de acuerdo con su
visión. Mejor dicho, Kagami también se uniría.
“¿Kagami-san se fue a Hokkaido
por su cuenta?”
La pregunta de Ikki fue para
Arisuin, quien estaba sentado del otro lado del autobús junto a la ventana.
Ante su consulta, Arisuin respondió asintiendo.
“Sí. Fue a cubrir el campamento
de entrenamiento de Rokuzon que comenzó hace tres días, y se fue temprano esta
mañana.”
Era una mentira, por supuesto. A
decir verdad, ella estaba atada y prisionera en un lugar oculto en las
instalaciones del campamento de Kyomon.
Pero en ese momento, Ikki no
tenía manera de ver a través de esa mentira.
“Debería haber venido con nosotros.”
Creyó esa mentira sin dudas. Y no
sólo Ikki. Shizuku también creyó la mentira de Arisuin, y eso le permitió
soltar un pequeño suspiro de alivio.
“Qué persona trabajadora,
Kusakabe-san. Yo también estoy un poco cansada.”
“Has hecho un montón, Shizuku.
Gracias a que estuviste aquí, nos salvaste de muchas maneras.”
Aunque las cápsulas iPS eran
convenientes, era necesario inyectar anestesia, y la carga sobre el cuerpo era
grande. Con una excelente sanadora como Shizuku en reserva, la diferencia en
eficiencia era inmensa. Por esa razón, Ikki la había traído a las montañas
aunque no fuera representante, y apreció su trabajo al atender lesiones
menores. Shizuku respondió con palabras y una sonrisa que alcanzaba la plenitud
como una flor, la cual nunca mostraba a nadie más.
“Es todo por ti, Onii-sama.”
Y sacó una caja de Pocky.
“¿Quieres un poco?”
“Tomaré uno.”
A Ikki no le gustaban mucho las
cosas ducles, pero era distinto si era su hermana la que se lo ofrecía.
Extendió su mano hacia el Pocky que le estaba ofreciendo, y se movió para sacar
un palito de la caja.
Pero—en el momento antes de que
el dedo de Ikki tocara el Pocky, la característica caja roja se movió.
¿Eh?
Ikki quedó perplejo. Del otro
lado, Shizuku sacó un Pocky con un rostro inocente, y lo puso entre sus rosados
labios, miró a Ikki con el Pocky en su boca como pidiendo un beso.
“Nnn~”
“¡¿Qu-Qué me estás pidiendo que
haga?!”
Ikki titubeó ante el repentino
ataque.
Pero no había manera de que su
amante recibiera esta escena en silencio.
“¡O-Oye, tú! ¡Shizuku, ¿qué estás
tratando que Ikki haga?!”
“¡Whoa!”
“¡Eek!”
Como si el forcejo de recién
hubiera sido una ilusión, Stella se quitó de encima fácilmente a las hermanas
Hagure y se acercó.
“Sólo es acoso sexual. ¿Qué
pasa?”
“¡No lo hagas tan descaradamente!
¡Tan en serio! ¡¿No crees que es impropio?!”
“Una persona ene se estado no
debería hablar de modestia.”
“¿Eh?”
Con un dedo señalándola, Stella
dirigió su atención a su propia situación. Y se quedó sin palabras. Como las
hermanas Hagure la habían sujetado, su brasier estaba completamente expuesto, y
su falda se había caído casi por completo.
“¡E-Eeeeekkk!”
Perdió todos sus otros
pensamientos. Conforme su consideración de la realidad comprendió su situación,
Stella se agachó con su rostro en llamas.
Ante esa figura, Utakata quien
estaba mirando desde un costado murmuró.
“...Está actuando como alguien
sin experiencia que acaba de ser violada.”
“Uta-kuuuun. Cuando lleguemos a
la escuela, espero que te prepares para tu castigo—”
“¡Hiiii! ¡Armé un revuelo! ¡Kanata,
sálvame!”
“Tú solo te metiste en ese
matorral, así que no voy a ayudarte.”
Pero Stella también era una
señorita. No se escapó de algo como esto. Prontamente se acomodó su atuendo, y
presionó a Shizuku una vez más.
“Oye, Shizuku, lo que hay entre Ikki
y yo, ¿no lo aceptaste ya?”
“¿Te refieres a que son pareja?”
“¡Sí!”
“Por supuesto que lo acepté.”
“¡E-En ese caso, por favor deja
de hacer cosas así!”
Levantando la voz, Stella expresó
su insastifacción. En respuesta, Shizuku—sólo rió.
“Dios. En verdad me gustaría que
pensaras en esto con más cuidado.”
“¡¿D-De qué estás hablando?!”
“He aceptado que eres tú a la que
ama Onii-sama, ¿sabes? Sí. Pero eso es todo lo que te concederé, Stella-san.
Adoraré a Onii-sama como una hermana, lo cuidaré como una madre, lo seguiré
como una amiga, y lo amaré como una amante.”
“Umm, Shizuku, algo fuera de lo
común se mezcló cerca del final...”
Ikki protestó, pero Shizuku lo
ignoro magníficamente. Mostrando cuatro dedos en frente de Stella, declaró.
“¡En otras palabras, amo a
Onii-sama cuatro veces lo que tu lo amas! ¿Entiendes esta incontrovertible
verdad?”
“¡¿Cómo podría entender eso—?!”
Era natural que Stella no
responda. Qué argumento tan irracional.
“¡Deja de buscarle el pelo al
huevo con esas declaraciones frívolas y aléjate de Ikki! ¡Ese es mi asiento!”
“¡Me niego!”
Stella finalmente levantó a
Shizuku con fuerza pura, pero Shizuku contrarrestó a Stella aferrándose
alrededor de Ikki. En esa situación, Ikki que ya no podía ver más esto le habló
a Stella.
“B-Bueno, Stella. No armemos
tanto alboroto en el vehículo. Es peligroso.”
“Pero...”
“¿No está bien si lo dejamos así?
En todo caso, llegaremos a la academia pronto, así que...”
Diciendo eso, Ikki dirigió sus
ojos hacia la escena por fuera de la ventana del autobús. EL autobús ya había
alcanzado el final de la carretera de la montaña, y los familiares árboles y el
asfalto del área metropolitana eran visibles. Era el circuito por el que Ikki y
Stella corrían todos los días. En ese punto, pronto estarían en la Academia Hagun.
“Muu... supongo que no hay
opción. ¡Haré que lo compenses cuando lleguemos!”
De cualquier modo, si llegaban a
la Acadeia Hagun en los próximos minutos, no había necesidad de volver a pelear
de inmediato, así que Stella se rindió—y en ese momento.
El autobús chilló de una frenada
brusca.
“¡Eeeeek!”
“¡Whoooa!”
El movimiento del autobús de
pronto desapareció, y tofos adentro fueron lanzados hacia delante. ¿Qué había
sucedido?
“¡¿Qu-Qué sucede, Saijou-kun?!”
La primera en actuar fue la
presidente del consejo estudiantil, Touka Touduo. Se levantó de inmediato, y se
apresuró hacia Saijou quien estaba conduciendo.
Saijou estaba—mirando por el
parabrisas con un rostro inexpresivo e inusualmente pálido para él.
“¡¿Acaso—chocamos a alguien?!”
“No... no es eso, pero...”
Saijou lentamente levantó un dedo
temblando y señaló al exterior del parabrisas. Ikki y los demás quienes se
apresuraron y miraron en la dirección que estaba señalando, y—
“¿Huh...? ¿Eso no es en la
Academia?”
En dirección al extremo del dedo
que temblaba, en el cielo anocheciendo que era como el color de la sangre—había
una columna de humo negro elevándose. Era exactamente en la dirección de los
edificios del campus de la Academia Hagun.
Al ver ese panorama, todos se
quedaron sin palabras, y sus ojos se abrieron del asombro.
Excepto por una persona—excepto
por Arisuin, quien no se había levantado de su asiento.
♦♦♦♦♦
El autobús que Ikki y los demás
habían tomado ingresó a la Academia Hagun por la entrada principal, y sus
neumáticos derraparon hasta detenerse. Al mismo tiempo, a través del la puerta
y las ventanas, Ikki y los demás salieron.
“Esto es... terrible...”
Flamas se estaban elevando de
todos los edificios escolares, y humo negro llenaba el aire. El asfalto que
pavimenta la carretera estaba lleno de grietas, como si hubiera sido destruido
con bombas. Y en todas partes en el destruido campus, los profesores y
estudiantes que estaban allí habían caído. Esto no era fuego ordinario. Eran
los restos de una batalla.
“¡Ikki, por allí!”
Stella gritó y señaló. Cuando él
dirigió su mirada, vio—
“¡¿Oreki-sensei y...
Ayatsuji-san?!”
—a dos señoritas que conocía.
¿Perdieron el conocimiento? Yacían sobre el suelo sin moverse. Ikki y los demás
rápidamente corrieron hacia ellas, y las levantaron.
“¡Ayatsuji-san! ¡Por favor
despierta!”
Pero no hubo respuesta.
“Esto es malo. Stella, ¿qué hay
de ti?”
“Ella tampoco reacciona... Pero
no parece que esté herida. Sólo desmayada.”
Ciertamente. Ambos cuerpos no
tenían ninguna lesión. Pero en sus ropas había rasgaduras de cortes con espada.
Esto debe ser—
“¿Forma ilusoria...?”
“¡Daaammmaaasss! ¡Yyyyyyyyy! ¡Caabbaalleeerroooss!”
Abruptamente, una voz muy animada resonó. La voz provenía de arriba. Ikki y los demás levantaron la mirada al unísono, y lo vieron allí. De pie sobre la azotea de un edificio escolar en llamas, era un hombre alto y delgado vestido con un atuendo de payaso.
“¡Miembros del equipo de lucha de
la Academia Hagun, han tenido un largo viaje! ¡Perdón por hacerlos esperar!”
“¿Un payaso?”
Ante la extravagantemente extraña
ropa del enemigo, todos mostraron expresiones perplejas. Pero entre ellos, Ikki
y Touka—
“No, él es—”
Ellos recordaban la apariencia
del chico. Lo vieron en el catálogo de los participantes del Festival de Arte
de la Espada de este año.
“Tú. Eres Reisen Hiraga de la
Academia Bunkyoku, ¿no?”
Touka preguntó con una expresión
sombría. En respuesta, el payaso felizmente abrió suslabios espléndidamente
delineados de rojo.
“¿Oh, me reconociste? Es un
privilegio ser recordado por la propia Raikiri, ¿no? Ja ja ja. ¿Qué te parece
este escenario? ¿Te sorprendiste?”
“¿Esto es obra tuya?”
Ante su pregunta, el payaso negó
grandiosamente.
“No, no. ¡No, no, no! No fui yo
quien hizo esto.”
En un instante—el payaso Reisen
Hiraga bajó de la azotea del edificio que estaba a más de diez metros de un
salto. Pero no fue sólo Hiraga el que saltó. Siguiéndolo uno a uno, un tren de
figuras también bajaron—
Toda la pandilla aterrisó en
frente de Ikki y los demás.
Un hombre vestido en ropas
japonesas tradicionales que portaba una nodachi (6).
Una mujer llamativa vestida con
lo que parece ser un delantal topless.
Una chica con un parche en el ojo
en un uniforme de maid, montando un león con pelaje negro.
Además otros tres, en total eran
siete personas incluyendo a Hiraga, todos con apariencias extrañas. Su rareza
encajaba con auras llenas de mal augurio, y se encontraban en fila en frente de
Ikki.
Hiraga se señaló a sí mismo, y
respondió la pregunta de Touka.
“No fui yo. Fuimos nosotros, la Academia Akatsuki.”
Este era el anuncio oficial de la Academia Akatsuki, el poder que constituía la octava escuela moviéndose entre las sombras. Era su comienzo. En contra de las siete escuelas que recibieron su nombre de la Osa Mayor—ellos estaban proclamando el amanecer (7).
Ikki y los demás permanecían
mirando al enemigo, desconcertados. Su asombro era comprensible. Todos estos
eran representantes de otras escuelas, excepto por Hagun, en el Festival de
Arte de la Espada. Además, el familiar de Ikki y Shizuku, su hermano mayor Ouma
Kurogane se encontraba allí entre ellos.
No, no sólo su hermano.
“¡Ah, eres tú! ¡El de Kyomon que
estaba en el campamento...!”
“Ajaja, nos encontramos otra vez,
Stella-san. E Ikki-kun también. Estoy feliz de ver sus rostros tan pronto otra
vez.”
Entre los siete que se llamaban a
sí mismo la Academia Akatsuki, también estaba Amane a quien Ikki y Stella
habían conocido hace unos días.
“Ikki, el mal presentimiento que
tuviste... era sobre esto, ¿huh?”
Anteriormente, Ikki había
comentado su repulsión sobre Amane abrazándolo, y Stella tosió como habiéndolo
entendido ahora.
Pero—a su lado, Ikki pensó.
¿En verdad es... sólo eso?
El mal presentimiento que había
tenido en ese momento era una pista acerca de este evento. Habría sido bueno si
el asunto hubiera terminado allí. Pero Ikki no había investigado profundamente
la sospecha que nació dentro de él. Si no pensaba ene sto ahora, si no miraba
con más atención—
“Kyomon y Rokuzon, Bunkyoku y
Bukyoku—aparte de Hagun, ¿por qué los representantes de todas las escuelas
están aquí? Me gustaría que me lo cuentes, hermano.”
Entre los enemigos, le preguntó a
aquel con el que tenía lazos más cercanos.
“¿Qué está sucediendo aquí? Nunca
escuché de Akatsuki, pero—”
Sin embargo—
“Silencio.”
Lo que recibió no fue una
respuesta, sino crueles palabras como espantando una mosca.
“Ya he cortado lazos con los
Kurogane. No me hables tan casualmente.”
Ouma ni siquiera echó un vistazo
a su hermano y hermana de sangre. Sus ojos están fijos en una sola
persona—miraban sólo a Stella, quien se encontraba junto a Ikki.
Recibiendo esa mirada, Stella
ciertamente lo sintió.
Este hombre—parece poco entusiasta, ¿huh?
Con sólo recibir esa mirada,
estaba experimentando una sensación de hormigueo y entumecimiento.
Las siete personas alineadas en
frente de sus ojos. Todos y cada uno de ellos era un demonio rebosando
ambición. Pero por encima de todos, el Emperador Espada de Viento, Ouma
Kurogane, se destacaba entre ellos. En términos de intimidación, la sensación
irradiada por su cuerpo se encontraba en un nivel de magnitud alto.
No hay dudas... Este es por mucho más fuerte que
los demás.
Stella estaba segura de eso, y
además—le devolvió la mirada con fuertes emociones. Y no sólo Stella, sino
todos. Poco a poco, pero notoriamente, la tensión entre ambos lados se
incrementó. En medio de eso, como sustituto de Ouma quien no parecía que fuera
a responder, Hiraga contestó.
“¿Por qué hicimos esto? ¿Qué es
la Academia Akatsuki? La pregunta del hermano menor es natural—así que
expliquémoslo. Todo es muy simple. Sin importar cuántos consigan el derecho de
aparecer en el Festival de Arte de la Espada, una nueva academia organizada luchando
sin autorización de la Unión de Caballeros definitivamente no sería aceptado
por el comité directivo. Pero pretendemos ser reconocidos. Así que incluso en
un festival sin sentido para decidir al más fuerte de Japón, nosotros nos
mostraremos claramente en frente de todos.”
“Ya veo. En otras palabras, al
demostrar la destrucción de Hagun, ¿pretenden tomar su lugar como la séptima
escuela en el Festival de Arte de la Espada?”
“Como se esperaba de Raikiri, tú
sí entiendes rápido. Es exactamente así.”
“...Cuánta anarquía, ¿crees que
esto será permitido?”
“El comité directivo no es
estúpido. Probablemente suspendan el festival.”
Si un miraba a lo que había
sucedido antes, el sistema judicial de este país no se quedaría en silencio.
Touka y Saijou señalaron eso, y Hiraga estalló a reír sin temor.
“—Ja ja. Eso no es verdad en
absoluto. Todos nosotros definitivamente aparecemos en el Festival de Arte de
la Espada. Más que eso, el comité directivo y su organización matriz, la Unión
de Caballeros, no tienen más opción que reconocernos. ¿No es así? Luego de
haber destruido una academia histórica como Hagun, si nuestro desafió es
denegado, sería lo mismo que escapar como perro azotado. La Unión de Caballeros
no tolerará ninguna institución educativa para Blazers en países bajo sus
auspicios excepto por aquellas afilidas con ella. Porque ese es el nivel de fe
del que la Unión de Caballeros depende. Con el fin de recuperar la fe que
perdieron, deben probar que los Blazers que ellos criaron son superiores a los
nuestros. Es para proteger su monopolio sobre el sistema de entrenamiento de
todos los Blazers en Japón que ellos han creado en la última mitad del siglo
durante el período de posguerra.”
Ciertamente. El Festival de Arte
de la Espada no era sólo un festival escolar común. Por mucho que la Unión de
Caballeros alardeara de su excelente educación, Blazer superiores siempre
aparecían. Era un escenario para que los ciudadanos japoneses vean a los
novatos. En este escenario donde se mostraban los resultados, la Unión de Caballeros
estaba tratando de ganar la aprobación de los ciudadanos—era una situación
excesivamente especial, donde el entrenamiento de los Blazers quienes eran la
defensa de la nación, así como de otras organizaciones además de Japón, se
mostraban.
En ese caso, ¿qué pasaría si los
caballeros que la Unión de Caballeros había educado eran derrotados
abrumadoramente, y aquellos de una organización distinta salían victoriosos?
Naturalmente, la fe en el estilo de la Unión se vería estafada en sus
cimientos.
Y esa era la meta de la poderosa
organización que creó a la Academia Akatsuki y que empleaba a Rebelión, el gran
enemigo de la Unión de Caballeros.
“Así que me disculpo enormemente,
pero haremos que todos aquí caigan. Y sean nuestro peldaño.”
—En ese momento, una sed de
sangre extremadamente fuerte se elevó entre los miembros de Akatsuki. El
sofocante instinto asesino estuvo acompañado de manifestaciones de
Dispositivos, y Akatsuki se preparó para la batalla al unísono.
Enfrentando eso, Ikki y los demás
estudiantes de la Academia Hagun—
“Haciendo lo que se les place
hasta ahora como tontos, ¿acaso pensaron que diríamos ‘okey, está bien’?”
Antes de que se dieran cuenta, la
malicia había aparecido. Fue demasiado repentino. Sería una mentira decir que
no estaban irritados.
Pero—todos ellos manifestaron sus
Dispositivos, y demostraron sus sentimientos contra los enemigos que se habían
desplegado frente a ellos.
“¡Si quieren pelea, entonces
vengan a buscar una!”
“Oh, lo haremos sin reservas. Ja
ja.”
En ese lugar, la tensión había
alcanzado su punto máximo, y ambos lados arremetieron simultáneamente.
♦♦♦♦♦
“Nangou-sensei. Muchas gracias
por tomarse la molestia de viajar.”
En los campos de entrenamiento de
la Academia Kyomon, en las instalaciones abandonadas después de que los
estudiantes de ambas academias regresaran, el instructor de la espada quien
había sido convocado de pronto, Torajirou Nangou fue enviado en automóvil, y el
administradora de la institución le estaba dando las gracias al hombre mayor.
“No pensé que ninguno de los
entrenadores de manejo de la espada terminarían siendo valiosos.”
“Jojojo. Está bien, está bien.
Esperaba tener un combate con ese chico al menos una vez. Era una buena
oportunidad... Y a find e cuentras, ese chico era considerable, ¿no?”
“¿En verdad?”
Ante la respuesta de Nangou, el
administrador inclino la cabeza, confundido.
“Yo también vi el desafío entre
ustedes dos de cerca, pero sólo hubo un intercambio de miradas a distancia, y
no cruzaron espadas ni siqueira una vez, pensé que Ikki-kun simplmente se había
mantenido a raya...”
“Jo jo. Bueno, no puede evitarse
que un profano lo vea de esa manera.”
Ciertamente, en el campamento,
Nangou había tenido un total de tres encuentros con Ikki, pero ninguno de ellos
se movió desde el principio hasta el fin de los enfrentamientos, y sólo pasaron
el tiempo hasta el fin del entrenamiento. Por lo que era inevitable que el
administrador quien los había visto llegara a esa conclusión.
Peor Nangou estaba diciendo que
la verdad era distinta.
Tres enfrentamientos. Sesenta
minutos. Desde el comienzo, El Peor había igualado cada intento del más mínimo
comportamiento, ya fuera una mirada o espíritu de espada.
Tratándose de un espadachín de la
clase de Nangou, el alcance de su espada era lo mismo que un campo de muerte
segura. Si incluso se daba un solo paso descuidadamente, ene se instante, la
espada de Nangou hubiera dejado inconsciente al enemigo. Por lo tanto Ikki
descartó cualquiera acercamiento insensato, sin hacer ningún movimiento para
ingresar al rango del oponente, y permaneció en la línea de partida, abordando
todo tipo de maneras para poner a prueba ese alcance, desafiando la barrera de
la espada de Nangou.
Pero su oponente era Torajirou,
el Dios de la Guerra. Él que peleó en la más alta liga, y la única persona
japonesa que conquistó la famosa Liga Dios de Guerra de China. Ikki no pudo
pisar dentro de su rango, y eventualmente se quedó atrás sin haberse movido de
la línea de partida. Pero—
Pero aun así, Nangou tenía una
excelente opinión sobre Ikki. La razón era—
No podía creerlo, pero yo tampoco pude quitar mis
ojos de encima de él.
Ciertamente. Ikki no pudo moverse
de la línea de partida. Pero Nangou se encontraba en la misma posición. El
Peor, en el total de esos sesenta minutos que lucharon, no le había dado al
Dios de la Guerra ni una sola vulnerabilidad. Sin importar cuántas veces Nangou
trataba de intimidarlo o de amagar con su espíritu de la espada, el corazón de
Ikki no se perturbó ni un poco, y en cambio Nangou quien estaba tratando de atacar
no pudo provocarlo para que deje una apertura.
A los ojos de los demás, parecía
un enfrentamiento sin movimientos. Pero para Nangou, pasar esos oscuros y
densos sesenta inutos fue como esperar varias vidas enteras.
Si ambos hubiéramos usado habilidades, habría
terminado en una conclusión distinta, pero...
El rostro arrugado de Nangou se
movió con aparente felicidad.
“En manejo de la espada, él es
mejor que Ryouma, ¿huh? Qué chico de mal agüero.”
“Qué gran joven. Para que
Nangou-sensei lo juzgue tan bien.”
“Jo jo. Aunque no creo que
perdería contra él, por supuesto—¿hmm?”
Nangou de repente detuvo su
caminata.
“¿Senseo? ¿Sucede algo?”
El administrador caminando junto
a él también se detuvo, y le preguntó. Nangou estaba mirando hacia delante a la
pequeña choza que yacía junto al camino.
“Allí, ¿qué es eso?”
“Un almacén. Creo que es donde se
guarda la cal viva para reparar los campos de deportes.”
“¿Eso es todo?”
“Sí, muy probablemente.”
Ante la respuesta del
administrador, Nangou se rascó la barba e inclinó la cabeza con confusión.
“...Si ese es el caso, es
extraño.”
“¿Por qué?”
“Por que allí hay una persona.”
Las palabras de Nangou cargaban la pura verdad. Ante eso, el administrador exclamó con desconcierto.
“Eh... ¡¿Eh?! ¿C-Cómo puede
ser...?”
Sin embargo, Nangou no esperó a
su reacción. Llevando su bastón para caminar, avanzó hacia el almacén, y—con un
pequeño esfuerzo y una velocidad más rápida que la vista, blandió su
Dispositivo bastón espada, y cortó el candado que mantenía cerrada la puerta
del almacén.
Esa puerta se abrió, y—
“Como pensé.”
“¡Mmm! ¡Nnn!”
Descubrió a una jovencita dentro,
atada de pies y manos. El administrador que había llegado luego también abrió
los ojos grandes con asombro.
Y el administrador conocía a esta
chica.
“¡T-Tú eres del club de
periodismo de la Academia Hagun...!”
Sí, la jovencita atada era Kagami
Kusakabe.
“¡NNN—!”
“No te preocupes, te liberaré.”
Diciendo eso, Nangou hábilmente
cortó las ataduras de Kagami. Kagami, con sus extremidades libres, se quitó la
mordaza de la boca, y respiró profundo.
“¡Bwah...haa! ¡Haa! ¡E-En verdad
me salvaron...!”
“¿Qu-Qué sucedió aquí?”
Una chica estaba atada y
encerrada aquí. Ante esta inusual situación, el administrador mostró un rostro
de inquietud, y pidió una explicación. En respuesta, Kagami negó con la cabeza.
“Haa... Se los diré luego. ¡Por
favor permítanme hacer una llamada ahora mismo!”
La verdad que había descubierto.
Y la verdad que la había atacado. Tenía que comunicar eso a sus amigos—a Ikki y
los demás. Con ese sentido del deber estimulándola, Kagami sacó su datapad de
su bolsillo. Pero—
¡No hay conexión...!
Sin importar cuántas llamadas
hiciera, ni Ikki ni Stella ni Shizuku, nadie respondía. Era un mal
presentimiento.
Lo que le vino a la mente fueron
sus amigos, caídos a los pies de Arisuin. Kagami quien había socializado con
Arisuin, conocía el terror de su habilidad. Si Arisuin era alguien que se
encontraba del lado enemigo como ella temía, la escena en su cabeza no era para
nada surrealista.
“¡Kuh!”
Rápido, si no era un segundo más
rápida, si no les contaba acerca de Arisuin. El interior de Kagami estaba
palpitando con impaciencia, y—tomó una medida de emergencia. Ella, con un
protocolo particular, operó la pantalla de su datapad. Pasándolo al modo de
emergencias para la transmisión forzada de llamadas a sus compañeros de la
academia al máximo volumen del altavoz, Kagami se conetctó con el terminal de
Ikki, y vociferó—
“¡SENPAI! ¡ALICE-CHAN ES OTRO DE LOS ESPÍAS DE LA ESCUELA! ¡¡¡POR FAVOR, TEN CUIDADO!!!
♦♦♦♦♦
A un enorme volumen, el grito de
Kagami hizo eco a través de la Academia Hagun, alcanzado a todos los oídos
posibles.
Pero—lamentablemente, fue
demasiado tarde.
El grito de Kagami ciertamente
llegó al instante en que Hagun y Akatsuki salieron a correr. En ese momento,
Arisuin había comenzado a moverse. Situándose al final de la línea de Hagun,
mirando las espaldas de sus amigos que estaban enfrentando a Akatsuki—
Manifestando varias veces su
Dispositivo, Ermitaño Oscuro, los
acomodó en forma de un abanico en su palma.
Arisuin estaba esperando ese
momento. Estaba aquí para encargarse de este momento.
La habilidad de Arisuin era del
tipo interferencia conceptual, manipulando las sombras. Su Arte Noble, Atadura Sombría, era una habilidad
extremadamente fuerte que le permitía sellar por completo los movimientos de su
objetivo al apuñalar la sombra del objetivo con su Ermitaño Oscuro.
Una vez que la sombra era
apuñalada, sin importar cuán fuertes eran los músculos de uno, no se podía
romper esa atadura. Incluso alguien tan fuerte como Stella no sería capaz de
lograrlo.
La habilidad de Arisuin, bajo las
circunstancias de un ataque sorpresa, era más fuerte que cualquier clase de
habilidad. Ya que ese era el caso—él sólo necesitaba preparar las
circunstancias para ese ataque sorpresa. Si ingresaba a la academia, se
acercaba a gente importante con un aire de inocencia, lograba ganarse su
confianza, y tan solo con un único golpe creaba una apertura que pudiera
explotar, entonces ellos no tenían oportunidad de ganar.
Esto era lo que la Academia
Akatsuki había preparado, el plan para lidiar con los oponentes de la Academia
Hagun en la víspera del festival y que ellos habían llevado a cabo sin un solo
error.
Y en este momento, Arisuin había
llevado a cabo completamente. Ante las indefensas espaldas de los del
campamento de Hagun, Arisuin lo vio correr hacia su enemigo.
Ninguno de ellos sospechaba de
Arisuin. Ese fue une rror letal. Aunque Kagami había gritado, ya era demasiado
tarde para evadirlo o defenderse—
“Atadura Sombría—”
Sin piedad, sin compasión, Arisuin lanzó incontables dagas del Ermitaño Oscuro, y atravesando el aire, se clavaron sobre las sombras a las que él había apuntado.
—Y cada una de las sombras de los
miembros de Akatsuki fueron atrapadas.
♦♦♦♦♦
Esto fue algo que pasó hace diez
minutos, conforme Ikki y los demás estaban corroborando el humo negro que se
elevaba a la distancia.
「Akatsuki Academy—ese es el nombre
de los que atacaron la Academia Hagun.」
Dentro del autobús lleno de
personas en pánico, la fría voz de Arisuin resonó. Al mismo tiempo, el Ermitaño
Oscuro fue clavado en las sombras de todos los que estaban dentro del autobús.
「¡¿Eh?! ¡¿A-Alice?!」
「¿Qué significa esto?」
Todos mostraron agitación al
haber sido robada su habilidad para moverse.
Mirándolos a todos uno por uno,
Arisuin habló.
「Se los contaré paso a paso, ¿así
que podrían calmarse y escuchar?」
Y lo explicó. Su verdadera
naturaleza como un assassin de Rebelión. El plan al haber sido empleado por
Rebelión, y crear caos en el Festival de Arte de la Espada. Con el find e
cumplir eso, él y los demás elites del bajo mundo fueron enviados. Además de la
estrategia amenazante para atacar a Ikki y los demás en diez minutos.
「Mi rol, en otras palabras, es
reducirlos a todos ustedes por la espalda luego de que lleguemos a Hagun. Una
vez que se cumpla eso, las posibilidades de que este plan falle son no más de
una en un millón—es por eso que vine a la Academia Hagun, y me acerqué a
ustedes.」
「¡¿Entonces nos has estado
engañando todo este tiempo?!」
「Si estás bromeando, me gustaría
que pagues de inmediato.」
Stella e Ikki mostraron rostros
que evidenciaban confusión y angustia. Pero Arisuin negó con la cabeza a ambos.
「No es una broma. Todo lo que
acabo de decir es verdad.」
Declaró. Ante su tono firme, las
expresiones de Stella e Ikki se agravaron más. Pero una persona—
「No entiendo.」
Shizuku, quizás la que más se
había asociado a Arisuin en este lugar, con una expresión inquebrantablemente
calmada como la luz del sol sobre la superficie del agua, interrumpió con una
pregunta desde un costado.
「¿Por qué nos estás contando esto
ahora? Si nos enteramos de esto, se arruinaría toda la estrategia, ¿no?」
La pregunta de Shizuku, era
natural. Ya que Arisuin, con sus propias palabras, había admitido su rol para
reducir a Ikki y los demás por la espalda luego de llegar a Hagun. Si iba a
hacer eso, el momento de la traición en este momento era prematuro.
Shizuku depositó sus dudas en
esta cuestión. En respuesta, Arisuin enfrentó a Shizuku y susurró una
respuesta.
Su respuesta fue—que lo había
decidido en su corazón.
「Sí, eso es verdad. En otras palabras, yo quiero arruinar esta estrategia.」
Un tono firme. Palabras que transmitían nada más que una cierta resolución. Las palabras que hicieron eco eran sin dudas los verdaderos sentimientos de Arisuin.
Ya se había decidido. Se
aseguraría de que la estrategia falle.
「¿Por qué? Viniste a la academia y
te acercaste a Shizuku para esto, ¿no?」
「...Sí, ciertamente así se suponía
que era.」
Ikki le preguntó a Arisuin por
qué cometer esta traición, y Arisuin le dedicó una sonrisa afligida.
「Pero le tomé cariño a Shizuku a
pesar de mí mismo, ¿sabes?」
Mientras miraba a la chica de
cabello plateado frente a él, Arisuin reflexionó.
Una familia tensa. Lazos de
sangre rotos. Muchos absurdos. Y en medio de todo esto, lastimada y perdida, aceptando
todo y nada... aun si no podía ser la más cercana a su hermano, esta chica
seguía amando a su hermano.
A los ojos de Airusin quien no
podía soportar los absurdos del mundo y abandonó el amor, el camino que tomó
Shizuku era excesivamente noble y deslumbrante.
Y debido a eso, Arisuin se había
hallado a sí mismo pensando cuidadosamente por algún tiempo.
Los fuertes toman todo, a los
débiles les roban. Las palabras de Wallenstein en aquel entonces, incluso si
eran la verdad de este infernal mundo—él no quería robarle a esta chica
moralista.
Porque si lo hacía, no sería
distinto de la banda que le robó todo en aquel entonces.
「Si me preguntas por qué, esa es
la razón de mis acciones. No quiero arruinar el deseo de Shizuku, o el sueño de
la persona que ella más aprecia. No quiero arruinárselo a nadie... Así que por
esa razón, quiero cooperar con todos. Con el fin de proteger el escenario donde
tienen lugar todos sus sueños, el Festival de Arte de la Espada.」
「¿Cooperar?」
「Sí. Todos en la Academia Akatsuki
sin podeross en el bajo mundo. Si luchamos con ellos, honestamente, son
demasiado fuertes. Por eso, la mejor oportunidad para derrotarlos sería con un
ataque sorpresa.」
Traición de parte de un aliado.
Sin importa qué clase de luchador se era, uno no podía responder a eso. Era por
lo cual había sido enviado un espía a Hagun, para que Akatsuki no tenga
posibilidad de ser derrotados.
—Era el mismo esquema por el cual
Akatsuki ahora iba a ser víctima.
Así Arisuin, hasta el último
momento y sin mostrar el menor indicio de duda, había actuado como un miembro
de Akatsuki lo haría. Con el fin de crear las circunstancias para la mejor
oportunidad de un ataque sorpresa cien por ciento efectivo.
「Si Hagun da vuelta el marcador
aquí, los cálculos de Akatsuki serán perfectamente afectados. La Academia
Akatsuki no podrá aparecer en el Festival de Arte de la Espada, ni podrán
escapar... Así que, por favor. Cooperen conmigo, y aplastemoslas manipulaciones
de Akatsuki.」
Concluyendo sus palabras, Arisuin
agachó la cabeza en profunda petición.
Era todo por Shizuku y las
personas que ella amaba. Al hacer una buena acción después de todo este tiempo,
no esperaba que ellos quisieran conservar su relación. Era un homicida, y el
hecho de que siempre había engañado a Shizuku y los demás no cambiaría.
Shizuku probablemente no lo
llamaría nunca más “hermana mayor”. Al igual que las sus hermanas en aquel
entonces. Pero estaba bien. No le molestaba si la vida diaria de Shizuku ya no
lo incluyera, si sus esperanzas, y las personas importantes para ella, eran
protegidos. Eso era todo lo que Arisuin deseaba, su verdadero motivo que no
cargaba falsedad.
Sin embargo...
「¡A-Aunque digas eso, no puedo
creerte...! ¡Después de todo, ¿no es Rebelión un grupo terrorista repleto de
asesinos?!」
「¡Es cierto! ¡Tú mismo admitiste
que eres un assassin, ¿cómo podemos confiar en un tipo que sigue quitándonos la
habilidad de movernos en este momento?!」
Bueno, la gente no tiene manera
de saber lo que hay en el corazón de otra personas. Especialmente las hermanas
Hagure que lo conocían poco, era natural que ellas expresaran esa opinión.
Ambas estaban mostrando expresiones de consternación y repugnancia ante el
assassin que tenían en frente, y que se había desviado del armazón del sentido
común de los demás. Tal homicida había estado viviendo cerca de ellos hasta
ahora.
Pavor. Miedo. Repulsión. Tales
emociones de fuerte rechazo. Pero esas reacciones no podían evitarse. Si
cualquiera descubriera que su vecino era un asesino que había matado a docenas
de personas, probablemente estaría aterrado. Las conversaciones diarias que
habían compartido casualmente se volverían nauseabundamente repulsivas.
Los objetivos de asesinato de
Arisuin eran criminales del bajo mundo como él, pero un homicida era un
homicida. Ambas reacciones estaban extremadamente justificadas. Así que Arisuin
dijo—
「Creo que lo que Hagure-senpai
dijo es cierto. Estoy seguro de que no pueden confiar en lo que les dice un
homicida, ya que los he estado traicionando todo este tiempo. Así que después
de que este asunto termine, prometo que no volveré a aparecer frente a ustedes,
y si de alguna forma fuera a lastimarlos durante este plan, no me molestaría
que me abandonen—pero por favor, les pido que me crean por una hora.」
Reconociendo que no podían
confiar en su propio pedido, aun así agachó la cabeza y rogó.
Arisuin comprendía. No podía
hacer más que rogar. No tenía manera de hacerles comprender por completo su
corazón. Por lo que en ese caso, sólo podía contarles la cruda verdad, bajar la
cabeza, y transmitir su buena fe lo mejor que pudiera.
A Arisuin quien hacía una
reverencia, Touka le preguntó—
「Tengo una preocupación. La
organización que contrató a Rebelión para destruir el Festival de Arte de la
Espada, los que te patrocinaron a ti... ¿quiénes son?」
「—No puedo responderte en este
momento.」
「¿Por qué?」
「...No es un enemigo con el que
podamos lidiar. Decírtelo sólo te distraerá inútilmente. Así que no lo diré por
el momento.」
「¡O-Oye! ¡¿Vas a mantenerlo en
secreto?!」
「¡No podemos confiar en este tipo
sombrío después de todo!」
Ante las exclamaciones de las
hermanas Hagure, Touka les ordeno que “esperen”.
「―Si decimos que no te creemos, ¿qué
intentarás hacer?」
「Si llegamos a eso, haré que el
autobús haga un giro en U, y escaparemos tan lejos como sea posible」
Ante la pregunta de Touka,
Arisuin respondió sin titubear, porque esta era la última medida en la que
había estado pensando por un largo tiempo.
「Aunque mantenerlos aferrados a
todos ustedes es imposible para empezar, es sólo mi propia resistencia inútil.
Sólo puedo explotar confiablemente la ventaja de la falta de preparación del
objetivo al principio.」
「Ya veo. Entiendo muy bien tu
punto de vista.」
Probablemente era la dignidad de
la presidente del consejo estudiantil. En este caótico lugar con aquella
errática conversación, Touka había lidiado rápidamente con los comentarios, y
arregló la conclusión.
「¿...Qué haremos, Kurogane-kun?」
Le pasó toda la decisión y buscó
la opinión de aquel que haría el dictamen.
「Escapar o luchar, creerle o no
creerle, en este momento es una carrera contra el tiempo. Esta no es una
situación donde podemos intercambiar opiniones sin prisas. Tú eres el líder del
equipo para el Festival de Arte de la Espada. Creo que tú eres el más calificado
para decidir esta cuestión.」
En respuesta, Ikki se quedó en
silencio, y consideró qué deberían hacer.
En este momento, no podía tener
fe completa en Arisuin. Sin embargo, como Shizuku señaló, si consideraba el
punto de vista de Arisuin, era cierto que las acciones de Arisuin no beneficiaban
al enemigo. Ikki reflexionó en ello... y por un instante, echó un vistazo a la
expresión de Shizuku—y respondió.
「Creo que intentaremos confiar en
Alice.」
♦♦♦♦♦
Como resultado, la estratagema de
Arisuin se había activado espléndidamente. Todos los miembros de la Academi
Akatsuki tenían sus sombras atrapadas en el momento que ambos lados
colisionaron, y se quedaron completamente indefensos—
“¡Yaaaaahhh!”
Ante las espadas florecientes de la Academia Hagun, todos ellos cayeron. En su condición de indefensión, habían recibido golpes letales. Incapaces de defenderse, ya no pudieron esquivarlos. Era una victoria sin lugar a dudas.
Gracias a dios... entonces ahora.
Las esperanzas de Shizuku, de su
preciosa hermana menor, habían sido protegidas. Su Festival de Arte de la
Espada no se había manchado. Arisuin disfrutó eso. Y todos los demás también—
「Wh-Whew.... no sabría que hacer
si en verdad nos atacaras por la espalda.」
Todos soltaron un suspiro de
alivio similar, y dejaron que la tensión abandone sus hombres. Probablemente
fue porque todos y cada uno de ellos sintieron la respuesta contra su propia
espada.
Excepto por una persona.
Excepto por Ikki, quien estaba mirando con una expresión rígida a su hermano mayor, Ouma Kurogane, a quien él mismo había golpeado.
Imposible.
Ikki, ante la realidad
desenvuelta frente a sus ojos, recordó un escalofrío que le provocó náuseas.
¿Qué es esto?
Sin importar cómo lo mirara, este
era realmente su hermano Ouma. En comportamiento, aura, espíritu, voz, y
rostro, ciertamente era el auténtico. La respuesta de Intetsu también le dijo que había derrotado al oponente sin dudas.
Pero debido a eso, sin importar
cuán real fuera—era absolutamente imposible.
¡Que su hermano mayor, el Emperador Espada de Viento Ouma Kurogane, se encontrara tendido a sus pies tan antiestéticamente!
—En ese momento, lo que hizo que se diera cuento de ello fue un recuerdo que le volvió a la mente. Hace muchos días, el recuerdo de aquel distrito comercial en las montañas—ese fragmento—
「¡Wah! ¡Espere, espere! ¡No puede
hacer eso!」
Ese día, aquel joven había
sujetado, más rápido que el entrenado cuerpo de Ikki, al hombre que había
comenzado a atacar a la gente en la calle. Y el chico había dicho que se
trataba de una habilidad Blazer. Bajo esas circunstancias, teniendo en cuenta
la condición física del chico, él debe haber comenzado a actuar antes de que el
atacante se moviera. Si no—Ikki debería haber sido más rápido.
Esa habilidad podría haber sido
una de dos tipos.
Una era visión penetrante. Si él
vio que el hombre llevaba un cuchillo, hubiera sido imposible comenzar a
moverse antes de que el hombre iniciara su acción.
Pero un factor descartaba esa
posibilidad. Kagami había dicho que la razón por la que el chico fue
seleccionado como representante del Festival de Arte de la Espada fue debido a
que era un Blazer del sistema de interferencia de causalidad con una extraña
habilidad. La visión penetrante no era una habilidad extraña ni era parte del
sistema de interferencia de la causalidad.
En ese caso, quedaba una sola
posibilidad.
Predicción del futuro—
Descubriendo esa posibilidad, Ikki experimentó una revelación. En ese instante, un temblor se extendió por su garganta y su estómago.
“¡Cuidado, Alice! ¡Es una
trampa!”
Giró en dirección e Arisuin, con
el temblor emergiendo junto a su voz.
Pero—fue un poco tardío.
“¿Eh—?”
Más rápido que lo que Arisuin
pudo reaccionar ante las palabras de Ikki, incontables espadas volaron hacia el
cuerpo de Arisuin por detrás.
“¿Ha...?”
“¿Ali...ce?”
Con un ruido sordo, Alice cayó
sobre el suelo con diez espadas plateadas atravesándolo. Todos se quedaron sin
aliento por la abrupta situación.
“Casi, ¿huh? Podrías haberlo logrado si hubieras sido un poquito más rápido.”
Aquella voz ilimitadamente animada se escuchó.
“¡Pero que hayas descubierto mi
habilidad con sólo verlo una vez! ¡Como se esperaba de Ikki-kun!”
La voz llegó por detrás de
Arisuin. De pie allí sonriendo inocentemente con incontables espadas plateadas
en ambas manos, era Amane Shinomiya.
♦♦♦♦♦
El desvalido cuerpo de Alice cayó
al suelo. Su cuerpo había sido perforado por armas en forma ilusoria, y se
había desmayado.
Ante esta situación, Shizuku fue
la primera en actuar.
“¡Alice!”
Gritando, intentó correr hacia
donde se encontraba. Pero ese acto—
“¡Shizuku, no te descuides! ¡Mira
en frente de ti!”
La advertencia de Ikki llegó
justo a tiempo, a diferencia de la anterior. Frente a los ojos de Shizuku, en
lo que debería ser aire vacío, había remolinos en el espacio.
¡Esto es—!
Shizuku quien lo reconoció de
inmediato se cubrió la cabeza con ambos brazos. En ese instante, algo golpeó el
pequeño cuerpo de Shizuku, y la mandó a rebotar como una pelota. Como si algo
invisible la hubiera mandado a volar.
“¡Eh...!”
¿El asombro fue para los del lado
de Hagun? ¿O para todos? Pero era comprensible. Era algo que lo dejaba a uno
atónito. Los estudiantes de la Academia Akatsuki que deberían haber sido
derrotados estaban saliendo de un humo transparente, completamente ilesos.
“¡¿H-Huh?! ¡¿Qué significa
esto?!”
“¡¿Copias de las mismas
personas...?! ¡Es imposible! ¡¿Entonces a quiénes derrotamos—?!”
Renren y Saijou una vez más
confirmaron las formas de los estudiantes de Akatsuki a sus pies.
Y abrieron sus ojos de par en
par. Lo que yacían alló eran marionetas de madera pintadas.
“¡¿Qu-Qué es esto?!”
“Arte Engañoso (8). Mi
arte que es aún más real que el auténtico.”
Ante el grito de Renren, una de
las personas de la Academia Akatsuki comentó perezosamente. Era la señorita
toples cuyos grandes pechos estaban ocultos bajo apenas un delantal de pintor.
Como Arisuin, ella fue contratada por Rebelión, era Bloody Da Vinci, Sara
Bloodlily.
“En otras palabras, lo que
pensaron que éramos nosotros en realidad eran muñecas de madera animadas por mi
Viuda Negra (9), con apariencias
otorgadas por el Arte Noble de ella. Y los verdaderos estábamos escondidos aquí
con el viento de Ouma-kun, esperando a que todos ustedes terminen de esforzarse
para nada.”
“¡¿Viste a través del plan de
Alice desde el principio?!”
“Sí, bueno. Tenemos un excelente
profeta aquí, ¿sabes...? Aunque no creímos que habría un traidor entre
nosotros.”
Mientras el payaso se reía
ruidosamente como si hubiera contado un chiste—
“Pero al final, la predicción de
Amane-san se hizo realidad, ¿huh? Estoy seguro de que Wallenstein-sensei quien
le dio una oportunidad hasta el final, estará triste.”
Levantó el cuerpo caído de
Arisuin.
“Bueno, dejaré que se encarguen
del resto, chicos. La orden de nuestro patrocinador era destruirlos tan
profundamente que sea imposible argumentar en contra de nuestra superioridad.
Aplastarlos totalmente, sin dejar a ninguno. En cuanto a mí, tengo que llevarle
este traidor a Sensei, así que...”
Y retrocedió de un salto con la
agilidad de una pantera, probablemente para retirarse del campo de batalla.
Llevándose a Arisuin, por supuesto.
Pero naturalmente, Ikki no dejó
que eso suceda fácilmente.
“¡Espera!”
Se impulsó hacia delante
pisándole los talones al payaso. Su velocidad fue lo suficientemente rápida.
Podría alcanzarlo de inmediato—o debería haber podido.
El camino de Ikki fue bloqueado
por el Emperado Espada de Viento, Ouma Kurogane.
“¡Hermano...!”
“Cae.”
Ouma, sin titubear, movió su
Dispositivo con forma de nodachi de más de un metro de largo, Ryuuzume (10). Atravesando el aire, trazó un arco plateado hacia el torso de
Ikki en un destello.
Ikki estaba convencido de aquel
ataque despiadado. Si no se hubiera detenido, concentrado su vista, y girado
para defender su cuerpo con toda su fuerza, habría sido cortado a la mitad
junto a Intetsu.
“¡Kuh!”
Pero conforme Ikki estaba a punto
de abandonar la persecución—
“¡Haaaaa!”
Siguiendo la misma línea que el
Dispositivo de Ouma, una espada dorada cubierta de flamas impidió su avance.
“¡Stella!”
Gritó el nombre de su amante de
cabello rojo que se había interpuesto para protegerlo. Y mientras Stella
chocaba espadas con Ouma, le dijo a Ikki.
“¡Ikki! ¡Shizuku fue por Alice!”
Escuchando eso, Ikki miró a donde
Ouma había mandado a volar a Shizuku. Ya no había nadie allí. Escaneando su
campo de visión, encontró la espalda de Shizuku corriendo tras Hiraga a toda
velocidad.
“¡Estos tipos dejaron pasar a
Shizuku! ¡Probablemente prepararon trampas antes de salir! ¡No es bueno que
siga sola! ¡Date prisa y síguela!”
Ante las palabras de Stella, Ikki
dudó un momento. ¿Debería dejarle esta situación a Stella y los demás?
Pero afortunadamente, los
ejecutivos del consejo estudiantil estaban aquí, comenzando por Touka, y además
los otros representantes, las hermasn Hagure, también estaban aquí. En ese
caso—él tenía que unirse a quien había quedado sola.
“¡Entiendo! ¡Te lo encargo!”
“Sí. ¡Si estos tipos no tienen el
poder de Alice apoyándolos, los derribaremos a todos!”
Las animadas palabras de Stella
lograron que él se decidiera, e Ikki abandonó el campo para seguir a Shizuky.
Viendo a Ikki conforme se iba—Stella una vez más miró al chico que era a quien
más amaba y también alguien digno de ser su rival.
Y lo sabía. Su enemigo estaba en
frente de sus ojos, parado derecho como la marioneta de madera y la miraba.
“He estado sintiendo tu mirada
todo este tiempo. ¡¿Quieres luchar conmigo, cierto?!”
Si esa marioneta fuera más real
que el auténtico, entonces esa mirada estaba copiando las verdaderas emociones
de Ouma. Si eso era verdad—
“¡Acepto tu desafío, Emperador
Espada de Viento!”
La Princesa Carmesí no tenía
motivo para declinar. Ya que su oponente era un caballero rango A como ella,
este era el rol que debía ocupar. Decidiendo eso, Stella empujó el cuerpo de
Ouma con toda su fuerza.
Y contra Ouma quien había sido
alejado unos treinta metros, comenzó a preparar su letal Arte Noble. Era una
técnica en la que se blandía una espada que ardía con calor y luz, invirtiendo
todo su espíritu en su espada larga, Lævateinn.
―Katharterio Salamanda.
No sé qué clase de habilidad
tiene mi oponente. ¡Pero sé que no es una persona común!
En ese caso, usaría toda su
fuerza desde el comienzo. Sería mejor decidirlo todo aquí. Si no lo hacía,
intentaría sondear la habilidad de su oponente al ver cómo respondía. Esa fue
la decisión de Stella. En respuesta, Ouma—
“―Hmph.”
Ante el espíritu de Stella que
estaba agitando la temperatura atmosférica de los alrededores—
“¿Algo tan trivial es lo mejor
que puedes hacer?”
Dedicándole una sonrisa que
mostraba un vistazo de sus colmillos—respondió con su propio y más poderoso Arte
Noble.
Extrañemente, adoptó la misma
pose que Stella. Tomando su inmensa espada con ambas manos, levantó la hoja, y
depositó toda su magia en ese Dispositivo. La habilidad de Ouma Kurogane, el
Emperador de Viento, era el sistema de influencia de los elementos—el poder de
manipular el viento.
El huracán nacido de ese poder se
convirtió en un ciclón dentro de Ryuuzume,
y devoró la atmósfera de los alrededores. La atmósfera, los escombros, las
flamas—todo en los alrededores. En breve, lo que él había creado era una espada
de tormentas de viento intensas, capas y capas de masa apilada—
“Kusanagi.” (11)
Una espada de luz y calor contra una espada de huracanes. Ambas hojas tenían más de cincuenta metros de largo, ambas constituían un ataque que va más allá de las normas. Con apenas treinta metros de distancia entre los usuarios, ese alcance era más que suficiente. Si ambos balanceaban sus espadas sobre su oponente al mismo tiempo, chocarán.
En un instante, el fuego y el
viento de las dos espadas de magia entrelazándose en una lluvia de chispas,
destruyeron los alrededores como una tempestad de flamas.
“¡Eeeeeeekkk!”
Ante la tempestad blanca y
caliente que estaba volando y ardiendo todo, las hermanas Hagure gritaron. No,
todos en ese lugar incluyéndolas a ellas se protegieron con magia, acurrucaron
sus cuerpos, y apenas lograron mantenerse firmes. Si perdían la concentración
por un instante, sus cuerpo habrían volado muy lejos, y probablemente habrían
recibido un impacto equivalente a una caída desde un rascacielos. Fue por eso
que todos se protegieron desesperadamente. Era una batalla más allá de lo que
los caballeros comunes podían soportar ver. Pero—
Pronto, el choque entre las
espadas de fuego y la espada de viento comenzó romperse. Quien comenzaba a
derrumbarse era—la Princesa Carmesí.
¡N-No puede ser!
Con sonidos chirriantes, las
manos de Stella con las cuales presumía de una fuerza física que iba más allá
de lo establecido, comenzaron a sentir una presión que nunca habían
experimentado. Sus talones se estaban hundiendo en el suelo, y el asfalto
debajo de ellos comenzar a agrietarse. Al descubrir esta realidad, Stella se
quedó atónita.
¿Estoy perdiendo en fuerza? ¿Yo...?
Era su primera vez
experimentándolo. La razón era que su plan de usar Katharterio Salamandra para
conocer la respuesta de su oponente había colapsado en un instante.
Era natural. Hasta ahora, ni una
sola persona había recibido ni devuelto su Katharterio Salamandra, el Arte
Noble del que la Princesa Carmesí estaba orgullosa. No había aprendido nada
acerca de su oponente con su plan.
Stella no tenía experiencia con
esta situación. Si no tenía experiencia, no podía pensar en una respuesta.
¿Qué debería hacer...?
Gradualmente, gradualmente. La
bella cruz creada por las espadas de fuego y viento comenzó a perder su forma.
La espada de huracanes estaba empujando a la espada de fuego, rasurando la
espada de luz con un ciclón girando como un taladro de roca.
Finalmente, la forma de espada de
Katharterio Salamandra fue superada. Y Kusanagi cayó hacia la cabeza de Stella.
Oh—no—
Stella, en el instante justo
antes de que la presión cayera sobre ella, no podía moverse para esquivarlo. Y
al mismo nivel donde los dos estaban luchando, los demás se estaban protegiendo
con todas sus fuerzas, y no pudieron acudir a ayudar. Stella no podía evadir
este golpe. Su derrota era segura.
—Si no fuera por la única que podía hacer algo en ese momento, Raikiri, Touka Toudou.
“¡Stella-san!”
En el instante que Kusanagi
estuvo a punto de cortar en dos el cuerpo de Stella, Touka rápidamente usó
Shippu Jinrai para acelerar. Deslizándose por al lado de Stella, la sacó del
camino de la descendente hoja justo a tiempo.
Al momento que Kusanagi golpeó el
suelo, la hoja de huracanes cortó e hizo volar todo allí. Mientras abrazaba a Touka
con fuerza, Stella contempló la destrucción con sus propios ojos. En el lugar
donde Kusanagi había caído, ya nada quedaba allí. Los edificios escolares, las
arenas de práctica, incluso el asfalto de las calles pavimentadas... Todo había
sido reducido a escombros. Todo había sido destrozado, dejando sólo un bache
cóncavo en la tierra marrón. Era como si un enorme dragón hubiera excavado en
el suelo. Si un humano hubiera recibido ese golpe directamente, era seguro que
no dejaría rastros.
E-Estuvo muy cerca... Si Touka-san no me hubiera
salvado recién...
“¡Gracias, me salvaste,
¿Touka—?!”
Conforme Stella habló, su voz se
detuvo.
La razón era que—la mano derecha
de Touka que estaba sosteniendo a Stella. La mano derecha de Touka apoyada
sobre la cabeza de Stella. En este momento, estaba por aplicar relámpagos en el
cráneo de Stella.
“¿Po-Por qué...?”
“Lo siento, Stella-san. En este
momento, no puedes luchar con Ouma-san. En este momento ni siquiera puedes
separarte de mí, no puedes ganar contra él.”
“...Ah...”
Con un rostro que parecía mostrar
que quería responder, Stella perdió la conciencia de inmediato. Naturalmente.
Un interruptor había sido activado directamente dentro de su cabeza.
“¡Kikyou-san! ¡Botan-san!”
“¡¿Eh?!”
“¡Eek!”
Touka, quien había aturdido a
Stella, se dirigió hacia las hermanas Hagure, y les lanzó el cuerpo de Stella a
ellas con toda su fuerza.
Las hermanas Hagure estaban
atónitas por el abrupto evento, pero no obstante eran mujeres valientes que
habían luchado hasta el final en las batallas de selección. Aunque estaban
estupefactas, atraparon el cuerpo de Stella con éxito.
A las dos, Touka les gritó sin
hacer una pausa.
“¡Por favor, tómenla y
llévensela! ¡Aléjense de aquí tanto como puedan! ¡En este momento, los
representantes del Festival no pueden perder aquí en absoluto!”
En ese instante, bajo esas
circunstancias, Touka estaba más calmada que nadie.
Derrotar a la Academia Akatsuki y terminar esto
ahora, el método elegido por Stella ciertamente era la estrategia a seguir en
el mejor de los escenarios, pero esta situación ya no es del tipo que llevará
al mejor de los escenarios.
Luego de que su ataque sorpresa
había fallado, la situación cambió. Teniendo en cuenta la diferencia en la
habilidad de batalla, repeler a la Academia Akatsuki ya era muy difícil. Si
llevaban a cabo un desafío aquí, y Stella y las hermanas Hagure eran derrotadas
por la Academia Akatsuki sin oportunidad de recuperarse, Akatsuki en serio
podría reemplazar a la Academia Hagun como la séptima escuela en el Festival de
Arte de la Espada, llevando todo a la peor de las conclusiones.
¡En ese caso, lo que deberíamos hacer aquí es
proteger a los representantes de la Academia Hagun!
A Touka, una veterana que había
experimentado incontables instancias de combate real, se le ocurrió la mejor
estrategia. Y con la fuerte voluntad que Touka había depositado en su voz—
“¡S-Sí!”
Aunque las hermanas Hagure no
habían comprendido su pensamiento, la voz de Touka las instó a ambas a actuar.
Kikyou, quien era fuerte, cargó a Stella sobre su espalda, y las dos dieron
media vuelta y se fueron de la Academia Hagun.
En respuesta—
“¿Creen que pueden escapar?”
Al mismo tiempo que la voz de
Ouma reverberó sobre ellas, los estudiantes de Akatsuki que estaban detrás de
él a la espera, surgieron. La joven con vestido, montando un enorme león
negro—la “Domadora de Bestias”, Rinna Kazamatsuri. Y la “Inmutable” Yui Tatara.
Dieron caza a las tres personas. Pero—
“¡Red Mach!”
“¡Hacha Crescendo!”
Arremetiendo rápidamente, la
Corredora de Perparatoria y el Destructor atacaron a los que perseguía a las
tres que estaban escapando, y obstruyeron su avance.
“¿—Crees que puedes seguir?”
Touka le preguntó a Ouma quien
yacía de pie frente a sus ojos, y levantó su Narukami. Actuando en armonía, los que estaban con Touka también
blandieron sus Dispositivos.
“¿Intentan sacrificarse para
dejar que los representantes escapen? Qué decisión resuelta. Pero retrasará
sólo un poco lo inevitable.”
De acuerdo con las palabras de
Ouma, la desquiciada hostilidad de Akatsuki se elevó al unísono, y dieron un
paso adelante. Será su segundo choque. Pero el choque de esta ocasión no será
contra las farsas del primero. Probablemente será una pelea a muerte genuina.
En la atmósfera que se estaba
tensando rápidamente, Touka pronunció el nombre de la chica junto a ella.
“...Kana-chan.”
Kanata Toutokubara. La única
representante del Festival de Arte de la Espada que pertenecía al consejo
estudiantil. Touka instó a que escapara con una mirada, pero—
“No escaparé. Estaré contigo
hasta el final, Touka-chan.”
Ante esa mirada, Kanata no gastó
un vistazo. Sólo miraba directo a lo que tenía en frente.
“—Okey.”
Touka conocía su terquedad,
porque habían estado juntas desde la infancia, por lo que Touka no repitió
palabras sin sentido.
“Lo que sucedió hoy aquí es un
insulto para el consejo estudiantil de la Academia Hagun. ¡Les devolveremos dos
veces el favor!”
Diciendo eso, los compañeros
restante en este lugar soltaron un grito de coraje.
“¡SÍ!”
—Todos encararon al enemigo y
enfrentaron su desafío al unísono.
♦♦♦♦♦
“¡Haa... ha...!”
Ella había estado corriendo por
un rato, descendiendo la desierta pendiente en frente de la academia. Luego de
que Shizuku dejara las populares calles del distrito comercial, sus pies se
detuvieron debido al dolor que estaba sintiendo en su costado.
No... estoy en forma, ¿huh?
Chasqueando la lengua ante su
propia debilidad, dedujo la distancia con Hiraga quien estaba cargando a
Arisuin. Ya se encontraba más allá de lo que podía percibir con sus ojos. Bien
podría haberse alejado en un automóvil.
Pero aún no he perdido su rastro.
En el momento que Arisuin fue
secuestrado, Shizuku había dejado un hilo de agua mágico e invisible sobre el
cuerpo de Arisuin. Ese hilo atravesava cualquier sustancia material, y se
extendía directo hacia Arisuin. En otras palabras, si jalaba, definitivamente
le apuntaría la dirección en donde se encontraba Arisuin.
Pero parecía que ya no podía
seguirlos a pie. Por lo tanto, Shizuku—
“Disculpe.”
—le habló a un hombre que estaba
sobre una motocicleta esperando que a cambie el semáforo.
“Soy una estudiante caballero de
la Academia Hagun. Estoy en medio de una emergencia, me gustaría que me
prestara su moto—”
“¡¿Huh?! No bromess conmigo,
enana. ¿Por qué debería dártela?”
Apoyó su Yoishigure en la garganta del motociclista que se rehusaba y
fruncía el ceño rotundamente.
“Es una emergencia. Se lo
suplico.”
“¡Okey! ¡Tómala!”
El hombre sonreía y asentía
repetidamente conforme se bajaba de la moto y escapaba.
Como se encontraba en apuros,
ella no tuvo más opción que hacer esto. No habría problemas si luego le pedía a
la academia que regrese la motocicleta. Pensando eso, Shizuku se subió a la
motocicleta que el hombre le había entregado. Pero—se dio cuenta de que había
cometido un gravísimo error.
Mi pie no llega al pedal...
“...No puedo creer que había una
trampa como esta.”
“¿A qué estás jugando, Shizuku?”
De repente, una voz que provino
de atrás hizo que Shizuku gire la cabeza.
“Onii-sama.”
Ikki quien había seguido a
Shizuku sin parar estaba allí. Al verlo, Shizuku le explicó la situación.
“La distancia con Alice ha
crecido, quizás el payaso está en un vehículo. Conseguí una moto, pero como
puedes ver tiene un defecto estructural. Incluso una moto hecha en Japón, no
está construida apropiadamente.”
“Claramente no es la culpa de los
fabricantes.”
Ikki se reía irónicamente ante la
queja de Shizuku. Pero inmediatamente endureció su expresión, y le habló a
Shizuku. Lo que dijo fue una pregunta para Shizuku quien estaba siguiendo a
Arisuin, a pesar de que Arisuin los había engañado hasta hoy.
“...Shizuku. Aunque ellos saben
que estamos siguiendo a Alice, Ouma y sus compañeros no nos están siguiendo a
nosotros. Porque no hay necesidad de seguirnos. Seguramente sea porque hay un
enemigo que enfrentaremos al que no podemos derrotar. Por supuesto, eres
conciente de eso, ¿cierto, Shizuku?”
“Sí, lo sé.”
“Alice nos engañó. Puede que
seguir a Alice también sea una trampa para ti y para mí. Seguramente también
sepas de esa posibilidad, ¿cierto?”
“Sí, lo sé.”
“E incluso si Alice en verdad cortó
lazos con Akatsuki con el fin de salvarnos, él dijo que deberíamos abandonarlo.
Ese fue el deseo de Alice. No quería verte en peligro, Shizuku. ¿No es así?”
“Sí, lo sé.”
Tres veces. Shizuku había
confirmado de la misma manera a cada una de las preguntas de Ikki. Él había
venido para brindarle apoyo. Pero no la había persuadido. Aunque eran las
palabras de su amado hermano mayor. Después de todo—
“Onii-sama, ¿viniste a preguntarme esto?”
Para Shizuku, parecía que Ikki había venido a hacer a esas tres preguntas. Todas ellas parecían ser cosas completamente triviales y sin importancia. Shizuku miró directo al rostro de su hermano que había venido a apoyarla.
“Alice fye la primera que me
agradó después de ti, Onii-sama. Es mi preciado amigo. En este momento, mi
amigo se encuentra en peligro. Para mí, no hay ningún asunto más importante.
Por eso, sin importar los peligros que me estén esperando, y sin importar lo
que Alice hizo o lo que quiere—voy a salvarlo.”
Le transmitió su decisión a Ikki.
Nunca retiraría lo que acababa de decir. A pesar de que comprendía todos los
riesgos, iría y salvaría a su amigo, su única hermana mayor.
Escuchando eso, su hermano... le
dedicó una pequeña sonrisa.
“—Buena respuesta.”
“¿...Eh?”
Era una respuesta que ella no
había esperado de Ikki. Y Shizuku soltó una confundida voz sin pensarlo.
“Onii-sama, no viniste... ¿para
detenerme?”
“Bueno, si tú dabas una respuesta
poco entusiasta, iba a llevarte de regreso en contra de tu voluntad, pero... ya
que estás tan decidida, no tengo motivos para detenerte.”
Conforme respondía, Ikki empujó
ligeramente el cuerpo de Shizuku hacia atrás, subió a la motocicleta, y tomó el
manubrio. Y giró hacia Shizuku.
“Yo también actuaré de acuerdo a
tus deseos, Shizuku.”
Conociendo todos los peligros, se
comprometió a seguir los deseos de su hermana.
“Onii-sama...”
Ante tal consideración de su
parte, Shizuku experimentó una dulce sensación reforzándose en su pecho. Apoyó
su frente sobre la espalda de Ikki, y pensó—
Mi amor no será aceptado, pero...
Qué bueno que amaba a esta
persona.
“Gracias.”
Conforme ofrecía su gratitud,
tembló sólo un poco.
“No me agradezcas, Shizuku. Soy
tu hermano mayor después de todo. —Bueno, aquí vamos. Te encargaré las
direcciones a ti.”
“¡...Sí!”
E Ikki pisó el pedal de la moto.
Viajaron en línea recta, hacia
dónde Arisuin había sido llevado—a la Academia Akatsuki.
NOTAS DEL TRADUCTOR:
(1) Reflejo
Total: este nombre
usa los kanji 完全反射, Kanzen
Hansha (“Reflejo Perfecto”).
(2) Snic●ers:
Snickers, una marca norteamericana de barras de chocolate.
(3) Udon
de kitsune, curry, y kakiage: platos de udon extensamente
vendidos. El udon “kitsune” o “zorro” son fideos en una sopa con sabor a curry.
Udon “kakiage” es fideos con buñuelos de tempura fritos.
(4) Ramen
de shouyu, miso, y tonkotsu: platos de ramen
extensamente vendidos. Ramen “shouyu” es fideos en una sopa con sabor a salsa
de soya. Ramen “miso” es fideos en una sopa de miso. Ramen “tonkotsu” es fideos
en un caldo hecho usando huesos de cerdo.
(5) Pocky:
una marca japonesa de finos palitos de biscocho bañados en chocolate u otros
sabores.
(6) Nodachi:
una espada japonesa. Esencialmente una katana larga.
(7) La palabra “akatsuki” es un término japonés para
alba o amanecer.
(8) Arte
Engañoso: el término usa los kanji 騙し絵, Damashii E
(“Dibujo Engañoso”).
(9) Viuda
Negra: el término usa los kanji 地獄蜘蛛の糸,
Jigoku Kumo no Ito (“Seda de Araña del Infierno”).
(10) Ryuuzume,
龍爪:
“Garra de Dragón”.
(11) Kusanagi:
“Cortadora de Hierba”, una espada que es considerada como uno de los Tres Tesoros
Sagrados de Japón. El término usa los kanji 月輪割り断つ天龍の大爪, Getsurin Waritatsu
Tenryuu no Ootsume (“Garra de Dragón del Cielo que Corta la Luna”). Más información e historia del significado,
aquí.
Traductor al
Inglés: KLSymph
(Baka-Tsuki)
Traductor al Español: nahucirujano
Corrección: Sin corrección.
Traductor al Español: nahucirujano
Corrección: Sin corrección.
Hola. Espero no esté pidiendo mucho, pero me gustaría saber qué significa el noble art de Nene-Sensei "Hodou Tensei", ya que estoy creando una enciclopedia virtual de esta novela y no tengo el significado de esta técnica (y es uno de los dos que me faltan). Espero puedas/puedan ayudarme, Suerte :)
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