Introducción
El segundo día de escuela, aunque
técnicamente era el primer día de clases, la mayor parte del día la pasamos
conociendo acerca de las reglas y políticas. Las expectativas de muchos de los
estudiantes volaron al ver cuán amables y amistosos eran los profesores. Ya
habiendo causado una gran conmoción el día anterior, Sudou dormía como un
tronco durante las clases. Los profesores se dieron cuenta de que estaba
durmiendo, pero ninguno le dio una indicación para que dejara de hacerlo.
Después de todo, la decisión de
escuchar una clase o no era nuestra, por lo que a los profesores no les preocupaba.
¿Es así como los profesores interactúan con estudiantes que ya no forman parte
de la educación obligatoria?
En esta atmósfera relajada,
pronto llegó la hora del almuerzo. Levantándose de sus asientos, los
estudiantes comenzaron a salir para comer con sus conocidos. No pude evitar
mirar con envidia a los demás, Tristemente, no pude hacerme amigo de mis
compañeros.
“Patético.”
La única persona que notó mis
sentimientos se burló de mí.
“... Qué. ¿Qué es patético?”
“‘Quiero que alguien me invite.
Quiero almorzar con alguien.’ Tus pensamientos son muy obvios.”
“Tú también estás sola. ¿No te
sientes igual? ¿O planeas quedarte sola por los próximos tres años?”
“Sí. Me gusta estar sola.”
Respondió rápidamente, sin
vacilar. Parece que en verdad se siente así.
“En lugar de preocuparte por mí,
preocúpate por ti.”
“Bueno...”
Después de todo, fui yo el que
dijo que no pudo hacer amigos.
Para ser honesto, parece que el
futuro cercano será problemático porque no pude hacer amigos.
Estar solo hace que llames la
atención. Si me convierto en objeto de acoso, seguramente destacaré.
Ni siquiera un minuto después de
que la campana sonó, la mitad de la clase se fue.
Las personas que se quedaron
quieren salir pero están solos como yo, están durmiendo y no prestan atención, o
les gusta estar a solas como Horikita.
“Estaba pensando en salir a
comer, ¿alguien quiere venir conmigo?”
Hirata dijo mientras se
levantaba.
Con esa clase de pensamiento,
luce como un verdadero riajuu. (1)
Había estado esperando por mi
salvador todo este tiempo—es una oportunidad perfecta para mí.
Hirata, allí voy. Armándome de
valor, lentamente levanté mi mano...
“¡Yo voy~!” “¡Yo también voy!”
Cuando vi a Hirata rodeado de
chicas, guardé mi mano.
¿Por qué esas chicas tomaron mi
lugar? ¡Era mi oportunidad para hacerme amigo de él! Sólo porque es un ikemen
no significa que ustedes puedan ir con él a la cafetería de manera
desconsiderada!
“Qué triste.”
Otra risa burlona y una mirada
desdeñosa provinieron de Horikita.
“No trates de adivinar lo que los
demás piensan.”
“¿Alguien más?”
Sintiéndose un poco solitario por
la falta de varones, Hirata miró alrededor del salón.
Cuando me vio a mí, nuestros ojos
se encontraron.
¡Aquí! ¡Hirata me vio! ¡Aquí hay
un hombre que quiere que lo invites!
Luego de que nuestros ojos se
encontraron, su mirada se fijó en mí.
¡Como se esperaba de un riajuu,
él sí comprende mis problemas!
“Umm, Ayanoko——”
Hirata trató de llamarme, pero en
ese momento,
“¡Hirata-kun, date prisa!”
Las chicas sujetaron los brazos
de Hirata sin notarme a mí en absoluto.
Ahh... las chicas robaron la
mirada de Hirata. Tras lo cual, él y las chicas salieron del salón. Lo único
que quedaba era mi brazo extendido.
Sintiéndome avergonzado, fingí
que estiré el brazo para rascarme la cabeza.
“Bueno, entonces.”
Lanzándome una última mirada de
lástima, Horikita salió del salón por su cuenta.
“Eso fue inútil...”
A regañadientes me levanté y
decidí ir a la cafetería solo.
Si no tengo ganas de comer solo,
simplemente iré a comprar algo al almacén.
“Ayanokouji-kun... ¿cierto?”
De camino a la cafetería, de
repente me detuvo una hermosa chica. Es Kushida, una de mis compañeras.
Como era la primera vez que la
veía de frente, mi corazón latió fuerte.
Cabello castaño, corto, y lacio
que le llegaba a los hombros. No era vulgar en absoluto, pero la escuela
recientemente había aprobado el uso de faldas más cortas, por lo que era obvio
que su uniforme era uno más nuevo.
En su mano tenía un morral con un
montón de llaveros adheridos al mismo—no sabría decir si estaba cargando un
morral o un montón de llaveros.
“Soy Kushida de la misma clase.
¿Recordarás mi nombre?”
“Claro, supongo que sí. ¿Qué
necesitas?”
“En realidad... me gustaría
preguntarte algo. Es una pregunta breve, Ayanokouji-kun, por casualidad, ¿te
llevas bien con Horikita-san?”
“No somos particularmente
cercanos. Sólo conocidos. ¿Ella hizo algo?”
Cuando supe que su objetivo era
preguntar algo sobre Horikita me sentí un poco triste.
“Oh, ya veo. ¿No se estaban
llevando bastante bien el primer día de clases? Estuve preguntando uno por uno
a los demás por su información de contacto, pero... Horikita se negó a
decírmelo.”
¿Qué está haciendo esa chica? Si
una chica tan resuelta como ella le había pedido su información de contacto,
ella podría haberme ayudado y compartirla conmigo. Después de eso, podría haber
hecho conocidos en la clase.
“Además, el día de la ceremonia
de apertura, ¿no estaban ambos hablando en la entrada de la escuela?”
Considerando que estábamos en el
mismo autobús, no sorprende que nos haya visto juntos.
A pesar de que quiere conocer a
Horikita, sólo puedo escuchar sus preguntas sin poder responder a ninguna de
ellas.
“Creo que no es muy buena para
interactuar con otros. ¿Por qué quieres conocer a Horikita?”
“Durante las presentaciones,
Horikita-san salió del salón, ¿cierto? Parecía que no hablaba con nadie, así
que me preocupé de ella.”
En su presentación ella dijo que
quería llevarse bien con todos.
“Entiendo, pero yo apenas la
conocí ayer, por lo que no puedo ayudar mucho.”
“Fuun... entonces es así. Pensé
que ustedes dos eran amigos antes de venir a la preparatoria. ¡Perdón por
hacerte una pregunta extraña tan de repente!”
“No, está bien. Por cierto, ¿cómo
sabes mi nombre?”
“¿Qué, acaso no te habías
presentado? Me aseguré de memorizar los nombres de todos.
Kushida escuchó mi presentación
simplona.
Por alguna razón me sentí muy
aliviado al oír eso.
“¡Una vez más, llevémonos bien,
Ayanokouji-kun!”
Aunque me sentí un poco perplejo
ante su mano extendida, limpié mi mano en mis pantalones y estreché la de ella.
“Encantado de conocerte...”
Hoy fue un día afortunado. Aunque
hubo algunos malos momentos, también los hubo buenos.
Y como los humanos piensan de
manera conveniente, rápidamente me olvidé de los momentos malos del día.
1
Eventualmente, luego de echar un
vistazo por la puerta de la cafetería, decidí ir al almacén, comprar un poco de
pan, y regresar al salón.
Un grupo de amigos estaba
comiendo con sus escritorios lado a lado, mientras que otros estudiantes
estaban comiendo solos en silencio. La única cosa en común era que casi todos
tenían un almuerzo del almacén o de la cafetería.
Iba a empezar a comer cuando vi
que Horikita ya había regresado a su asiento.
En su escritorio tenía un
sándwich que lucía delicioso.
Regresé a mi asiento sin decir
nada.
Cuando estaba a punto de darle el
primer bocado a mi pan, sonó música por los parlantes.
“Hoy, a las 5pm en el gimnasio
número 1, habrá una feria de clubes. Para aquellos que estén interesados en los
mismos, por favor vengan al gimnasio número 1. Repito, hoy—”
Una chica con una linda voz hizo
el anuncio.
Clubes, huh. Nunca he estado en
un club.
“Oye, Horikita——”
“No tengo ningún interés en los
clubes.”
“...Ni siquiera pregunté
todavía.”
“Ok, ¿entonces qué?”
“¿Vas a participar en algún
club?”
“Ayanokouji-kun. ¿Tienes demencia?
¿O sólo eres un idiota? ¿No dije acaso desde el principio que no tengo ningún
interés en los clubes?”
“Sólo porque no tengas ningún
interés no significa que no vayas a participar.”
“Ese es un argumento frívolo. No
hagas conversaciones inútiles.”
“Ok...”
Horikita no tiene interés en los
clubes ni en hacer amigos. Cuando sea que le hablo, luce molesta. Me pregunto
si vino a esta escuela sólo por la educación o por la alta tasa de salida
laboral.
No me sorprendería que esa sea su
única razón, pero no parece natural.
“En verdad no tienes amigos, por
lo que veo.”
“Eso no es así. Ahora puedo
hablar contigo bastante bien.”
“Dices eso, pero no me cuentes
como uno de tus amigos.”
“C-Cierto, claro...”
Ya que quieres ir a ver los
clubes, ¿pretendes entrar a alguno?”
“No, todavía lo estoy pensando.
Pero probablemente no me una a ninguno.”
“Si no vas a unirte a un club,
¿por qué vas a visitar la feria de clubes? Qué extraño. ¿Vas a usar los clubes
como pretexto para hacer amigos?”
¿Cómo puede ser tan lista? No,
probablemente yo sea demasiado fácil de interpretar.
“Como fallé el primer día, los
clubes son mi última oportunidad para hacer amigos.”
“¿Acaso no podrías invitar a otra
persona además de mí?”
“¡Es porque no tengo nadie más a
quién invitar que estoy en problemas!”
“Eso es verdad. Sin embargo, no
creo que pienses seriamente las cosas que dices. Si en verdad quieres un amigo,
probablemente deberías hablar con más entusiasmo.”
“Como eso no es posible para mí,
estoy atravesando el camino de la soledad.”
Horikita volvió a comer su
sándwich.
“No puedo entender realmente esa
forma de pensamiento tan contradictoria.”
Quiero amigos, pero no puedo
hacer amigos. Parece que Horikita no podía comprender eso.
“¿Horikita, alguna vez hiciste
actividades de club?”
“No. No tengo experiencia en
ningún club.”
“¿Entonces tienes experiencia en
otros temas que no sean clubes? Oh, ya sé, ¿en cosas como esto y aquello?”
“¿...Que tratas de decir? Siento
la malicia en tus palabras.”
“¿Malicia? Ni siquiera te dije a
qué me estaba refiriendo.”
Recibí un manotazo en mi costado
con un movimiento rápido.
Reflexivamente tosí por su
inesperada fuerza.
“¡Oye, ¿por qué fue eso?”
“Ayanokouji-kun. Ya te advertí,
pero parece que no escuchas lo que digo. Recuerda que soy capaz de infligir más
dolor que recién.”
“¡No a la violencia! ¡La
violencia no resuelve nada!”
“¿En serio? Desde el comienzo de
los tiempos la violencia ha existido porque es la manera más eficiente de
resolver los problemas. Es la forma más rápida de hacer que la otra parte
entienda o de ignorar los deseos del otro. Después de todo, incluso los países
emplean la policía quienes usan armas y violencia para arrestar a las personas,
¿cierto?”
“Sí que hablas mucho...”
Me brindó un gran discurso,
afirmando que ella no hizo nada malo. Cuando fuera que hacía un comentario,
decía cosas absurdas y las usaba en una réplica maligna.
“De ahora en más, usaré la
violencia para corregir los errores de tus modales. ¿Qué tal eso?”
“¿Cómo te sentirías si yo te
dijera lo mismo a ti?”
Me pregunto por qué dicen que los
hombres que levantan su mano contra las mujeres son lo más bajo y cobarde entre
los hombres.
“No importa, ¿no crees que eso
nunca pasará? Después de todo, nunca digo algo que no debería.”
Esa fue una respuesta bastante
excéntrica. Parece creer que ella nunca se equivoca.
Aunque luce y actúa de manera
civilizada, es malvada por dentro.
“Entiendo, entiendo. Tendré más
cuidado de ahora en adelante.”
Rindiéndome a la idea de invitar
a Horikita, miré por la ventana. Ah, el clima es bueno hoy.
“Actividades de club... ¿no? Ya
veo...”
Horikita murmuró mientras
reflexionaba sobre algo.
“Sólo un rato después de clases,
¿cierto? Iré contigo.”
“¿Qué quieres decir con eso?”
“¿No lo dijiste tú mismo? Que
querías ir a la feria de clubes.”
“Oh, cierto. Nunca pretendí
quedarme mucho tiempo. Después de todo, sólo estaba buscando una excusa. ¿Está
bien?”
“Sí sólo es por un rato.
Entonces, te veo después de clases.”
Tras lo cual, retomó su almuerzo.
Parece que decidió acompañar mi intento de hacer amigos.
Antes dije que era desagradable
hablar con ella, pero su actitud parece estar cambiando para mejor.
“Verte tratar de hacer amigos y
fracasar suena interesante.”
Olvídenlo, es desagradable.
2
“Wow, es más grande de lo que
pensé.”
Horikita y yo nos encontramos
después de clases para ir al gimnasio.
Casi el total de los presentes
eran estudiantes de primer año, había alrededor de cien personas esperando en
las cercanías.
Por la parte de más atrás,
estábamos esperando a que comenzara la feria.
Conforme entramos al gimnasio,
nos repartían panfletos con detalles sobre las actividades de club.
“Me pregunto si esta escuela
tiene algún club particularmente famoso. Por ejemplo... ¿algo como el club de
karate?”
“Muchos clubes de aquí parecen
ser de alto nivel. Hay bastantes miembros en varios clubes que son conocidos a
nivel nacional.”
Aunque esta escuela no es
particularmente conocida por sus deportes como béisbol o voleibol, no parece
que las actividades de los clubes sean consideradas al nivel de un simple
hobby.
“Incluso las instalaciones son de
alta calidad. Mira, tienen hasta cápsulas de oxígeno. Todo el equipamiento pone
en vergüenza el equipamiento profesional. Ah, pero parece que no tienen un club
de karate.”
“...Ya veo.”
“¿Qué, estás interesada en el
karate?”
“No, no particularmente.”
“Sabes, parece que una persona
inexperta lo tendrá difícil si se une a un club deportivo. Aun si alguien hace
su debut de preparatoria, probablemente sea suplente por una eternidad. No creo
que sea divertido.”
Todo aquí luce muy organizado y
ordenado.
“¿Eso no depende del esfuerzo que
cada uno ponga? Después de uno o dos años de entrenamiento, cualquiera puede
llegar a ser bueno.”
Entrenamiento... no creo que yo
sea capaz de poner tanto esfuerzo.
“No sabía que la palabra
‘entrenamiento’ existía para la gente que evita los problemas como tú.”
“¿Qué tiene que ver evitar los
problemas con esto?”
“¿Acaso alguien que evita los
problemas no evita también cualquier tipo de labor manual? Si declaraste que
evitas los problemas, deberías apegarte a tus palabras hasta el final.”
“No lo llevo tan lejos...”
“Si nunca te comprometes de esa
manera, nunca podrás hacer amigos.”
“Tus palabras lastiman mi
corazón.”
“Gracias por esperar, estudiantes
de primer año. Un representante de cada club les explicará las actividades y
cómo unirse. Yo soy Tachibana, la secretaria del consejo estudiantil y la
directora de esta feria de clubes. Encantada de conocerlos.”
Luego de recibir el saludo de
Tachibana, los representantes de club formaron una fila en el escenario del gimnasio.
Había varios representantes,
desde aquellos usando uniformes de judo hasta otras vistiendo hermosos kimonos.
“Oye, si llegas a cambiar de
opinión, trata de unirte a un club deportivo. Ese club de judo luce bien, ¿no?
Ese senpai se ve bien y muy alentador.”
“¿Qué parte de él luce bien y muy
alentadora? Ese gorila parece que podría matar a alguien en cualquier momento.”
“Probablemente te diga que el
judo es un deporte fácil.”
“¡Para por favor!”
Pensé que la conversación estaba
llegando a algún lado, pero ella sólo estaba siendo ruda otra vez.
“Aunque ese fuera el caso, los
clubes deportivos claramente no le dan la bienvenida a ningún novato, a juzgar
por cómo se están mostrando.”
“Deberían darles la bienvenida.
Cuanta más gente consigan, más dinero les dará la escuela y podrán comprar
mejor equipamiento.”
“Sólo estarían usando a los
nuevos miembros como forma de conseguir dinero...”
“Sería ideal reclutar un montón
de nuevos miembros, incrementar el presupuesto, y después hacer que sean
miembros fantasma. Necesitas poder manipular hábilmente las reglas en este
mundo.”
“Qué mal mundo... Tu manera de
pensar es ciertamente extraña.”
“Mi nombre es Hashigaki, y soy la
capitana del club de arquería. Supongo que hay muchos estudiantes a los que les
resulta algo simple y anticuado, pero es un deporte muy divertido y
gratificante. Les damos una cálida bienvenida a todos los nuevos estudiantes,
si están interesados, por favor únanse.”
Una chica vistiendo ropa de
arquería comenzó su presentación en el escenario.
“Mira, parece que sí reciben
novatos. ¿Qué tal si te unes? Para hacer más grande el presupuesto.”
“¡Unirme a un club por esa razón
es un rotundo no! Además, un club deportivo es un lugar de reunión para los
riajuus. Sin conocer a nadie no será divertido y probablemente lo abandone en
un instante.”
“¿Esa forma de pensar no es
resultado de personalidad retorcida?”
“Síp, absolutamente. Un club
deportivo es algo definitivamente imposible.”
De hecho, si pudiera querría
tener un trabajo de tiempo parcial que sea completamente permisivo y requiera
poco esfuerzo.
Además, es probable que sólo me
una a un club sólo si es fácil unirse, y que sea algo calmo y tranquilo.
“¡Tsu...!”
Conforme los representantes de
clubes presentabas los suyos uno a uno, Horikita de pronto se tensó. Estaba
mirando al escenario con su rostro pálido.
“¿Qué sucede?”
En su estado tenso, parecía que
no podía escucharme.
Yo también miré al escenario,
pero no vi nada particularmente extraño.
El representante del club de
béisbol estaba dando su presentación con el uniforme.
¿Acaso se enamoró a primera vista
de él? No parece que sea así.
¿Asombro? ¿Disgusto? ¿O quizás
disfrute? Para ser honesto, su expresión es compleja, lo que hace difícil
interpretarla.
“Horikita. ¿Qué pasa?”
“...”
¿En verdad no puede escucharme?
Se quedó mirando al escenario.
Dejaré de hablar y esperaré una
explicación.
El club de béisbol no parecía más
interesante que los demás.
Sin importar lo bien que den la
bienvenida a los novatos, o cuán atractivo sea su lugar de reunión y sus horarios,
no es más que otra presentación normal. No sólo el club de béisbol, todos los
clubes parecían bastante comunes. Si descubrí algo interesante con estas
explicaciones, era que existían clubes más chicos como el de ceremonia del té y
el de caligrafía, y que el número mínimo de personas requeridas para formar un
nuevo club es de tres.
Cada vez que un nuevo club
comenzaba su explicación, los estudiantes de primer año charlaban entre sus
amigos sobre el club anterior.
El gimnasio tenía un ambiente
animado. Los representantes de clubes y el profesor que supervisaba continuaron
con sus explicaciones. Deben querer captar tantos miembros nuevos como sea
posible.
Conforme los senpais acabaron con
sus explicaciones, bajaron del escenario y se dirigieron a algunas mesas.
Probablemente estén preparando un área de recepción para que puedan conversar
con los demás uno a uno y registrarlos.
Eventualmente, todas las personas
en el escenario bajaron hasta que sólo una quedó. Las miradas de todos se
concentraron en el escenario. Me di cuenta de que Horikita había estado mirando
fijamente a esa persona todo el tiempo.
Esa persona medía aproximadamente
1,70m de altura, lo cual no era tan alto.
Cuerpo delgado, cabello liso
negro.
Lentes finos, y una mirada
calculadora.
El estudiante delante del
micrófono miraba a los de primer año con una mirada tranquila.
¿De qué club será él, y qué
presentación nos dará? Me dio
curiosidad.
Sin embargo, mi interés se
desvaneció un segundo más tarde. Él permanecía en completo silencio.
Quizás su mente quedó en blanco.
Quizás se puso nervioso y su voz no salía.
“Haz tu mejor esfuerzo~”
“¿Olvidaste traer tus
recordatorios~?”
“¡Ajajaja!”
Los de primer año le lanzaron
esas palabras. Sin embargo, el senpai en el escenario no titubeó en absoluto. Ni
la risa ni el aliento parecieron alcanzarlo.
Incluso cuando las risas
comenzaron a acallarse, su apático rostro no cambió.
Los estudiantes empezaron a
preguntarse “¿Qué está haciendo ese senpai?” y en el gimnasio se oyó barullo.
Aun así, el chico seguía inmutable.
Sólo permanecía allí en silencio, mirando a los de primer año.
Horikita también veía al chico
con una intensa.
La atmósfera relajada
gradualmente mutó hacia una dirección inesperada. Era un cambió de humor
eléctrico.
Eventualmente, todo el gimnasio
quedó envuelto en una atmósfera tensa y silenciosa.
No se dieron instrucciones, y
nadie se atrevía a hablar—era un silencio aterrador.
Nadie podía abrir la boca para
hablar. Este silencio ya había durado 30 segundos...
El estudiante en el escenario comenzó
a hablar.
“Mi nombre es Horikita Manabu, y
soy el presidente del consejo estudiantil.”
¿Horikita? Miré a Horikita a mi
lado. Me pregunto si serán familiares...
“El consejo estudiantil también
está buscando estudiantes de primer año para reemplazar a los que se graduarán.
No hay requisitos estrictos para aplicar a la posición, aquellos que estén
interesados no deben estar afiliados a ningún club. Generalmente, no aceptamos
a candidatos involucrados con otros clubes.”
Su tono era suave, pero el
ambiente estaba tenso. Él sólo por su cuenta silenció a todo el gimnasio.
Por supuesto, no era su posición
como presidente del consejo estudiantil el que le daba ese poder. Horikita
Manabu también cargaba un aura poderosa. Su presencia dominaba todo el
gimnasio.
“Además, en el consejo
estudiantil no buscamos a personas con un pensamiento infantil. Esa clase de
persona no sólo no será elegida, sino que inevitablemente serán una mancha para
esta escuela. El consejo estudiantil es responsable de regular a los estudiantes,
pero la escuela espera mucho más. Aquellos de ustedes que estén interesados
pueden convertirse en candidatos potenciales.”
Luego de un discurso sin
titubeos, bajó del escenario y salió del edificio.
Como nadie se atrevía a hablar,
ninguno de los estudiantes dijo nada cuando se fue del gimnasio. Los
estudiantes no sabían que podría pasar si hablaban. Todos se sentían así.
“Gracias a todos por venir. De
esta manera, la feria de clubes llega a su fin. Ahora habilitaremos el área de
recepción para los que estén interesados en unirse. El área de recepción
permanecerá abierta hasta el final de Abril. Cualquier interesado después de
ese período puede enviar las solicitudes directamente a los clubes.”
Con la ayuda de la directora del
evento, la tensa atmósfera lentamente desapareció.
Tras lo cual, los representantes
de clubes abrieron el área de recepción.
“...”
Horikita seguía sin moverse en
absoluto.
“Oye, ¿qué sucede?”
Horikita no respondió. Mis
palabras no la alcanzaban.
“Oh, Ayanokouji-kun. ¿Tú también
viniste?”
Una voz considerada sonó. Es
Sudou. Mis compañeros Ike y Yamauchi estaban con él.
“¿Qué es esto, tres personas?
Parece que se están llevando bien.”
Sintiéndome celoso, le hablé a
Sudou.
“¿Tú también piensas unirte a un
club?”
“No, sólo estaba mirando. ¿Eso
significa que tú sí pensabas unirte?”
“Sí. He jugado básquet desde la
primaria. Creo que continuaré aquí.”
Siempre pensé que había algún
tipo de ejercicio al tener ese cuerpo—básquet tiene sentido.
“¿Qué hay de ustedes dos?”
“Sólo vinimos porque parecía
divertido y emocionante. También esperaba que ocurriera alguna clase de
encuentro predestinado.”
“¿A qué te refieres con encuentro
predestinado?”
Le pregunté a Ike luego de
escuchar una meta cuestionable, y respondió orgullosamente con los brazos cruzados.
“Mi primer objetivo es conseguir
una novia. Así que esperaba que sucediera algún encuentro predestinado aquí.”
Así que se trataba de eso. Tener
novia parece ser una parte esencial de la vida escolar ideal de Ike.
“Ese presidente del consejo
estudiantil tiene un aura poderosa. Como si dominara el lugar.”
“¿Verdad que sí? Pudo silenciar a
todos.”
“Sí, sí. Por cierto, ayer hice un
grupo de chat para chicos.”
Ike sacó su celular.
“¿Tú también quieres unirte? Es
muy conveniente.”
“Eh, ¿está bien?”
“Por supuesto. Todos somos parte
de la clase D después de todo.”
No esperaba eso. Estoy encantado
de haber sido invitado a un chat grupal.
¡Ha llegado una oportunidad
perfecta para hacer amigos!
Mientras sacaba mi celular para
intercambiar número, vi que Horikita desaparecía en la multitud.
Preocupándome por ella,
involuntariamente dejé de moverme.
“¿Qué sucede?”
“No... no es nada. Intercambiemos
números.”
Reaccionando, compartí mi
información de contacto con los demás.
Horikita tiene la libertad de
hacer lo que quiera y de ir a donde quiera, y no tengo derecho a detenerla.
Por un momento consideré la idea
de seguirla, pero decidí no hacerlo.
NOTAS DEL TRADUCTOR:
(1) Persona extremadamente popular.
Traductor al Inglés: qbomb (Confused Translations)
Traductor al Español: nahucirujano
Corrección: Sin corrección.
Traductor al Español: nahucirujano
Corrección: Sin corrección.
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